Tsuki-dayo

Ni-juu Kyuu

"¡¿Queeeee?! ¿Estás en Tokyo, justo ahora?" Oikawa se quejó al otro lado de la línea, claramente molesto por no haber sido informado sobre el viaje antes. [T/N] solo podía reír nerviosamente, sintiéndose un poco culpable por no decirle antes. "De verdad quería sacarte a pasear..."

"Gomen, Tooru-nii..." Se disculpó, rascando su mejilla. "Pero podemos salir en cualquier otra oportunidad."

"Hmm... ¡Está bien! ¡Pero de verdad tienes que compensarme por ello!" Oikawa aceptó, de vuelta en su entusiasta actitud. Ella se lo prometió y tras intercambiar unas pocas palabras, terminaron su llamada. Dejó salir un suspiro de alivio y se volteó hacia el equipo, quienes caminaban hacia los dormitorios con la guía del capitán y vice-capitán de Nekoma, Kuroo Tetsuro y Kai Nobuyuki. Ellos esperaron su llegada en la estación de trenes y los recibieron ahí.

"¡¡¡OOOOHHHH!!!" [T/N] enfocó su atención donde se estaba formando la conmoción.

"¡¿Eso es...?! ¿Será...? ¡¿El Skytree?!" Tanaka preguntó entusiasmado con el líbero del equipo a su lado, igualmente ilusionado. Sus ojos chispeaban impresionados al mirar una torre blanca y roja de acero.

[T/N] juntó sus labios, haciendo su mejor esfuerzo para no reírse de los de segundo año. Después de todo, nunca habían estado en la ciudad y visto el Tokyo Skytree por sí mismos, así que era bastante normal para ellos pensar de esa manera.

El capitán con cabello de haber recién despertado, no tuvo problema en contenerse. Estalló en carcajadas tras su declaración, sosteniendo su acalambrado estómago. Por otro lado, Kai fue agradable y comprensivo, y les explicó que esa era solo una torre normal de la más amable manera posible.

Tanaka y Nishinoya permanecieron imperturbables por el hecho de que no era el Tokyo Skytree como esperaban. Apuntaban cada cosa que veían, como si fuera su primera vez contemplando un poste de luz o una reja.

"No pareces muy entusiasmada por el viaje." [T/N] se giró a su lado inmediatamente tras la franca observación de Tsukishima. Un bostezo escapó de sus labios tan pronto como terminó su oración. Ella bajó la mirada, sintiendo un repentino interés por sus zapatos. "¿No te gusta Tokyo?"

"No mucho..." Se encogió de hombros. "Tokyo es un lugar asombroso." Admitió con una sonrisa, mirando hacia donde sus emocionados senpais de segundo año estaban. "Solo... Me siento un poco incómoda."

Los ojos de Tsukishima se fijaron en la chica, queriendo decir algo, pero decidió no hacerlo.

"¡¡¿UOOOOHH?!!"

"¡¡L-L-LAS CHICAS SE HAN MULTIPLICADO!!" el chico con el mohicano rubio exclamó dramáticamente, cayendo en sus rodillas, separando los brazos y echando su cabeza hacia atrás.

[T/N] retrocedió y levantó una mano frente a ella para defenderse. A su lado, los ojos de Tsukishima se agrandaron y se retorcieron en irritación. Instintivamente agarró una manga de la chaqueta de la chica, acercándola ligeramente hacia él. Kiyoko avanzó para defender a [T/N], parándose silenciosamente frente a ella mientras sus ojos permanecían atentos al jugador de Nekoma.

"¿Lo ves, Tora?..." El tono de Tanaka era serio al estar parado junto al otro chico, al cual llamaban Tora. Abrió sus brazos y su rostro de transformó en modo Bodhisattva* una vez más. Brillantes rayos de luz eran emitidos en el fondo, dándole un aspecto 'sagrado'. "Estas son las deidades de Karasuno."

"¡Kuh! ¡Qué brillante!" Taketora (Tora) exclamó, usando sus manos como un escudo para cubrir sus ojos de la luz enceguecedora.

[T/N] sudó nerviosa, sintiendo escalofríos por toda su piel. Volvió a la realidad cuando sintió un tirón en su manga y se volteó para encontrar al alto rubio mirando hacia adelante con una apariencia levemente agitada.