Mamoru sonrió, disfrutando la expresión en los rostros de [T/N] y Tsukishima. Gentilmente deslizó sus manos de los hombros de su abuela. "Ha sido un tiempo, [T/N]-chan, Tsukishima-kun." Él dijo.
"Mamoru..." [T/N] murmuró por lo bajo, mirándolo fijamente. No había ningún error, aunque los colores de su cabello hayan cambiado de púrpura y violeta. Aún usaba los mismos piercings y la misma sonrisa en su cara.
"Este es mi nieto, Maru-chan." La dueña lo presentó, poniendo una mano sobre la de él. Se giró hacia él y sonrió. Él rio y sacudió su cabeza, sintiéndose ligeramente avergonzado por que lo haya presentado con ese infantil sobrenombre.
"Prefiero ser llamado Mamoru. Solo baachan puede llamarme Maru-chan." Desvió su mirada hacia [T/N], guiñándole un ojo. "Con una excepción por supuesto." Tsukishima alcanzó a ver ese guiño y frunció el ceño.
"Por favor muéstrales el lugar, Maru-chan." La dueña dijo. "Mientras tanto, iré a preparar las bebidas."
"Muchas gracias señora." El entrenador Ukai le agradeció para que ella luego abandonara el cuarto.
Mamoru observaba a su abuela irse, poniendo mucha atención a cada uno de sus movimientos. Una vez que estuvo fuera del hospedaje, volvió su atención a los invitados, sonriéndoles. "Bueno entonces, comencemos con el tour, ¿está bien?"
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Observando a ambos equipos trotar con las olas chocando con sus tobillos, [T/N] no podía evitar sentir lástima. Especialmente con el sol brillando sobre ellos, aunque estuviera a punto de ocultarse. El entrenador Ukai y Hitomi miraban a cada jugador cuidadosamente, asegurándose que nadie se haya escapado. Kiyoko por otro lado estaba hipnotizada por el mar, escaneando todo el horizonte.
"Parece bastante difícil, aunque lo necesiten por su estamina..." Takeda comentó silenciosamente, a lo que [T/N] asintió de acuerdo. Dio un trago mientras los jugadores jadeaban, arrastrando sus pies hacia adelante con las olas y la húmeda arena tratando de demorarlos, haciéndolos tropezar. Hinata estaba gritando al trotar, como lo usual, y Kageyama hacía su mejor esfuerzo para pasarlo, a pesar de que los dos estuvieran parejos.
"¡Muy bien, tres minutos más! ¡No paren!" Hitomi exclamó, ajustando sus gafas mientras que su otra mano descansaba en su cintura, dándole una fuerte vibra de autoridad.
"Hitomi-sensei luce tan bien con esas gafas..." Erika jadeaba siguiendo a sus compañeras. "¿Creen que se verá mejor si las usara con un bikini?"
"¡ERIKA!" Yuno la advirtió, tratando de presionar sus piernas al límite. Narita y Yamaguchi oyeron por casualidad las palabras de Erika, un sonrojo iluminando sus rostros.
"De hecho, yo también estoy algo interesada en verla en un bikini..." Misaki dijo, mirando hacia el cielo y dejando trabajar a su imaginación. "Ella tiene un cuerpo espectacular..."
"¡Misaki-senpai!" Yuno sudó nerviosa. "Por favor no alientes a Erika."
Los dos chicos bajaron sus cabezas, tratando de ocupar sus mentes con algo más. Dinosaurios, Pokémons, lo que sea. Retomaron su ritmo, moviéndose hacia adelante y uniéndose al lado de Tsukishima y Asahi.
"¿Qué pasa con tu cara?" Tsukishima preguntó, levantando una ceja por el rostro rojo de Yamaguchi.
"¿Te quemaste con el sol?" Asahi preguntó preocupado, mirando frenéticamente entre Yamaguchi y Narita.
"El sol ni siquiera está tan fuerte..." Tsukishima dijo.
"¡NO ES NADA!" Ambos, Yamaguchi y Narita gritaron nerviosamente, manteniendo sus cabezas gachas mientras continuaban incrementando su velocidad.
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Tsuki-dayo
Fanfiction[T/n] es miembro del equipo de voleyball femenino de Karasuno. Como Hinata y muchos otros jugadores, ella es apasionada sobre el voleyball y su adrenalina corre cuando toca el balón. Está en la misma clase que Hinata, y es cercana a el junto con Kag...