Una Llegada Inesperada. (Big Time Rush)

Capítulo 28

El sonido de una potente voz lo hizo despertar. No sabía donde se encontraba, ni como llegó ahí. Hasta que recordó lo que sucedió en la calle, de camino a la casa.

Flash-Back (Narra Kendall)

Carrie y yo salimos al notar que los demás no estaban. Se fueron sin avisar, mientras Carrie y yo dormíamos. Pensé que James tenía una sorpresa para ella y ya que yo soy el tío favorito de Carrie me dejaron a mi a cargo.

-Tío Kendall?, Ya habran llegado los demás a la casa?.
Preguntó la pequeña Carrie, mientras terminaba su helado.
-Si, creo que si. Deberiamos regresar para que no se preocupen y si no han regresado aun podemos ordenar pizza y ver una película, que piensas?.
-La quiero con mucho queso!
-Esa es mi niña!-Dije con una gran sonrisa.
Ambos salimos de la heladería.

Unos minutos después, ya faltaba poco para llegar casa.
La calle estaba muy sola y los autos pasaban de vez en cuando. Tenía un mal presentimiento, asi que le dije a Carrie que avanzara más rápido.
-Tío Kendall, pasa algo?.
-No, pequeña. Sólo debemos caminar más rápido.
En ese momento sentí la presencia de alguien atrás de nosotros. Volteé ligeramente y vi a un hombre de casi mi misma estatura, pero con el doble de cuerpo que yo y algo me decía que no tenía buenas intenciones.

-Carrie, camina y no mires atrás.-Dije tomándola de la mano y empezando a caminar a paso más rápido. Sólo avanzamos unos cuantos pasos y nos topamos con otro tipo frente a nosotros.
-Apartate de el camino!, Dejanos pasar!.
De repente sentí como me tomaban por atrás de el cuello y colocaban un cuchillo a pocos centímetros de él.
-Escuchame, bien!. Te callas y tú y la niñita vienen con nosotros.
-No, llevenme a mi. Matenme si quieren, pero a ella no le hagan daño.
Los tipos sólo rieron a carcajadas y el que estaba libre corrió a atrapar a Carrie.

-Sueltala!, Dejala en paz!.
Empeze a forcejear, pero no lograba soltarme.
-Calmate!. Recuerda que si quiero puedo cortarte la cabeza. Llevatela al auto.
En ese momento lanze mi cabeza hacia atrás para golpear al tipo en la frente, haciéndolo retroceder unos cuantos pasos. Volteé y golpee a el tipo que sostenía a Carrie, haciendo que la soltara.
-Carrie, corre!!!.
Dije y ella empezó a correr con todas sus fuerzas. Pero no llegó muy lejos ya que otro tipo que no sé de donde salió la atrapó y le colocó una manta en la boca y la nariz y quedó inconsciente en pocos segundos.

-Carrie, no!!!.
En ese momento sentí como me golpeaban en la parte trasera de mi cabeza. Caí inmediatamente al piso, mientras sentía como un ligero hilo de sangre bajaba de mi cabeza hasta mi nuca. Mi vista empezó a nublarse y lo último que pude ver fue como subían a Carrie a una camioneta color negro. Parecía una muñeca de trapo, no gritaba, no se movía, no hacia nada.
-Ca-Carrie.-Intenté levantarme con las pocas fuerzas que me quedaban, pero no logré nada el golpe me había dejado muy aturdido-Carrie... N-no te v-vayas...
Me desconecte por completo de la realidad.
Fin de Flash-Back.

Despertó con un horrible dolor de cabeza. Aun estaba un poco aturdido por el golpe. Trató de incorporarse, pero apenas lo logró. Todo estaba oscuro y se dio cuenta que no era la habitación la que estaba oscura, él tenía los ojos vendados. Volteó hacia todos lados, no escuchaba nada, hasta que él empezó a preguntar por Carrie.
-Carrie, princesa?... Carrie, donde estas?.
No escuchaba nada claro, sólo puros balbuceos. Al parecer no eran los únicos ahí.

-Shhh...!, Ya callense!.
Dijo un hombre entrando en la habitación, pero los balbuceos no paraban.
-Dije que se callen, mierdas o este momento mato a cualquiera de ustedes!.-El ruido empezó a desvanecerse, hasta quedar en completo silencio-Asi. Que les costaba hacer eso?... Veo que ya despertarse. Ya era hora.
Dijo dirigiéndose a Kendall.

Se sentó en una silla.
-Por qué demonios nos trajeron aquí?.-Preguntó Kendall tratando de incorporarse por completo.
-Callate!. Lo sabrás en su momento.
-Donde está Carrie?.
-Descuida, está junto a ti.
-Quiero verla.
-No es necesario que lo hagas.
-Si lo es. Quiero verla. Solo así puedo estar más tranquilo.
-... Bien.-Se acercó a él y le quitó la venda de los ojos.

El rubio volteó a su derecha y vio a Carrie atada de ambas manos y tenía una mordaza en su boca. El rubio vió una gran desesperación en su mirada, estaba aterrada. Sintió como si le arrancaran el corazón en ese momento.
-Carrie, princesa. No te asustes, yo no dejaré que nada te pasé. Sólo tranquilizate.
-Que patético!.
El rubio volteó hacia el hombre. Aparentaba tener  menos de 40 años, cabello negro y ojos marrones. En su mirada se notaba que no tenía ninguna buena intención.

Miró a Carrie y notó que ahí estaban junto a ella 6 niñas más, circulaban entre los 6 y 9 años, todas en las mismas condiciones de Carrie. Estaban confundidas, pero sobre todo aterradas. No entendían lo que estaba sucediendo, pero sabían que estaban en peligro.
-Que demonios es lo que quieren?.
-Ahí viene quien responderá todas tus preguntas.
Un hombre entró en la habitación. Era de casi la misma edad de su compañero, cabello negro y ojos grisáceos. Su mirada era más profunda, denotaba más maldad que la de su compañero.
-Vaya, ya despertó el rubiecito. Pensaba que estabas esperando la almohada y una mantita.
-Por qué nos trajeron aquí?, Que es lo que quieren?.

El tipo estaba apunto de hablar, hasta que de repente escucharon el sonido de un celular. Alguien estaba llamando a el rubio.
-Quien es?.-Preguntó el que al parecer era el líder.
-Es ese tal Carlos otra vez.
Respondió el otro hombre, mientras tomaba el teléfono que se encontraba en una mesa cerca de Kendall.
-Es tu novio, rubiecito?.
-Idiota!.-Dijo para si.
-Y que hago?, Contesto?.
-... Dámelo.

Su compañero le entregó el aparato y respondió poniendo el altavoz.
-Kendall, donde demonios estás?, te he llamado durante horas a ese maldito telefono y no respondes. Donde está Carrie?.
-Descuida, nosotros los tenemos.
-Qué?, Y-y dónde están?.
-Eso a ti no te interesa.
-Claro que me importa!, es mi amigo y mi sobrina.
-Pues si tanto te importan debes pagar por sus vidas. Debes darnos $10,000 dólares o de lo contrario no viven para contarlo.
-Qué?, Y de donde piensas que sacaré todo eso?.
-Los cantantes ganan bien, o no?, estoy seguro de que no te hará falta. Dejarlo en en a fw las bancas de el parque a esta misma hora y podrás volver a verlos.
-A esta misma hora?.
-Qué?, Tienes algún problema?.
-No, no, lo llevaré mañana, no se preocupen. Sólo no les hagan daño, por favor.
-Tienes hasta mañana a esta hora o los mataré.
Cortó la llamada.

-En serio nos dejaras ir?, A todos?.
-Eso depende de ti amigo... Aunque pensándolo bien, tal vez... Te enterarás de eso hasta mañana. Descansen... Aunque deberían estar alerta, ya saben, por si falta alguno de ustedes. Vamos.
Ambos tipos salieron de la habitación, dejándolos a todos
en la profunda oscuridad.