Capítulo 29

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A la mañana siguiente todas las niñas se despertaron con los gritos de sus captores. Incluyendo a Kendall, quien se había quedado dormido sin saberlo, ya no pudo mantenerse despierto y fue el último en caer por el sueño.
-Levantense de una buena vez!-Dijo uno de los tipos.
-Que demonios quieren?.
Preguntó Kendall con tono molesto.
-Al parecer te despertarse de malas.-Dijo el mismo tipo pateándolo en el estomago haciéndolo caer.
-Oye, calmante!. Necesitamos tener a la mercancía en buenas condiciones.
Dijo el otro a su compañero y luego volteó a ver a Kendall, quien se retorcía de el dolor en el piso.

-Saldré un momento y luego iré por el dinero.
-Y se los entregaremos?.
-Yo te avisare luego. Por ahora sólo controla que no intenten una estupidez como intentar escaparse.
Salió de la habitación, mientras otro tipo entraba. Este era diferente a los otros, ojos azules, cabello claro como el de Kendall y la tez blanca. Su mirada no era tan profunda, ni oscura. Se veía como alguien de fiar.
-Oye, donde fue Jack?.
-No específico donde. Ya sabes como es él.-Respondió el otro tipo sentándose en una silla cerca de ahí.
El otro volteó hacia donde se encontraban las niñas.

-Oye, no crees que deberíamos quitarles la mordaza y darles de comer?.
-Si, buena idea. Luego podemos desatarlos y tomamos el té todos juntos, mientras nos hacemos trenzitas. No digas estupideces, Jhonn.
-Pero solo miralas. Jack dijo que debíamos mantener a la mercancía en buenas condiciones. Miralas parecen moribundas... Ya con este tipo no sé si esta pálido porque tiene hambre o ya es así.
-... Miren quien habla.
Dijo Kendall por lo bajo. Ese tipo era mucho más pálido que Kendall, el ni siquiera tiene la piel tan blanca.
-Deberíamos darles algo de comer o morirán de hambre.

Mientras tanto...
-Ya tienes el dinero?.
Preguntó Logan a su amigo latino.
-Si, ya lo tengo.-Respondió él entrando en la casa.
-Cuanto tiempo falta?.
Preguntó James, obviamente más preocupado que los demás.
-Como cuatro horas.
Respondió el más bajo.
-Espero que estén bien, ambos. Si algo llega a pasarles no se como reaccionaria, pero tomaría venganza.
-Ya somos dos. Pero ese sujeto no menciono nada de donde podrían estar.
-Y no escuhaste nada de fondo en la llamada?.
Preguntó Logan.
-No, no escuché nada.
-Deberíamos llamar a la policía. Ellos sabrán que hacer.-Propuso Dustin.
-No creo que sea conveniente. Podríamos poner en peligro la vida de Carrie y Kendall.
Dijo Carlos. Luego subió a su habitación para arreglar los ultimos detalles ya que él haría la entrega.

-Bien, les trajimos algo de comer.-Dijo el tipo que al parecer se llamaba Jhonn.
Su compañero cerró la puerta y les entregaron un pequeño sándwich a cada uno.
-Como esperan que coman si tienen la boca cerrada?.
Preguntó el rubio.
-Pues se las quitaremos.
-No, no lo hagas. Gritaran y nos delataran.
-No lo harán, si saben lo que les conviene... Tú, habla con ellas y trata de calmarlas.

-Escuchenme, pequeñas. No se preocupen, van a estar bien. Yo no permitiré que les suceda algo malo. Así que no vayan a gritar, mantenganse tranquilas, sí?.
Ellas asintieron ligeramente.
Los hombres empezaron a desatarlas y las niñas arrasaron con el sándwich como si no hubiesen comido por días.
-Ya no hay más?.-Preguntó una de las niñas.
Tenía entre 7 a 8 años, cabello rubio y ojos claros iguales a los ojos de el rubio.
-No, ya no hay. Conformate con lo que te dimos.
-No, te preocupes. Les daré a todas de el mio.-Dijo el rubio,mientras partía el sándwich en pedazos para entregarle uno a cada niña.
Ellas lo tomaron y rápidamente lo llevaron a
su boca.

-Qué idiota eres!. Prefieres no comer para darles a estas niñas que ni siquiera conoces.
-Lo hago porque yo si tengo corazón.
-Pffff... Eres patético.
Se sentó en la misma silla.
-Gracias.-Dijo la pequeña niña rubia con timidez.
-No hay de que, pequeña.

Las horas fueron pasando hasta que llegó el momento de la entrega. Los cuatro chicos se encontraban en el parque, esperando la llamada de el tipo para que les diera alguna instrucción o algo así.
Luego de tanta espera por fin recibieron la tan esperada llamada. Carlos hizo todo lo que el tipo le dijo, dejo el dinero en una de las bancas y luego se alejó como si nada.
Pero había algo con lo que ni siquiera el mismo Carlos contaba.

Una Llegada Inesperada. (Big Time Rush)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora