Capitulo 11

265 14 9
                                    


"La muerte en el paraíso"


Era extraño, no, aun mas que eso era completamente extraño portar ahora unas las donde se supone que siempre estaban solo la espalda.

Aun más extraño era poder moverlas y sentirlas, era...no había palabra para describirlo ni mucho menos para explicar lo que era sentirlas.

—¿Cómo te sientes?. —miro el reflejo del espejo hacia donde estaba su primo con una sonrisa tierna en su rostro.

—bien. —fue lo único que dijo para luego volver la vista hacia sus alas, hace u rato habían vuelto a la mansión esperando para volver a casa nuevamente, ahora la concentración de la ultima recluta del grupo estaba sobre los dos objetos que sobresalían de su espalda, esas dos objetos semejantes a los de las aves solo que estas estaban teñidas de plata desde su raíz hacia la ultima pluma estaba cubierta de tal.

Ahora era igual que los demás. Un ángel.

—son solo alas Destiny. —Mithael estaba sentado sobre el sofá, no se dejaba ver pero de vez en cuando levantaba la vista hacia la pelinegra solo para poder observarla tan animada y sorprendida por sus nuevas alas, su sonrisa, Lo ocultaba pero se había vuelto adicto a esa sonrisa brillante de la ojiazul.

—lo sé pero...es sorpréndete. —se giro en su lugar para verlas mejor, estas se abrían de vez en cuando. —¿Cuándo podre volar?. —pregunto con una sonrisa entusiasmada y se giro hacia ellos.

Mithael sonrió de lado y los demás rieron divertidos.

—te enseñaremos a volar. —Anael fue hasta ella y la rodeó mirando sus alas. —ellas te podrán sostener en los aires y su fuerza te impulsara en los vientos pero debes entrenarlos.

—¿es difícil?. —lo miro. —no...soy una fanática de las alturas. —Anael rio y negó lentamente con la cabeza

—te gustara, es genial arriba. —la animo, Destiny volvió sus mirada hacia el espejo. —acostúmbrate primero a ellas, su peso y su agilidad, luego se verá lo demás. Pasó a paso pequeña. —guiño el ojo a lo cual ella sonrió aun mas.

—bien, entiendo. —Anael le dio una última sonrisa y salió por uno de los corredores, seguido de Daniel.

Mithael le dio una última mirada pero esta vez no la quito de encima, se veía adorable con esa sonrisa e inocencia de una niña con un juguete nuevo, hace mucho, mucho tiempo que no sentía nada como esto.

Ni siquiera con ella lo había sentido, pero con Destiny...con ella despertaba cada emoción y sentimiento, volvía esa necesidad y sentimiento de protección pero esta vez con más intensidad ¿Por qué?. Será su inocencia, su ingenuidad.

O simplemente ella.

—son hermosas. —Destiny lo miro al momento que lo dijo, no pudo dejar de sentir sus mejillas sonrojadas, bajo la mirada al sentir sus penetrantes ojos dorados sobre ella. No lo podía sostener —aprenderás a controlarlos. te enseñare.

—gracias. —susurro. Mithael se levantó y camino hacia ella esta seguía sus movimientos de cerca.

—lo que hiciste fue riesgoso Destiny. —entrecerró los ojos y se cruzo de brazos

—que hubieras hecho tu, Mithael, los... hubieras dejado morir. —Mithael llego a ella, Destiny tuvo que subir la mirada un poco ya que este era una cabeza y media más alto que ella.

—te expusiste, pusiste tu vida en peligro, ellas pudieron matarte. —desvió la mirada. —y no cumpliste con la orden de tu padre.

—no podía hacerlo. —se dejo caer en la pared detrás de ella. —no podía simplemente matarlarlsas y ya, ella...

DESCENDENCIA DE ARCÁNGELES © - Ángel plomo Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora