Capitulo 43

106 2 0
                                    


"Por los que amo"

Tanto Mithael como Destiny reingresaron al castillo, Gabriel por supuesto estaba allí, la esperaba, solo a Destiny por supuesto, la actitud de su hija lo había hecho pensar en mucho, sobre todo en su esposa, unos días antes de ocurrido ese acontecimiento que los marco.

—Padre. —ambos se sorprendieron de verlo parado y sosteniéndose en una columna con la vista fija en la puerta. Destiny miro a Mithael como deseando saber lo que debería hacer.

—Lamento haberte presionado en el comedor, no era mi intención saber sobre...

—No, perdóname tu. —Gabriel la miro acercarse con la mirada gacha. —Mi comportamiento fue hostil y desalineado, no debí faltarte al respeto frente a los demás, solo estas preocupada por mí y mal interpreté eso.

—Quiero que entiendas que eres lo que más amo en esta vida Destiny, no tienes idea del gran dolor y vacío que sentía cundo te perdí, a ambos. —miro a Mithael pero este ya se había retirado de la escena.

—Supongo que Mithael quiere darnos nuestro espacio, como...padre e hija.

Sonrió y Gabriel copio ese gesto.

—Temí perderte. —confeso mirándola.

—También yo. —dijo la pelinegra. —Solo que hay veces que me siento tan...asfixiada, tan confundida de...

—¿Por qué? —su pregunta la tomo desprevenida. —¿Qué te confunde? ¿Por qué te sientes así?

—Es solo que...—mordió sus labios pensando alguna salida. La encontró a tiempo. —Mi batalla, mi batalla de la luz se acerca y aun no me siento lista, no quiero quedar mal o acerté quedar mal, mi primo, Anael y Mithael saben pelear muy bien y yo solo se manejar una espada de un lado a otro. —Gabriel rio entre dientes y tomo con suavidad el mentón de su hija.

—Todos ellos tienen años entrenando, cientos de años pequeña y tu solo llevas con nosotros casi doce meses, es demasiado poco comparado con ellos, además eres mi hija, nadie en este mundo puede decir o hacerte sentir lo contrario o menos, tenlo en cuenta siempre que eres hija de un arcángel.

—Y una humana. —no dejo pasar eso.

—Así es, y de una humana. —ambos ya se habían vuelto expertos ocultando emociones en la mirada.

(...)

Gabriel escolto a su hija a la pequeña sala donde se encontraban todos reunidos, busco con la mirada a Mithael encontrándolo en el piano de cola color caoba que se encontraba a unos metros de la ventana hacia las cascadas, Mithael la miro y le sonrió de lado.

—Oh, están juntos, que bueno. —comentó Lara sentada en el sofá con un juego de té y algunos pastelillos frente a ella.

—Es mi hija, claro que debemos estar juntos. —Destiny miro el té servido sobre la mesa y lo recordó al instante.

—Querida ven a tomar el té conmigo. —Gabriel libero su brazo para que pudiera ir con su tía, Destiny miro los bocaditos dulces y las hierbas nadando en las tazas de porcelana coloreando sus aguas de naranja opacó.

—¿Quién lo sirvió? —le pregunto.

—Camile. —le contesto. —Enseguida ingresara con algunos bocaditos salados para los chicos. —le guiño el ojo y supo que ese era su momento para hablar.

Como si la hubieran invocado Camile ingreso con una bandeja de plata y algunos bocaditos perfectamente acomodados.

—Muero de hambre. —dijo Gael tomando un bocadito de la bandeja por detrás de ella, Camile hizo un gesto de sorpresa.

DESCENDENCIA DE ARCÁNGELES © - Ángel plomo Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora