{SIGUE NARRANDO JULIAN.}
—Adiós –dijo, para luego separarse rápidamente de mi lado. Y dejarme nuevamente solo, esa soledad otra vez se hizo presente en mí al tenerla lejos. Escuche como se despedía de Lou y de Yol, y luego solo el sonido de la puerta al cerrarse indicándome que se había ido, nuevamente.
Salí de la cocina y camine hasta el living dónde se encontraba Lou mirando como Yol seguía jugando con sus cubitos, a veces deseaba ser niño y ver el mundo con es mirada infantil de que todo era perfecto, de que todo se podía solucionar, dónde no había dolores como el del amor, solamente un simple dolor de estomago o cabeza, que tu mamá te daba un remedio, un abrazo y un beso, y adiós dolor. Ojala todo pudiera ser así cuando somos más grandes.—Julian, yo lo siento, Oriana vino ayer por la noche y se quedo – la interrumpí antes de que siguiera
— No hay problema Lou, algún día íbamos a tener que vernos de nuevo – dije sentándome a su lado
— Ven aquí – dijo ella mientras me tomaba y hacía que apoyara mi cabeza en sus piernas mientras empezaba acariciar mi cabello.
—Duele Lou – admití
—Lo se mi pequeño, pero tu eres fuerte y ya verás como todo se soluciona – me sonrío dándome fuerzas mientras yo solo pude dejar escapar una pequeña lágrima solitaria
—No llore tío Julian– dijo Yol haciéndome pucherito mientras llegaba a mi lado y me quitaba la lágrima que se me había escapado, eso me sacó una pequeña sonrisa.
Me quede durante dos días con Lou y Yol, y en verdad me habían subido bastante el ánimo. Lou nos había regaloneado tanto a mí como a Yol, vimos todas las películas animadas, jugamos a muchas cosas, tuve conversaciones reconfortantes con Lou mientras la pequeña Yol dormía. También en las noches había llamado a mi mamá para hablar con ella, en verdad la extrañaba en estos momentos, no le había contado todo lo que había pasado con Oriana, simplemente le dije que habíamos discutido fuerte y que las cosas habían acabado, y mi madre me supo entender y solo se dedico a darme palabras de aliento y hacerme reír de vez en cuando, al igual que mi hermana.
—Adiós Lou – deposite un beso en su mejilla, mientras a Yol le depositaba uno en su frente, ella estaba en brazos de Lou – Gracias por todo
—No tienes que agradecer Julian, ya sabes que mi casa es tu casa y la de los chicos cuando quieran – me sonrío
—Adiós tío Julian– me gritó Yol desde la puerta mientras yo esperaba el ascensor, yo solo le tire un besito que la hizo reír, amaba a esa pequeña.
Conduje con cuidado hasta mi departamento, coldplay iba de fondo en mi auto. No había sabido mucho de los chicos estos últimos dos días, había desconectado todo de todos, simplemente ocupe el celular para comunicarme con mi madre o con Yolanda. Cuando prendí el celular tenía una que otra llamada perdida de los chicos, y mensajes pero en verdad no había leído ningún mensaje ni tampoco de vuelto ninguna llamada, creó que tenía dos mensajes por cada uno de los chicos, pero simplemente no quería leerlos no tenía ánimos.
Entre a mi departamento y todo estaba tal cual lo había dejado el último día, bote algunas latas de cerveza que había tomado durante los últimos días y los restos de comida que estaban en los platos sucios, para luego lavarlos. Cuando por fin termine de ordenar todo decidí ir a darme una ducha, cuando entre a mi pieza empecé a sacarme la polera y a tirarla sobre la cama, estaba desabrochando el cinturón cuando me di vuelta y todo lo que estaba haciendo perdió sentido.
—No puede ser... - fue lo único que pude decir.
{NARRA ORIANA}:Una pequeña lágrima corrió por mi mejilla al momento de salir del departamento de Lou, nunca pensé que ver a Julian nuevamente iba afectarme tanto. Cuando sentí su voz al momento de que Lou abrió la puerta, todo mi cuerpo se paralizó, no podía moverme, no podía creer que estaba escuchando su ronca voz después de una semana completa sin ella, y no solamente sin su voz, si no que sin sus besos, sin sus abrazos, sin sus sonrisas, sin él.
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Unbroken.
FanfictionLa muerte de un ser querido puede provocar dos cambios en una persona. Opción uno, ser fuerte y salir adelante. Opción dos, ser un estúpido y dejarte vencer. En mi caso es la opción dos, me deje vencer y que las sustancias y malas amistades se apode...