⇸A Light In My Window⇸ B.Baekhyun

Capitulo 1.

Verano del 2011.

Estábamos junto a mis padres y mi hermano mayor en el auto, yéndonos de vacaciones a las afueras de Bucheon. Mi hermano, Chanyeol, era el mayor. Tenía sólo once meses más que yo, y tenía aún la mentalidad de un niño pequeño... bueno, yo igual. Ambos íbamos en la parte trasera del auto, jugando y riendo, mientras apreciábamos el paisaje que había frente de nuestras narices. Abrí la ventanilla del auto y saqué mi cabeza, dejando que el viento mueva mis cabellos negros. Sonreí al sentir el viento fresco rozar cada rasgo de mi cara. Corrí algunos de los cabellos que estorbaban sobre mis ojos color café. Chanyeol empezó a molestarme y me tiré encima de él, peleando en broma nuevamente, mientras ambos soltábamos grandes carcajadas. Luego de que paramos, él se dirigió a la ventanilla que tenía a su lado y se quedó mirando el paisaje. Me acomodé en el asiento y rasqué mi cabeza... estaba aburrida. Me dediqué a mirar a mi mamá por el espejo retrovisor. Estaba ella con una gran sonrisa mirando la carretera... Y a veces pensaba el gran parecido que tenía con ella. Misma sonrisa y mismos ojos... podía decir que también saqué sus largas pestañas, lástima que yo no tenía idea de que saqué a mi padre, ya que no tenía... Jung Dong era mi padrastro, ya que mi mamá fue madre soltera, hasta que lo conoció, y debo admitir que era un gran hombre. Él iba manejando, y apenas podía se daba vuelta para observar a mi madre... y ella también. Ambos se dedicaban una gran sonrisa y seguían en lo suyo.

Park Sung era el nombre de mi madre, a la cual yo me parecía tanto. Mi hermano, creo que tenía el parecido a mi padre... pero aún dudaba de eso. Él estaba quedándose dormido en el asiento del vehículo de nuestro padrastro, asi que no podía molestarlo... Chanyeol y yo amamos dormir, y ambos respetamos eso uno del otro. Abrí la ventanilla nuevamente y apoyé mi cabeza sobre el asiento, dejando que el viento juegue por los pómulos de mi cara. Empecé a cerrar mis ojos y levemente empecé a desaparecer del mundo real. Sentía como el sueño me iba consumiendo y consumiendo de a poco, apagando la mecha que me mantenía encendida... escuché una frenada lo que hizo que abra mis ojos rápidamente, me sobre exalté y empecé a ver todo en cámara lenta. Desperté a mi hermano pero él solamente dormía plácidamente. Mi padrastro hacía maniobras extrañas con el auto y mi madre se sostenía del asiento, soltando unos lagrimones. Vi que el auto empezó a desviarse lentamente. Cerré mis ojos y tapé mi cara, pero fue demasiado tarde, ya que el impacto golpeó sobre el auto.

Luego, todo quedó negro, sumido en un profundo sueño.

Ahí me di cuenta de que nada era tan malo... no sentía nada, no sentía dolor. Tenía mis ojos cerrados, sin poder mover ni una sola parte de mi cuerpo, sin poder salirme del auto y salvar a mi familia. Sentía como la sangre recorría mi cuerpo entero. Acepté que todo se había ido de mí, y que sólo estos estúpidos pensamientos rodaban en mi cabeza... ni siquiera sé cómo tenía la consciencia suficiente para que estos siguieran de pie y no se vayan. Todavía sentía el impacto, lo esperaba... y venía. Ya estaba molestándome... solo quería dormir, buscar a mi familia donde quiera que esté.

Fue como un deseo concedido... cuando siento que todo se va, y ya ni sentía mi cuerpo... lo que visualizaba era algo increíble. Era cómo un paisaje sin final. Un lugar donde la gente caminaba sin cesar, y hacía lo que se les plazca. Parecía un mundo donde todo era como desearas, donde no había ni derecho ni revés para las cosas... simplemente, algo que uno nunca se podía imaginar.

¿Dónde se suponía que estaba?

Sentía un peso sobre mis ojos, al parecer tenía una clase de venda, lo que bloqueaba mi visión. Bufé. ¿Qué era lo que estaba pasando? Quizás todo es parte de una misma fantasía, quizás todo es un simple sueño el cual nunca quisiera despertar... sacudí mi cabeza e intenté mover mis manos, pero estas estaban inválidas. Sentía que mi cuerpo ardía, mi cara también. Sentía molestias, y muchas... pero a la vez, se sentía bien. ¿Acaso era un sueño, o estaba en una clase de estado vegetativo donde no estaba más que drogada? Nada podía explicarlo, pero podemos tomar en cuenta esa opción.

—Creo que ha despertado, —dijo una voz lejana, intenté buscarla con mis sentidos- ¿avisamos a sus padres? —Comentó la voz de un hombre-
—Si, yo creo que es lo mejor... pero recuerda, ella puede oírnos —comentó la voz de una señora-
—Mejor dejemos que sus padres entren... —musitó.

Mis ojos aún estaban cerrados, sentí unos pasos pausados de unos tacones, al parecer era mi madre, ya que con algunos sollozos me abrazó. Sentí sus reconfortantes brazos rodearme, pero sólo consiguió que gimiera de dolor. Me estremecí cuando se alejó.

— ¿Cómo te encuentras linda? —Preguntó acariciando mis cabellos-
— ¿Cómo está papá? —pregunté preocupada, sabía que no era mi papá, pero aun así era quien se ocupaba de mi- ¿Y Chanyeol? –Pregunté más asustada aún-
—Ellos se encuentran... bien —comentó luego de unos segundos- algo tristes, pero bien. Chanyeol se lastimó y se rompió algunas costillas —comentó- Jung Dong sólo se ha lastimado la cabeza pero se encuentra bien... —explicó- ambos —afirmó-
— ¿Y tú? —Pregunté buscando sus manos, ella las tomó-
—Estoy bien —musitó dulcemente- y estoy aquí, como debe ser... sólo me he lastimado, los más graves fueron tú y tu hermano –dijo adolorida
— ¿Chanyeol y yo? ¿Qué me ha pasado, porque no puedo ver? —Pregunté rápidamente-
—Tienes tus ojos vendados, y parte de tu cabeza... Te han operado —dijo entre algunos sollozos- pero no ha funcionado –dijo secamente.

Mi corazón comenzó a palpitar, y me estremecí.

— ¿Qué no ha funcionado? —Pregunté rápidamente-
—Has perdido la vista, hija —comentó rompiendo en llanto.

No tuve más contención que los brazos de mi mamá. Estaba recién operada y por eso mis ojos estaban vendados. Me habían operado por los nervios de la visión, que se han estropeado en el accidente. Pero fue irreversible. Lloré, pero sólo conseguí mojar las vendas. Mi madre tomó mis manos y las llevó a mi cabeza, donde tenía un pedazo de cabello rapado. Me dolía demasiado. No iba a volver a ver, nunca más iba a volver a tener mi vida como lo era... ¿por qué me había pasado esto a mí? ¿Qué he hecho para merecerlo? Pensar en eso sólo me hacía peor. Dormí, aunque sólo me hice la idea de que ahora todo se vería oscuro, como si estuviera dormida... siempre.

Veintisiete de noviembre.
Otoño del 2016.
Cinco años después del accidente.

Estaba en la habitación de mi nueva casa de Bucheon, una que no conocía. Estaba con un libro en mis manos, escrito en braille. No sabía mucho sobre estas cosas para ciegos, era un completo desastre. El remordimiento de lo que pasó aún está ahí, y Jung Dong me pide perdón todo los días que ve que no me encuentro bien. No fue su culpa, la causa del accidente había sido que el auto se fue de control porque algo había en la ruta... siempre se lo decía, pero él aún seguía con la culpa. Pero, si yo hubiera estado manejando y me hubiera pasado eso, también estaría mal si mi hijastra quedara ciega. Nunca salía a la calle. Terminé el colegio con dificultades, pero aun así logré mis metas. Nunca fui a la universidad, no tenía interés en hacerla. Me dediqué una vida en casa, como cualquier persona ciega. El apoyo de mi familia era incondicional, sobre todo por mi hermano Chanyeol. Él siempre se ocupaba de mi cuando ni Park Sung ni Jung Dong estaban. Luego, invertía el tiempo con algunos amigos que se había hecho en la ciudad y en hacerme divertir. Ahora era más dulce y más atento conmigo, demasiado sobre protector. Busqué con el tacto el marcador para el libro y lo puse en la página que me quedé. Lo puse en una de las estanterías de mi mesa de luz. Me puse de pie y tomé mis lentes negros oscuros que también se encontraban en la repisa. Me los coloqué y fui por el pequeño bastón que usaba. Bajé las escaleras ayudándome con mi otra mano por la baranda. Nunca tuve problemas bajando... no tan graves. Antes de seguir, escuché que algunos gritos y algunos insultos provenían de la planta baja... según tenía entendido, el living que estaba apenas empezaba la escalera.