Metal Fights! (Grunge, Glam & Thrash Metal Bands)

Capítulo 27: Obras de teatro infantiles.

Porque Madison y la palabra caridad no van tomadas de la mano. Por ello, vamos primero para saber qué ocurrió con Mustaine, porque sé que quieren saber qué pasó ahí.

- ¿Y ésto? ¿A qué vienes? -cuestionó el pelirrojo al ver a la rubia.

- Vengo a pagarte los daños que he causado -y le entregó una gran cantidad de dinero, claro que no era algo que ella ganó por su esfuerzo, era regalado de Daniel para ser usado en eso; pagar los daños-. Al final, fue todo mi culpa y haz tenido que pagar tú.

- ...¿te fumaste algo o qué? -cogió el fajo de billetes- Gracias, en todo caso, por querer pagar. No creí que lo hicieras.

- Fue por obligación, en realidad, porque podías demandarme y la idea no es tener problemas legales -se rascó la nuca, se le estaba olvidando el discurso y no quería decir algo tonto que arruinara la seriedad.

- Chucha, pude haberte demandado y ganar el doble de pasta -suspiró-. Lo bueno, es que haz tenido la voluntad para querer arreglar todo, eso es bueno; ahora, dame la cartera de Junior.

Entró en pánico porque no quería devolverla y salió corriendo hacia la van.

- ¡Donde Skid Row! -ordenó, muy ajetreada.

- ¿Ocurrió algo malo? -consultó el conductor.

- Qué va, ¡sólo quiero visitar a mi Rachel de mih hamoreh! -chilló en emoción.

No le respondieron, sólo hicieron caso a su orden, una vez llegaron a la residencia, notó que iban echando cosas en el maletero del automóvil de uno de los integrantes.

- Holii -saludó-, ¿me extrañaron mucho? -hizo ojitos de cachorrito.

- Algo así, el culo de Snake no tanto -contestó Sebastian y se saludaron con un beso en la mejilla. Ambos rieron.

- ¿Vas saliendo?

- Sí, con los chicos vamos a hacer un trabajo de caridad.

- ¿En serio? ¡Genial! ¡Yo también quiero  ayudar! -ofreció tras haberla cagado tanto, quería ser voluntaria para mejorar los problemas.

- Claro, es una obra de teatro infantil, puedes interpretar a la princesa que originalmente haría yo, ¿te parece? -asintió- Te dejo el libreto, yo voy a buscar a los otros que se andan disfrazando.

- Vale -lo cogió y entró en el coche para leer el libreto.

Era una obra infantil, por supuesto, que suponía ser una adaptación de la bella durmiente, iba a pasar dormida casi toda la película... ¿Qué podía salir mal?

*medio segundo después*

Ah.

La cosa debía ser para niños, ¡niños inocentes! ¡Hablamos de Madi, nada puede salir bien! Bueno, al menos esa tarde los casi cincuenta infantes presentes aprendieron que los preservativos no pueden servir de globos.

*flach baccc*

- Oye, Madi, ¿me pasas los globos para decorar?

- Claro, ¿dónde están, Rreichel?

- En la bolsa verde.

- Oh, vale -le entrega la bolsa roja que era la de condones.

Bueno, es por eso que tampoco es que combina bien su ropa si es daltónica.

*fyn del flach bac*

- ¡Es culpa de Rachel que tampoco revisó los empaques! -chilló Scottie.

- ¡Es culpa de Scottie que los infló! -chilló Rachel.

- ¡Es culpa de todos nosotros porque los colgamos entre todos! -chilló Sebastian.

Y... ¿quién dijo que ese fue el último fail? Ella confundió también una caja de rosas que debían caer desde el techo del escenario para adornar la escena del beso, y entregó la caja de los consoladores, de paso, le cayó uno en la frente y ahora anda con un chichón enorme.

- ¡¿Y POR KE CHUCHA TRAJERON PARA UNA OBRA INFANTIL JUGUETES DE ADULTOOOS?! -chilló enojada por el dolor de cabeza.

- Es que nos íbamos ir al puticlub después de ésto, por eso eché todas las cajas juntas y les puse colores para que no ocurriera justo ésto -Bach hizo un facepalm épico-. Bueno, a la siguiente obra de caridad será.

Asintieron, prefiriendo tomarse con humor el fastidioso suceso.

...

- Chicos, tengo algo que preguntarles... -murmuró Zoe, muy inquieta- Algo que no sé si querrán aceptar -se movía de lado a lado, demostrando que de verdad le daba vergüenza hablar.

- ¿Sí, linda? -Eddie la miró fijo, demostrando su característica compasión.

- ¿Ocurre algo? -insistió Jeff, cruzando los brazos.

- Es que, tengo que confesar una cosa, no sé si les gustará o no pero necesito contarles la verdad.

- ¿Y qué es? -insistieron varios casi a unísono.

- Un amigo mío es periodista y me contrató para que los conociera a ustedes y convencerlos para que tocaran en un evento que él organiza, donde tocarán dos bandas más. Si he simpatizado con ustedes, ¡me cayeron muy bien! -admitió- Les tengo mucho cariño, pero mi trabajo pronto finalizará y eso me apena...

- ¿Eso? ¿Por un concierto? Pero para eso no era necesario tener que contratar a alguien para simpatizar... ¿o sí? -dudó Stone.

- ¿Un concierto? -dudó Ament- Pues, habrá que conversar legalmente.

- Es que, muchos creen que no aceptarán, me incluyo...

- ¿Y qué tiene de especial ese concierto: pocos recursos, poca paga...?

- No, todo lo contrario... El problema son las bandas con qué tocarán, que aún no sabemos cuáles podrían ser a ciencia exacta.

- ¿Y cuáles podrían ser a ciencia no exacta...?

- Pueden ser Metallica, Megadeth o M... Skid Row -recordó que Mötley Crüe quedaban eliminados si Pearl Jam aceptaba.

- Pues... -todos miramos a Eddie- ¿A quién le importa? No los conocemos pero se ven buena gente, si nos caen mal, los ignoramos y tocamos no más.

- ¡Genial! ¡Mi amigo está afuera cagándose de frío esperando a una respuesta!

Fue a buscarlo y ahí conversaron más a fondo el asunto, según lo acordado, la grunger debería regresar a casa... No quiso, lógico. Así que, tomó el cargo de ser la asistente de Daniel no más para tener el acceso a ver a los chicos de Seattle de vez en cuando y el resto del tiempo, iría pegadita a su amigo para ayudar en cualquier cosa.

Pearl Jam firmó el contrato. El evento sí o sí debía concretarse, quedaba poco tiempo, que las otras dos chicas por más que la cagaran, que hicieran el último esfuerzo siquiera.