La princesa de Hielo (Evitando la catástrofe: parte I ) [En Edición]

Cap 10: Algo que pueda hacer

— Debes estar bromeando... es imposible apenas ayer hablamos con el ¿que pudo haber pasado?— respondí casi sin aliento pues la noticia hizo que sintiera que el corazón se me había detenido. 

— No lo sé, esto no estaba en el plan pero puedo decirte que él puede salir de una situación como esa es un tipo que sabe lo que hace—

— Después de saber esto pasaré la noche entera sin pegar un ojo y creo que también tú, solo nos queda confiar en las capacidades del señor Bueno... Te veo mañana en clases—

Guarde mi celular bajo la almohada intentando tranquilizarme pero fue imposible ahora sentía que volvíamos a empezar de cero pues el que podía investigar libremente y con ayuda de cuantos elementos quisiera estaba completamente desaparecido. mire a Sofía y Reiko durmiendo tranquilamente a pesar de todo lo que cada una había pasado los últimos días se sentían tranquilas, con la confianza de que nos apoyábamos la una a la otra; mi situación era diferente a la de ellas yo no podía decirles por lo que estaba pasando ni dejarles saber cómo me sentía.

Siempre era lo mismo, no podía dejar que nadie se acercara lo suficiente a mí porque terminaban en peligro y fue por eso que adopte mi personalidad fría para evitar que los demás se acercaran a alguien como yo que arriesga sus vidas. Creía que con estas personas eran diferentes y que no les pasaría nada pero olvide que todos somos frágiles y vulnerables y hay cosas que no se pueden evitar por más que lo intentemos.

Pedro Bueno sabia como operaba el camaleón y todos sus subordinados, incluso dijo "no voy a caer en tus trucos baratos" cuando hablo con él, era imposible que desapareciera así nada más seguro algo planeaba cuando desapareció quizás lo hizo con un propósito o descubrió algo y necesitaba investigar sin que nadie lo molestara, me convencí de que algo así debió pasar para sentirme más tranquila.

Cuando llego la hora de despertar para ir a clases me sentía muy cansada, pensé seriamente en faltar pero era de las cosas que no me gustaba hacer entonces reuní todas mis fuerzas y me puse de pie. Pude fingir que estaba bien ante los ojos de todos y el maquillaje cumplió su función cubriendo perfectamente mis horribles ojeras.

Tenía que hablar de frente con Leonardo para poder saber en qué situación me encontraba realmente pero no sabía cómo hacerlo sin que los demás sospecharan algo de lo que estaba pasando porque no quería que ellos también salieran involucrados en un asunto tan complicado.

Me pase toda la mañana pensando en una excusa para verme con el sin que nadie sospechara pero no se me ocurría nada en absoluto y las clases estaban a punto de terminar, la ansiedad me consumía y mi respiración se agitaba con el solo hecho de pensar que el riesgo que corría era mayor que antes.

Definitivamente necesitaba ponerme al día con todo lo que estaba pasando y el director había salido a una supuesta "junta de negocios" pero yo sabía que en realidad era algo que tenía que ver con la desaparición de Pedro Bueno, entonces mi única fuente de información era... Leonardo.

Las clases terminaron y paso lo que era obvio, no encontré el momento oportuno para hablar con Leonardo, si él no hubiera anunciado nuestro "compromiso" a los cuatro vientos todo este asunto sería más fácil para mí pero ahora era imposible estar fuera del campo de visión de todo mundo.

Necesitaba calmarme un poco y despejar mi mente para poder buscar una manera de salir del enorme lio en que estaba metida, salí del salón sin hacer ruido y me fui a la biblioteca sabiendo que era el lugar menos concurrido en toda la escuela.

Entre y allí estaba el encargado como siempre sumergido en algún Libro, leyendo tan concentrado que parecía devorar página tras página, firme la libreta de visitas y me senté en mi mesa favorita, al fondo, La paz que se sentía da tan agradable y el silencio tan profundo que se podía oír con claridad las manecillas del reloj de péndulo que estaba en la entrada.