Sombras del pasado.

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¿Cómo era posible que aquella persona cuya identidad desconocía supiera mi nombre? Además, ¿por qué se me hacía conocida su voz? Era como si la conociese de antes, sin embargo mi cuerpo se negaba a recordar de quién era.

Llegaba tarde al trabajo, lo sabía bien, pero mi cuerpo no se movía, estaba paralizado por el miedo, mis instintos me decían que ignorase a aquella silueta, y que fuese ya a casa para irme enseguida, mas otra parte de mí deseaba con todas sus fuerzas descubrirle.

-¿C...cómo me conoces?-pude articular por fin, notándose mi nerviosismo, al no saber con quién trataba.

-Oh, mi pequeño Shirou-me llamó con tanta confianza que incluso todo ese miedo que recorría cada parte de mi cuerpo, había desaparecido de un momento a otro.-No me tengas miedo, además, ¿cómo no saberlo si eres un famoso detective que desapareció hace seis meses, y te llevaron a ese laboratorio?-al terminar de hablar, la sangre se me heló y abrí los ojos como platos, sin poder asimilar que alguien sabía que yo había estado allí. Tragué saliva, si aquella persona decía algo estaba perdido, sería el principal sospechoso, y me metería en grandes líos.

-¿C-c-c-cómo lo sabes?-volví a preguntar notándose mi miedo, mi tono de voz había temblado, incluso lo susurré, temía también que no me hubiese escuchado, pero para mi sorpresa no fue así, esto no tenía ni un sentido.

-Lo vi-me respondió con simpleza, o sea...¿Qué? Apreté los puños con furia, ¡¿me había visto ir hacia allí y ni siquiera se había dignado a ayudarme, ni siquiera llamar a la policía? ¡¿Nada?! Respiré hondo, y guardé la calma, así no conseguiría nada. Le haría preguntas y de alguna manera le sacaría las cosas.

-¿Por qué no avisaste a nadie?

-No podía

-¿Por qué no?

-Ya lo sabrás con el tiempo, adiós mi pequeño Shirou-quería hacerle más preguntas, mas al dirigirme hacia la cabaña corriendo para que no se fuese, no vi absolutamente a nadie. Pensé quizás que se había metido en esta, así que llamé a la puerta, esperé varios segundos, mas nadie me abría. Pensé entonces en echar la puerta abajo, estaba muy desesperado por encontrar respuestas, y podría hacer lo que fuese.

Antes de que pudiera hacerlo, el sonido de mi móvil me interrumpió, alguien me estaba llamando.

''Gouenji Shuuya''

-¿Si?-pregunté, seguro que me llamaba o porque estaba enfadado porque me estaba retrasando, o porque se estaba preocupando por mí, o por ambas cosas.

-¡Nada de ''¿si?''!-me respondió a través de la otra línea, se le notaba algo enfurruñado, y no le culpaba.- ¡¿Sabes qué hora es?! ¡Estábamos preocupados, y Endou está hecho una furia, así que date prisa en llegar!-tras eso y sin darme tiempo a excusarme, me colgó.

Después de varios minutos de estar corriendo para llegar lo antes posible a la reunión a la cual teníamos que asistir cada día para poner las conclusiones sacadas luego de haber estado investigando, llegué, y abrí las puertas, Endou me dio una seña con la cabeza indicándome que me podía sentar, pero que fuese la última vez que llegara tarde, a pesar de que era la primera vez que me retrasaba.

Hiroto me miró con preocupación, aún estaba algo asustado por la conversación anterior, además mi respiración era de lo más agitada por la carrera. Sentía que se me iba a ir el alma por la boca, bueno tal vez exagero un poco.

A decir verdad no estuve prestando demasiada atención, sino que estuve procesando la conversación anterior, tratando de recordar de qué me sonaba aquella voz, pero era imposible, era incapaz, quizás tal y como había dicho ya tendré respuestas mucho más adelante, aunque yo no tenía mucha paciencia que digamos.

Where are my memories? (Inazuma Eleven) (Goenji x Fubuki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora