¿Qué pasaría si en una escuela hubieran tres semidioses a la vez? Nada bueno, eso es seguro.
Somos Sophie, Aria y Gunther. No habíamos pensado que nos ocurriría algo así como ser hijos de dioses griegos; pero ha pasado, señores. Hemos sido expulsado...
Aria salió de la enfermería junto con el chico rubio, éste tenía un montón de moretones, cortes, etc...
-Bien, continuemos con el tour- propuso Elliot una vez que llegaron Aria y el chico.
-Hola, soy Jordan- se presentó el rubio.
-Qué interesante, ojalá te lo hubiese preguntado- dije yo cortante y me miró con mala cara, punto para Gunther.
-Oigan no quiero más peleas- nos reprendió Elliot -Ustedes deben ser amigos, o por lo menos no llevarse mal. Así que preséntate- me ordenó el de las pecas y rodé los ojos.
-Soy Gunther y ella es mi hermana, Sophie- me presenté y Sophie levantó la cabeza un poco en forma de saludo.
-Hola- saludó el rubio con la mano.
Íbamos a seguir con el tour por el campamento pero un chico se acercó a Elliot apurado y le susurró algo al oído, nuestro amigo asintió y el otro chico se fue.
-Miren, tengo una audiencia de emergencia con Quirón así que... Tú- señaló a una chica de cabello por los hombros castaño oscuro. Debo admitir que me quedé embelesado por un segundo, la chica era linda y bueno, verán... Hormonas.
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-Dales el tour por el resto del campamento que estoy ocupado- ordenó Elliot a la chica y ella se cruzó de brazos y miró mal al sátiro.
-Ay sí, el sátiro de negocios- dijo la chica con sarcasmo -Bien, pero me debes una- sonrió la chica y a lo literal a mí se me salió una sonrisa tonta, la cual desapareció cuando sentí un codazo en mi costado.
Elliot corrió de una forma que si me lo preguntas, fue muy graciosa. Se veía raro con sus piernas de cabra y trotaba como tal. No sé, era gracioso.
-Soy Helena, Helena Parson. Vamos, que se hace tarde- se presentó la castaña.
-¿Y quién de tus padres es dios?- preguntó Sophie.
-Deméter, la diosa de la agricultura y lo que tiene que ver con plantas- resumió Helena restándole importancia, haciendo gestos con las manos de que era algo extraño.
-¡Qué genial! Es fuera de este mundo, te lo juro- dijo Jordan con sarcasmo, cruzado de brazos.
-Cállate, Stone. No sé qué hago dándote el recorrido a ti también pero no voy a preguntar, vamos- dijo Helena.
Caminamos un poco hasta que llegamos a donde estaban las cabañas. Estas formaban una letra Omega (Ω), cada cabaña era más diferente que la anterior. Pasamos viendo cada cabaña detenidamente y la primera era la de Zeus, se veía como la más grande de todas.
