—¿De verdad piensas que podrás sacarlo de HYDRA? —curioseo Romanoff a mi lado en un pequeño susurro.
—No lo sé —respondí encogiéndome de hombros—. Pero quiero que sea así, a menos lo intentare, Natasha.
—No será nada fácil, lo sabes, ¿no? —ella me observo mientras yo la sujetaba por la cintura y su brazo aún estaba sobre mis hombros—. Steve no te dejara hacer nada.
—Steve no es mi dueño —aclaré.
—Pero si es tu novio, y esas cosas hacen las parejas.
—¿Ahora eres consejera matrimonial? —indague divertida.
—Es que ya escuché como lloraba por ti y no quiero volver hacerlo —ambas reímos ante aquello—. Sé lo que sientes, y sé que quieres hacer todo por salvarlo, pero Ana tienes que estar consciente que, aunque queramos no podemos salvar a todos. Sólo es bueno que lo sepas.
—Gracias pelirroja —sonreí de medio lado hacia la rusa.
—Es ahí —Steve señalo una casa.
Romanoff y yo nos miramos entre nosotras, tome con un poco más de fuerza el cuerpo de la espía para así ambas bajar la pequeña colina hacía la casa. Steve fue el primero en llagar e inspeccionar el lugar, todo estaba bien y se veía tranquilo. Rogers toco la puerta trasera, esperamos un momento hasta que esta se abrió revelando al hombre del parque.
—¿Qué paso? —cuestiono él observándonos de arriba abajo.
—Sam —hablo Steve—. Lamento llegar así, pero necesitamos escondernos.
—Todo el mundo quiere asesinarnos —concluyo Romanoff.
—Por favor —pedí con una mirada suplicante.
—No todo el mundo —aseguro haciéndose a un lado permitiéndonos pasar.
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Termine de lavar mi rostro en el lavabo del baño de Sam, observe mi rostro en el cual había pequeños raspones, pero a menos ya estaba limpia, busque en el botiquín de Sam un poco de algodón y alcohol. Llevé aquel trozo de algodón a la herida en mi frente donde con pequeñas muecas comencé a limpiar con suavidad.
Tome mi sudadera la cual se encontraba muy sucia, tirándola a el bote de basura de Sam, desde mi posición observe como afuera se encontraban Steve y Natasha conversando, los podía ver a través del espejo.
—Cuando me uní a SHIELD creí que me enderezaría —comenzó a relatar ella, para guardar silencio—, pero creo que sólo cambien la KGB por HYDRA —aquel sentimiento de la pelirroja nadie lo entendía más que yo—. Creí saber para quien mentía, pero... creo que ya no distingo la diferencia.
—¿Quizá no es la profesión correcta para ti? —repitió lo que ella le menciono antes.
—Estoy en deuda —le menciono a Steve, este sólo negó.
—No —negó Steve—. Tranquila.
—Si fueran al revés las cosas y dependiera de mi salvar sus vidas, se muy honesto conmigo. ¿Podrías confiar en que lo hiciera? —curioseo ella.
—Ahora si —le confeso Steve—. Y siempre soy honesto.
—Yo no —salí del baño encarando a los presentes—. Eres una espía, no una súper heroína, aparte ¿quién es la que siempre te salva el trasero? —ambas sonreímos—. Ese es mi trabajo Romanoff.
—Y eres buena en lo que haces —reímos.
—Si, me considero, puede ser... la mejor —sonreí con ego.
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Libre - Tercera temporada
FanfictionNueva ciudad, nueva vida. Es lo que pensaron Steve y Ana al mudarse a Washington D.C pero, nuevos problemas surgen también. Con la llegada del que mucha gente cree un cuento "El Soldado del Invierno" . SHIELD infiltrada, recuerdos del pasado, nuevo...