Libre - Tercera temporada

23. Engaño.

Narra Steve

Un golpe en mi espalda me derribo cayendo un poco más cerca de la tarjeta, me gire y observe como Bucky venía en mi dirección y lo que me golpeo fue mi propio escudo, sí que duele. Sacó un arma de su pantalón y rápidamente tome mi escudo y me tape del impacto de las balas. Cuando las balas cesaron lance mi escudo, pero Buck lo detuvo con su brazo de metal, saco un cuchillo de su pantalón y camino hacia mí, logre esquivarlo una vez al tratar de detenerlo Bucky ejerció fuerza y lo clavo en mi hombro. Grité un poco de dolor, le di un cabezazo y después el me lo regreso y empujo hacia un lado golpeándome con una pared. Saque el cuchillo de mi hombro y mire como Bucky se arrastraba y toma la tarjeta con su mano, lo tome de la mano y lo alce tomándolo del cuello por unos segundos. Lo eleve un poco más y gire golpeándolo contra el suelo hecho de cristal del helicarrier. Lo tome con el brazo humano poniéndolo entre mi brazo y tomando su rostro con mi otra mano para que soltara la tarjeta

—Suéltalo —le dije ejerciendo más fuerza al mirar que no soltaba nada—. Ya para —tome su brazo y lo doble haciendo que se fracturara.

—¡Ah! —grito al instante.

Empuje mi cuerpo hacía atrás tirándome en el suelo y Bucky encima de mi haciendo una llave para para que soltara la tarjeta. Bucky tomo mi mano con su brazo de metal para que lo soltara, pero logre contenerla y la lleve hacia mis piernas deteniéndola ahí y ejerciendo más fuerza. Poco a poco luchaba menos y su cuerpo se iba debilitando hasta que por fin se desvaneció y la tarjeta cayó de su mano.

Empuje el cuerpo de Bucky a un lado y tome la tarjeta entre mis manos para llevarla a su lugar. Subí por el mismo lugar que me había caído, usando las ventajas de ser un súper soldado, corrí hacia arriba, pero un impacto y dolor en mi pierna me tiraron al suelo y fue ahí cuando vi a el soldado del invierno con un arma en su brazo de metal. Me incorpore y brinque para alcanzar una parte de la nave y escalarla. De nuevo un disparo que casi me da en la mano, me solté, pero seguí avanzando como pude, me tome de un tubo y por fin estaba en piso, suspire cansado y rodé por debajo para poder pasar.

—30 segundos Cap —informó María por el comunicador.

Me puse de pie difícilmente, mientras respiraba un poco dificultoso, me dolía la pierna, el hombro me punzaba, estaba perdiendo mucha sangre.

—Espera —le hable a María.

Saqué la tarjeta con dificultad y justo al momento de ponerla sentí un ardor en mi estómago. Él me había disparado.

Mi estómago ardía, mi respiración se complicó, mire esos hermosos ojos obscuros que tanto amo, su sonrisa, la mire a ella, Ana. Pero no iba a dejar que gente inocente muriera, si no la pude salvar a ella, salvaría a esa gente en su honor y por ella. Me levante con mucho esfuerzo y dolor por todo mi cuerpo, pero tenía que hacerlo, los tenía que salvar. Con la tarjeta en mano me acercaba, hasta que lo hice, la coloqué en remplazo a ella.

—Ya listo —informe cansado

—Ok cap, sal de ahí —comunicó María.

—Dispara ahora —di la orden.

—Pero Steve —se escuchó desconcertada.

—Hazlo —ordene seguro—. Que lo hagas.

Y así empezó todo a moverse y a ser destruido.

Narrador.

—Que desperdicio —informó Price al ver como los helicarrier se disparaban unos a otros.

—¿Todavía cree que Rogers no lo logre?

—Nos vamos —informo—. Tú vas a sacarme querida —tomo a Ana la cual asintió a la orden sin objeción alguna.