☯ JUMP ☯ (Larry Stylinson)

Capítulo 10 De dónde vengo el amor no existe.

Al día siguiente, recordó Harry cuando Alexis le pidió que fueran novios y con pena le dijo que: no.

Pudo arreglárselas para que el pelirrojo no se enojara con el "necesito tiempo" recordó haberle pedido. Pero claro... necesitaba tiempo para darle el "sí" pero no para dejarse desabrocharse el pantalón aquella vez en el gimnasio.

Ese día había llegado temprano al entrenamiento con Louis, ¿por qué? porque había puesto la alarma a la hora correcta. Los ojos de Louis quien había empezado con el calentamiento solo y alejado de la pista de corredores, se iluminaron por un segundo al verlo puntual.

-Hoy si llego temprano-dijo, riendo.

Después de la conversación con Louis en los lavabos, creía que podía acercarse sin miedo de recibir una ofensa de parte de él, ¿porque lo odiaba tanto? su conclusión era que para los criterios de Louis, él jugaba muy mal fútbol y no merecía estar en el instituto. Así de simple.

Mientras Harry esperaba algo como respuesta, contemplaba sus atractivos rasgos, volvió a sentir una extraña e inquietante atracción por él en lo más profundo de su ser. Estaba haciendo abdominales, subía y lo miraba profundo, luego bajaba, subía y lo miraba, luego de nuevo bajaba. Toda su espalda se marcaba por la parte de atrás del uniforme. Harry se hubiera dado cuenta de todo lo anterior pero solo se concentró en su rostro. En sus ojos, perdiéndose en un cielo azul.

Louis repitió lo mismo cincuenta veces, de las cincuenta solamente dos no lo miro, el resto de las abdominales cuando pegaba el pecho a sus rodillas flexionadas, lo penetraba con su mirada de un golpe y con intenso azul.

Harry desde arriba lo observaba, sintió tener el poder, por la diferencia de la altura.

-Te toca – ordenó Louis con una voz seria.

Se acostó sobre la hiedra y Louis se acercó a su lado, mientras el menor se acomodaba para iniciar con el ejercicio, el mayor no dejo de verlo ni un segundo. No quería sentirse atraído por él. ¡No quería! ¡No podía! Harry hizo mal la primera abdominal.

-¿A sí? – pregunto inocentemente.

-N-o, no estás haciéndolo mal... acuéstate de nuevo – le susurro haciendo que a Harry le hirviera la sangre en ese momento, obedeció y se acostó de nuevo – Hazlo bien, sube bien hasta las rodillas – no quería tocarlo pero lo deseaba.

Harry sintió como su piel se erizo en el momento que Louis lo toco, se sintió avergonzado por la mirada que le hizo Louis de estar confundido. Solamente le tocó las rodillas, al juntarlas con sus dos manos fuertemente y se puso enfrente de él para sostenerlo e hiciera bien las abdominales. De repente, tocarlo y tenerlo así de cerca pensó Louis: que era una mala idea.

El resto de los chicos y su clase estaba entrenando también, ninguno prestó atención a la escena de Harry y Louis en el césped. Harry hizo la abdominal, cuando subió lo miró tan profundo que sentía que si la mirada de Louis era una puerta, él ya estaba adentro.

Sus cabellos colgaban por la parte de enfrente, algunos de los mechones rozaron el rostro de Louis. El ojiazul sintió una adrenalina por todos sus huesos inexplicable. Abrió grande la boca, estaba impactado ¿Cómo lo hacía? Se preguntó íntimamente. ¿Cómo hacía Harry causarle eso? se repitió la pregunta.

Harry se impregnó de su aliento, menta y eucalipto, suspiro, sin ganas de apartarse abajo de nuevo, al ir por la segunda abdominal antes de acercarse a Louis este se alejó nervioso; ya no tocaba sus rodillas, sus manos calientes de Louis estaban ahora tocando el césped. Se sintió triste por él, al negarle a su propio cuerpo, el placer de tocar a Harry.

El menor no dijo nada e hizo lo mejor que pudo al hacer las cincuenta bien hechas, sin ayuda de Louis y aunque tampoco lo miraba, Harry tampoco buscaba verlo a los ojos.