Dónde juegan dos, juegan tres.

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8.

Me gustaba lo que estaba viendo en el espejo, ya estaba lista. El vestido me quedaba a la perfección y hacia resaltar mis pechos, me había peinado y maquillado, el peinado era algo clásico pero elegante y el maquillaje no era para nada excesivo. Los chicos estaban afuera esperando a que saliera, por último me aplique perfume y salí de la habitación y me dirigí al resividor.

Los seis chicos estaban sentados en los sillones con cervezas en sus manos, todos se veían jodidamente bien con sus trajes. Con un poco de pena llegue al resividor, ellos me miraron y se levantaron automáticamente.

-¿Y? ¿Que tal me veo? - comenté dando una vuelta.

-Te ves... Te ves Woow! - respondió Martijn.

Mis mejillas se calentaron un poco, pero no creo que ellos lo hayan notado.

-Martijn tiene razón, estas Woow! - dijo Julian.

-Ojalá tuviera a una novia como tú. - comento Peter.

-Gracias chicos. - digo sonriendo. - bueno, ahora vámonos.

Los siete salimos de la habitación y bajamos las largas y aburridas escaleras hasta llegar a un lugar que yo jamás había visto, era como un gran salón de baile, habían muchos chicos de traje y una que otra chicas, al entrar todo fijaron la vista en mi, incluyendo a la directora Harris y mi madre.

-¿Puedo tomarte de la mano? - dijo Julian.

-Claro. - susurre.

Su mano se entrelazo con la mía y caminamos rápidamente hasta las bebidas, los otro seis chicos nos siguieron y poco a poco todas las personas volvieron a lo suyo.

-Nadie te quita la mirada de encima. - comento Julian dándole un sorbo a su vaso con cóctel de frutas.

-Gracias. - contesto algo sonrojada.

El baile transcurre con tranquilidad, me atrevería a decir que es aburrido hasta que llegó la hora de coronar al rey del baile, los candidatos fueron.

•Martijn.

•Julian.

•Adam.

•Cooper.

Menos mal que yo no tomaba la decisión de quien elegir como rey del baile, porque todos son demasiado lindos como para escoger a alguno.

-Y el rey del baile es...- dijo la directora Harris. -¡Martijn Garritsen!

Todos los presentes empezaron a aplaudir. Martijn subió y fue coronado como rey, ahora faltaba la reina.

-Y como por primera vez tenemos a una chica aquí en el internado, la reina del baile es Vanessa Hendricks.

Mi madre empezó a aplaudir como loca y ella no era la única, todos aplaudían. Subí y la directora me colocó una corona plateada que hacía juego con mi conjunto y con la corona de Martijn.

-Y ahora por primera vez será el baile del rey y de la reina del baile de bienvenida. - comento Harris feliz.

Eso quería decir que tenía que bailar con Martijn, este caballerosamente me tomo de la mano y me llevo a la pista de baile, la música empezó a sonar y sus manos pasaron a mi cintura y las mías para atrás de su cuello.

-¿Viste como todos nos observan? - pregunto mirando de reojo a las personas.

-Si, ya me he acostumbrado. - responde él con orgullo.

-Tonto. - comento riéndome.

La canción termina y empieza a sonar otra más movida, Martijn y yo nos dirigimos a los chicos que están sentados en una mesa.

-¿Que cuentan muchachos? - digo sonriente.

-Esto apesta. - comenta Christian. - Ninguno aquí tiene una novia para bailar o presumir.

-Oigan, yo tampoco tengo novio. - le digo a Christian para tratar de animarlo.

-No, pero tienes a Martijn y a Julian. - dice con gracia Adam.

-Venga, yo se que los hará feliz. - digo sonriendo. - ¿Que tal si nos vamos y hacemos nuestro baile de bienvenida privado?

Los chicos sonríen y pronto estamos en la habitación de Martijn, Julian y mía bebiendo. Yo había decidido quitarme el vestido y ponerme más cómoda, tenía un short y una camiseta grande con el número "22" escrita de color negro, me quite el maquillaje y de los tacones, estaba descalza y mi cabello había quedado algo ondulado por el peinado. Los chicos también habían decidido ponerse cómodos, todos habían salido para ponerse su pijama y luego regresaron para acá.

Mirábamos un partido de fútbol mientras tomábamos, yo estaba en el gran sillón mientras los chicos estaban en el piso, la cosa fue que quería estirar mis piernas y hice que se sentarán en el piso, si lo se, soy mala. El partido término y yo ya estaba más que cansada, ya me había tomado como dos botellas de vodka y aún quedaban dos, antes de irme a dormir amenace a los chicos que si tocaban mis botellas de vodka les castraria.

Fui a acostarme ya estaba cansada, pero no pude quedarme dormida, me levante de nuevo y fui por un vaso de agua, los chicos estaban durmiendo en el suelo, tome el vaso de agua y me dirigí a mi habitación. Me detuve en la habitación de Martijn y Julian, escuche voces así que decidí poner mi oído para escuchar mejor.

-¿Tenemos un trato? - esa era la voz de Julian.

-Si. - respondió Martijn. - ya sabes las reglas, no puedes besarla, ella es la que te tiene que besar.

¿De que diablos hablan?

-Vas a perder. He visto como Nessa me mira. - dice Julian.

-Ya lo veremos Juliancito. Ella será mía. - dice esta vez Martijn.

-Bueno, ya está. El primero que enamore a Nessa gana.

Estaba impactada, la ebriedad que tenía se había esfumado ¿Acaso había escuchado bien? Oh Joder, ellos no saben con quien se han metido.

¿Ellos creen que seré tan imbécil para caer ? Ja. Regrese a mi habitación y me acosté.

Si ellos quieren jugar, pues vamos a jugar, por desgracia donde juegan dos pueden jugar tres.

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Hello! Espero les guste el cap.

No olviden apoyarme con una estrella y comentando.

Besos.

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Gold Skies. |Martin Garrix and Julian Jordan| TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora