Epílogo

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No quise perderlos, sabía cuando todo empezó que algo saldría mal, y vaya que las cosas salieron mal.

Mi vida se convirtió en un huracan cuando esos dos hermosos chicos hicieron una estúpida apuesta, la cual yo como tonta quise seguirles. No sabía las consecuencias, pero a pesar de todo, aunque me arrepiento, en el fondo se que fue una de las mejores cosas de mi vida.

Después nuestros sentimientos se involucrarnos en el asunto, y todo pasó de ser un juego a un triangulo amoroso de dos mejores amigos y una estadounidense.

Las locuras y todos los recuerdos que tengo con ellos son hermosos, y jamás podría olvidar aquello.

Pero sabía muy bien, que luego de todo eso, los tres saldríamos lastimados. Y fue así.

Quizás irme a Francia fue un acto cobarde de mi parte, pero en aquel entonces me pareció la idea perfecta, sin saber que me estaba metiendo en un lío peor.

Christopher fue mi salva vidas, pero luego terminó convirtiéndose en el tormento más grande que quizás tendré en toda mi vida. Lo que viví a su lado fue un verdadero desastre, disfrazado de amor verdadero. Lo admito, me llegué a enamorar de él, pensé que tendría el final de cuentos de hadas que soñé cuando pequeña, pero lo que tendría con él estaba lejos de ser un cuento de hadas.

Sin darme cuenta me volví una persona totalmente diferente a lo que en realidad era, solo quería complacerlo, cambie mi actitud y comencé a ver sus golpes como resultado de una conducta que (imaginariamente) era mi culpa, cuando jamás lo fue, la culpa no era mía, era de él. Pero estaba sometida a él, tan enamorada sin darme cuenta que me estaba destruyendo. Pero después de tanto tiempo, llegué a la conclusión de que lo que sentia por el quizás en algún momento fue amor, pero era un gran agradecimiento por ser esa persona que estuvo conmigo cuando no conocía a nadie.

Y el golpe de gracia, lo que me hizo despertar fue cuando perdí a mi bebé. Siento el dolor, como si hubiera ocurrido ayer. No había nacido, se murió dentro de mi y fue por su culpa.

Desde entonces sentí asco y un odio infinito por él y todos sus recuerdos, de vez en cuando me siento deprimida por aquello, pero luego la vida comenzó a sonreírme.

Mi trabajo me ayudó bastante a superar la dura pérdida, y que puedo decir Martijn y Julian me ayudaron demasiado. Más de lo que deberían de haber hecho.

Sabía que desde todo comenzó, que si elegía a alguno de ellos, perdería al otro. Y ya había perdido tantas cosas, que no quería perderlos a ellos.

Entonces me aleje, por segunda vez, pero no funciono. Quizás si lo ves desde afuera diera la impresión de que jugué con ellos, de que fui una perra. Pero no fue así, me enamore de los dos a un nivel que jamás podía haber sentido.

Los dos querían estar conmigo y yo también quería estar con los dos, pero sabía que aquello era imposible, es que no podía ser. Entonces dejé las cosas en el viento, dejando que el tiempo se encargará de hacer que las cosas se ordenarán por sí solas. Y vaya que lo hicieron.

Julian siguió con su novia, y no esperaba otra cosa de él. La amaba y con el tiempo se dio cuenta de eso. Ahora estaban a punto de casarse y a pesar de que siempre estaré en su corazón y él en el mío, se que ella lo hará muy feliz, más feliz de lo que pude haberlo hecho yo.

Sonja tenía un novio, que aunque ella no quiera admitirlo, las cosas entre ellos eran serias. Tanto que se mudaron a un departamento juntos.

Mi tía Julie se mudo a Francia, donde vive tranquilamente.

Me imagino que se preguntarán ¿y Martijn?

Pues bueno, él ahora como Julian, siguen su carrera de Dj exitosamente y terminó con su novia, se dio cuenta que en verdad no la quería, que nada más estaba con ella por miedo a sentirse solo.

Y que fue de mi vida... Sencillo.

Con todo el dinero de mi madre logre tener mi propia clínica, me sentía tan feliz e independiente a la vez, que el sentimiento era muy increíble.

Y ahora me imagino la pregunta que se harán ¿estoy soltera? Pues la respuesta es un rotundo no estaba ahora con un hombre maravilloso.

—¿Quieres más café? — preguntó mirándome con una sonrisa en sus labios.

—Sabes la respuesta cariño. — murmure agitando la taza en mis manos.

Él sonrió y busco la taza donde el café que había hecho estaba,e sirvió un poco y luego salimos a la terraza, donde se veía el hermoso amanecer.

—Me tomaré un año de descanso. — murmuró tomando un trago de café. — Quiero estar contigo y los niños, sin tantos viajes. No me gusta hacer facetime.

Reí.

—Podemos tomarnos un descanso los dos. — dije. — Irnos de viaje, conocer lugares nuevos, tener nuevas experiencias.

Él sonrió y eso es lo que más me gustaba de él, sus lindos hoyuelos.

—Está decidido. — murmuró sonriendo.

Me senté en sus piernas, mientras que en otra mano tenía mi café.

—¿En que piensas? — preguntó Martijn acariciando mi mejilla con su nariz.

—En lo bonita que es mi vida. — respondí sonriendo.

Martijn sonrió y beso mi mejilla.

*****
Mis niñasssssss

¡Regrese!

Si, me tarde mucho más de lo prometido, pero ya estoy de vuelta.

Como se dieron cuenta, el ganador terminó siendo Martijn con 21 votos a su favor.

Espero que el final haya sido lo que esperaban 💕

Para mí fue un gran placer escribir esta novela, gracias por sus votos y comentarios llenos de amor ❤

Ya saben, que si quieren más, en mi perfil hay bastantes novelas de nuestro bombón, pasen por ellas ❤

Las quiere infinitamente, Isa.














Gold Skies. |Martin Garrix and Julian Jordan| TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora