"𝐿𝒶 𝑀𝓊𝑒𝓇𝓉𝑒 𝓎 𝐿𝒶 𝐿𝓊𝓃𝒶"[ɴɪᴄᴏ ᴅɪ ᴀɴɢᴇʟᴏ ʏ ᴛᴜ] EDITANDO

Capítulo 30 ☾

Narra ______

Al caer dormida las pesadillas comenzaron. El aire se volvió más denso y frente mío se encontraba una chica, debió de tener no más de 13 años, se encontraba encerrada en una celda y encadenada. Al lado de la celda se encontraban otras más grandes donde habían chicas de la misma edad o mayores. Su ropa de color plateado estaba llena de barro y desgarrada. La chica de trece años, tenía cerrados los ojos, su cabello castaño caía sobre sus hombros, su rostro estaba inmóvil, alrededor de su frente traía puesta una diadema y en medio había un dije de media luna. Era Artemisa. No me sorprendí, ya me había mencionado Annabeth que los dioses pueden tomar la forma que quieran. Atras escuche pisadas Fuertes. Me sobresalté y me hice aún lado. Atlas entraba a la caverna con cara de diversión.

-Muy pronto finalizare mi venganza-dijo con una voz grave y profunda.-Esos semidioses deben de estar muy cerca....

-Fracasarás de nuevo Atlas-dijo Artemisa.

-Eso no pasara.... el me prometió que me libraría de mi castigo si atrapaba a tu hija

Artemisa lo miró fijamente, sus ojos destellaban ira. Las demás cazadoras lo miraban con asco.

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Desperté sobresaltada.

-Despiertas justo a tiempo-dijo Hollie sonriente mientras arreglaba sus pestañas.-Estamos a cinco minutos de aterrizar.

Se estire un poco y me volví hacia Alice. Que ya estaba completamente curada.

-¿Pesadillas?-me susurró.

Asentí con la cabeza. Todavía no podía asimilarlo. Alguien había contratado a Atlas para capturarme y tal vez asesinarme a cambio de su libertad. ¿Pero eso como puede ser posible? ¿Quién estará cargando el cielo?. Y la pregunta más preocupante ¿Porque me quieren a mi? Decidí no decir nada. Iba a esperar el momento oportuno en las Vegas. Alice regresó al asiento del piloto, quito el modo automático y fuimos descendiendo. Ya podía distinguir los edificios y hoteles, todo estaba demasiado iluminado para mi gusto. Nos estacionamos frente a un centro comercial y nos bajamos del automóvil. Decidimos pasar a comer algo antes de comenzar con la búsqueda. Noté a Nico distante y frío. No pronunciaba ninguna palabra y se limitaba a mirar al suelo. Entendía perfectamente lo que sentía y no quería presionarlo o hacerlo sentir incómodo así que mejor me fui con mi prima.

-Uhmmm _____ creo que necesitamos cambiarnos-dijo Alice a lado mío.

-Tienes razón ¿traes ropa de repuesto?

-No pero he oído que hay unas tiendas!!!! Donde hay ropa súper guay-por un momento creí escuchar al mismísimo Apolo.

Una sonrisa se me escapo.

-Vamos a comprar algo.

-¿Compras?-canturreo Hollie.-Oh yo encontraré el conjunto perfecto. Chicos!!! En un momento regresamos, vayan a inspeccionar la zona por si ven algo sospechoso o algún monstruo.

Ellos asintieron y se fueron al otro lado.

Hollie iba checando tienda por tienda que nos podía quedar.

-Creo que necesitaremos ropa cómoda....-dijo Alice mirando unas camisas.

-Eso está perfecto-gritó Hollie y señaló una tienda del otro lado. Y nos empujó hacia la entrada.

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-Mucho mejor....-exclamó Hollie emocionada.

A mí me escogió una camisa blanca y unos pantalones de camuflaje color plateados, aparte (por si había frío) una chaqueta del mismo color. Alice iba igual solamente que la camisa era negra y lo demás color dorado.

-Me gusta-sonreí con satisfacción.

-Ahora tenemos que volver con los chicos-dijo Alice. Caminamos de regreso al estacionamiento, no vimos ni a Dylan ni a Nico. Presentía que algo malo iba a suceder. A lo lejos reconocí a Dylan corriendo hacia nosotras.

-¿Nico no está con ustedes?-preguntó agitado mientras se acomodaba el cabello.

-Estaba contigo Dylan!-dijo Hollie preocupada

-Lo estaba pero de la nada desaparecio....

-Lo más seguro es que viajó por las sombras-respondí intranquila. El centro comercial cerró y nos quedamos otra hora más en el automóvil por si Nico volvía. Pero no fue así , temia que algo le hubiera pasado, pero tenía que confiar, él era fuerte y astuto. De pronto algo se me vino a la mente.

-Creo que ya sé dónde podemos encontrarlo-dije rompiendo el silencio. Los demás me miraron expectantes.

-¿Dónde?-preguntó Hollie

-Alice llévanos a la zona de hoteles porfavor-pedí desesperada.

Alice no preguntó y puso el automóvil en marcha. El GPS fue dirigiéndonos por el camino. Al llegar a la zona principal de hoteles comencé a buscar el hotel: Casino Loto.