"𝐿𝒶 𝑀𝓊𝑒𝓇𝓉𝑒 𝓎 𝐿𝒶 𝐿𝓊𝓃𝒶"[ɴɪᴄᴏ ᴅɪ ᴀɴɢᴇʟᴏ ʏ ᴛᴜ] EDITANDO

Capítulo 45 ☾

Narra Alice.

Este era uno de esos momentos donde ya no quería continuar luchando, ver a mi padre era todo para mi pero esta era definitivamente la peor manera. No podía perder a ____ más que mi prima, era mi mejor amiga desde que nos conocimos sentí algo en ella especial, pero en ese momento no lo podía ver y ahora que analizo por lo que hemos pasado Apolo hizo todo lo posible para lograr que llegáramos aquí.
No me iba rendir, si mi destino es morir aquí lo aceptaré.
De pronto todo se volvió en cámara lenta, ____ salió disparada contra la pared de roca y Atlas se lanzó contra nosotros, logré esquivarlo pero la tierra que se había levantado no me dejaba ver cómo estaban mis amigos. Saque mi arco y empece a dispararle en la espalda al titán; soltó un grito de dolor y se volvió contra mi. Salí de la caverna y trepé los árboles lo más rápido que podía ya en la punta comencé a dispararle en la cara, logre darle en los ojos y desorientarlo. Una figura se asomaba detrás de su cabeza, oh por los dioses era Cameron haciéndole cortes con su espada. Yo seguí enfocada en sus ojos para mantenerlo ciego por un buen rato.

Narra Hollie.

Al momento en el que Atlas se lanzó rodé hacia un lado con Dylan. Me hice un raspón en el brazo y en la pierna, aún me sentía un poco débil por lo que había pasado en el río pero eso no fue ningún obstáculo para que luchara. Aún lado nuestro los monstruos igual se lanzaron, yo ya tenía mi daga lista así que junto a Dylan los íbamos matando uno por uno cubriéndonos la espalda, agradezco todas las clases de artes marciales que había tenido durante mi niñez (por mi padre) logré dar muy buenas patadas y apuñaladas. El número de monstruos se multiplicaba y ya tenía a más de dos encima, oí recitar a Dylan unas palabras y más de la mitad explotó quedando solo polvo amarillo. Yo seguí apuñalando a los restantes, cuando no quedó ninguno no pude evitar darle un beso a Dylan.
El me correspondió el beso y nos mirábamos durante un segundo. Enserio estaba demasiado asustada, dos de los cinco no volvería y haría todo por protegerlo.
-Van a venir más.-dije mirando hacia el exterior de la caverna.- tenemos que liberar a las cazadoras.
La jaula estaba a pocos metros, las chicas se veían muy débiles temía que no pudieran resistir en combate.
Dylan se acercó y rompió la puerta con una espada que no había visto antes, resplandecía como una antorcha, lo más seguro era un regalo de su madre. Las cazadoras salieron rápidamente preparándose para pelear.
-Estaremos agradecidas por siempre.- me dijo una mientras una luz resplandecía alrededor de ella.- la jaula nos debilitaba y no podíamos hacer nada para romperla.- me explicó.

-¿Que haremos ahora?.-pregunto Dylan
El campo de batalla no se veía muy bien, Alice y Cameron distraían al titán mientras Nico y ____ luchaban contra el dios. Las cazadoras se dividieron en grupos, unas iban contra Atlas mientras que las demás iban por Artemisa.
Una de cabello rojizo nos habló.
-Tenemos que llevar a Atlas donde está Artemisa..no podemos liberarla sin tener a alguien que cargue el cielo. Necesito que vigilen si vienen más de sus monstruos.
Dylan y yo salimos de la cueva y mientras las cazadoras levaban al titán dentro de nuevo, esté las intentaba derribar. Alice seguía cegando al titán junto a otras dos cazadoras con flechas explosivas.
Narra _____
Al momento de golpear contra la dura pared de roca vi un flashback completo de toda mi vida pasar por mi mente, los momentos que pase en los orfanatos, las familias adoptivas, mi llegada al campamento y más memorias hasta llegar a donde estoy. ¿No dicen que al morir vemos todos los momentos de nuestra vida pasar como un rayo? Pero estaba claro que aún no moría, alguien me ayudó a levantarme no podía ver quien era porque me sentía aturdida por el golpe el tacto era frío así que pensé en Nico.
La vista se volvió menos densa y frente a mi Apolo me miraba con diversión.
-Y aún no empezamos....
Saque mi arco y le dispare, pero claro volatizo mi flecha en mil pedazos. El dios comenzó a disparar flechas igual, Nico las partía a la mitad con su espada y yo las esquivaba mientras seguía disparandole.

No se cuánto tiempo pasamos así,  del otro lado de la caverna las cazadoras ya estaban libres y luchaban por guiar al titán hacia mi madre. Teníamos que seguir distrayendo a Apolo... pero fue demasiado tarde, se dio cuenta de la situación mientras preparaba su arco para disparar y matarlos me lancé contra el, creo que lo tome por sorpresa porque logré hacer que se tropezara; las flechas de dispararon hacia arriba y explotaron haciendo caer pedazos de roca. Rodé hacia un lado esquivando las rocas que cayeron sobre el dios.
Nico me jalo hacia el y me miro preocupado por primera vez desde hace mucho.
-Deja de mirarme así.-dije incómoda.- estoy bien
Me levante sin problemas, sabía que Apolo no iba a durar nada ahí abajo pero aunque sean un os segundos necesitaba respirar. No sabía con exactitud qué pasaba del otro lado, el titán gritaba maldiciones hacia las cazadoras y mis amigos. Durante un instante una luz inundó cada parte de la cueva, podía sentir el poder de mi madre haciéndose más fuerte.
Apolo salió de los escombros y se encontró cara a cara con Artemisa, ya liberada.