Capítulo 21: Tomando forma

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Capítulo 21

Tomando forma

Gabriella POV

Ok, Gabriella, céntrate. Necesitamos una respuesta ahora. Mi abuelo no era quien creía, en este momento estoy teniendo problemas para recordar al hombre amoroso y perfecto que fue hasta los últimos días de mi abuela.

Nunca terminamos de conocer a las personas. Esa frase es bastante apropiada para este momento.

-No creo que lo haya matado porque no le dio algo, igual no lo tendría si mi abuelo estaba muerto. Sería estúpido de su parte si tenemos en cuenta todo lo que ha armado.

-Ella tiene razón. Sería estúpido, tiene que ser algo más-concuerda Isabell.

-¿Tu abuelo tenia testamento? –Me pregunta Evan.

-Sí, pero tampoco puede ser que lo haya matado para heredar ¿Por qué pensaría que mi abuelo lo tenía en su testamento, si nunca lo menciono, por lo que Jared dijo, mi abuelo lo abandono...Lo que por cierto, lo vuelve más peligroso de lo que pensábamos, debe estar herido...Yo lo estaría. Solo que él no lo está tomando bien, el abandono lo desquicio. ¿No tenemos el video de las cámaras de seguridad del día que mi abuelo murió?

-Aun no aparece, mi amigo esta rearmando el caso, y buscando la evidencia perdida pero no lo ha encontrado. También va a hacer que suspendan al inspector Davis por investigación.

-Además, ¿Po que matar a los hijos y sus familias? Necesitamos ese video, hasta donde yo sé, las cámaras de vigilancia de las oficinas de mi abuelo venían con micrófonos incorporados...papa siempre bromeaba acerca de eso.

-No tiene mucho sentido, la verdad.- concuerda Evan.

-Ahora sabemos quién es el tipo, pero ¿Dónde lo encontramos? Y ¿Qué significaba el correo de esta mañana?

Casi había olvidado por completo ese correo. Estaba tan preocupada por el jodido examen que no me di el tiempo de analizar esas palabras. Pero creo que tengo una idea de a que se referían.

-Creo que me hago una idea de lo que significa-digo alternando la mirada entre los tres.

Evan levanta una ceja, como cada vez que intenta descifrar a lo que me refiero o se sorprende. Estoy llegando a conocerlo casi tan bien como a mí misma.

Nadie dice nada y los tres pares de ojos esperan a que hable.

-De hecho es bastante sencillo; El tiene un modo operandi, cuando Evan y yo nos dimos cuenta de que algo era más extraño de lo que parecía, descubrimos que los asesinatos eran cada 2 años, un día 12, hasta el intento contra mi tío, o mi hermano para el caso...creo que no les habíamos dicho esto: el carro en el que estaba mi tío era el de Daniel, se suponía que Daniel iba a estar en ese carro. Si el correo decía y cito: Los planes han cambiado. Pronto sabrás a que me refiero, supongo que se refería, a que no va a esperar dos años para intentarlo de nuevo, se está desesperando y quizás sea porque se dio cuenta de que estamos escarbando.

-¿En serio no quieres venir a trabajar conmigo? –pregunta Jared juntando sus manos a modo de ruego.

Muy a pesar de todo me rio.

-No, pero gracias por la oferta. Planeo hacerme rica cuando escriba esta historia en un libro, que se vuelva best seller y entonces alguien decida convertirlo en una muy mala o bastante aceptable película, lo que no me importara porque estaré nadando en millones mientras hago lo que más me gusta.

-Eso suena como un plan-comenta Isabell- Yo sería tu representante, ¿No piensas dejarme sin trabajo cierto?

Ruedo mis ojos y digo:

-Volvamos al tema, por favor.

-Si lo que dices es cierto, quiere decir que en cualquier momento puede pasar cualquier cosa. Otro intento. Creo que el haber fallado en sus planes, lo está llevando a terminar lo que empezó de una vez por todas- recapitula Evan.

No tenemos más tiempo para seguir en esto. En cualquier momento algo se nos va a escapar y vamos a perder la batalla tacita que hemos empezado contra estos tipos.

-También lo va a llevar a cometer errores-digo recordando algo que Evan me dijo en algún momento; El odio ciego nos hace cometer errores elementales.

El teléfono de Jared suena al mismo tiempo que el de Evan antes de que nadie pueda decir nada de mi conclusión. Ambos hablan por unos pocos minutos y prácticamente cuelgan al mismo tiempo.

-Tienes que llamar a tu amigo el policía. Ahora. Ronald estaba tratando de salir del país, los hombres que tenia vigilándolo lo retuvieron, pero no van a poder hacer mucho sin una orden- Evan no ha terminado de decirlo cuando él ya está hablando por teléfono.

-Uno de sus hombres de confianza esta yendo hacia el aeropuerto en Nueva York-dice Jared cuando cuelga-Tu padrino acaba de salir de San Diego, para eso me llamaron, va de regreso a Nueva York.

-Todavía no logro conectarlos con esto, pero estoy seguro que algo tienen que ver en este asunto-murmura Evan y entonces mirándome agrega-Las casualidades no existen.

-No nos preocupemos por eso de momento, tengo gente vigilándolo también-lo tranquiliza Jared.

Mi celular vibra en mi bolsillo y saco para leer el mensaje:

Daniel: Mueve tu trasero al hospital. Mama tiene más de dos horas preguntando por ti. ¿Dónde estas?

-Tengo que irme. Me están esperando en el hospital-digo en general-Quizás sea buena idea que me dejes ver esa foto-agrego mirando a las carpetas que Evan aun sostiene-Solo por si acaso.

Evan saca la foto, la observa por un momento frunciendo el ceño y me la entrega. Casi se me cae de la mano de la impresión. Bell se para a mi lado observando lo mismo que yo.

-Es idéntico a tu abuelo, Gab. No podía negarlo, precisamente-Isabell murmura en voz alta lo que yo estaba pensando. Si cabía la posibilidad de que fuera una confusión, esta foto la elimina.

Se las entrego de nuevo a Evan aun impresionada por la verdad que se puede esconder tras una fotografía.

-Voy a buscar en los expedientes de los empleados-comunica Evan acercándose a mi-Creo que deberíamos hablar con tu familia de todo esto. Necesitan estar prevenidos, ahora tenemos pruebas-agrega mirando mi cara de escepticismo.

-De acuerdo. Esta noche. Te digo donde estamos, no quiero hacerlo sola.

Cierro la poca distancia que nos separa, engancho mis brazos alrededor de su cuello y lo beso. Evan me aprieta contra él y cuando nos estamos quedando sin aire deja un suave beso en la comisura de mis labios.

-Ten cuidado, por favor-susurra antes de liberarme

Isabell se despide de ambos y cuando estamos a punto de salir de la oficina Jared nos llama:

-Por cierto, ¿Debo asumir que sobrevivieron a aquel examen tan terrorífico que era más importante que la advertencia de un asesino?

-Jodidas genios- es la única respuesta que consigue de Isabell, yo solo niego con la cabeza y me rio cerrando la puerta tras nosotras al abandonar la oficina. 

La sombra del pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora