La sombra del pasado

Memorias de Evan

Memorias de Evan

4 años atrás

— ¿Mama? ¿Qué sucede? ¿Por qué lloras? —La niña de los ojos esmeralda entra corriendo en la habitación y se arrodilla junto a mi madre.

Ella la llamo mama. Eso quiere decir...

— ¿Evan? —Me llama mama interrumpiendo mis pensamientos. Levanto la mirada del suelo y las observo mirarme. Me levanto recuperando la compostura y me acerco a ellas.

—Avy, ¿Te acuerdas cuando me pediste un hermanito? —La chica asiente luciendo confundida. —Ese día te dije que tú ya tenias un hermano y que esperaba que muy pronto pudieras conocerlo...

—Mami, ¿Qué? —Mama la interrumpe.

<<Te enojaste con tu papa y conmigo porque no te llevamos con él y tú querías pedirle que te enseñara a jugar futbol porque Andrew era muy malo en eso. —La chica se ríe, sin duda, recordando. Yo las miro incapaz de articular palabra...Ella le hablo de mi. Mama le hablo de mí. —Te dije que aun no podía ser pero que estaba segura que él te iba a adorar y tú a él...que tenía tus mismos ojos. Mis ojos.

La chica lleva su mirada de nuevo a mí mirando fijamente mis ojos y uniendo las piezas.

— ¿Eres Evan? —Me pregunta —. ¿Ese Evan? —dice ahora dirigiéndose a mama.

—Avery, él es Evan. —Mama nos presenta —.Evan, ella es Avery...tu hermana.

La cosa más rara del mundo pasa en ese momento.

Avery se levanta y salta a mis brazos haciéndome perder el balance y casi tumbándome.

Se engancha a mi cuello como un monito bebe dejándome incapaz de reaccionar.

Esta debe ser la manera más extraña de recibir a tu hermano perdido y que no conoces de nada.

Poco a poco enrollo mis brazos alrededor de su pequeño cuerpo apretándola contra mí.

Las lágrimas vuelven a mis ojos mientras Avery solloza en mis brazos.

Mama no observa ahogando sus propios sollozos en sus manos.

—No puedo creer que por fin estas aquí...que por fin pude conocerte —susurra con su cabeza enterrada en mi cuello.

—También es un placer conocerte...hermana —susurro esto último probando la palabra en mi boca.

Me gusta como suena.