La sombra del pasado

Epílogo

Epílogo

3 años más tarde.

Gabriella POV

Observo la tumba frente a mí.

Los rayos de sol hacen destellar el nombre impreso en la lapida

Isabell Rosbell.

La mejor amiga que cualquiera pudiera desear.

Hoy se cumplen tres años de su muerte. Su asesinato cerró el ciclo, fue la última obra. Desde entonces las cosas han mejorado pero no creo que el dolor se vaya nunca. La perdida siempre va a estar ahí, al igual que con el resto de mi familia. Los seres humanos aprendemos a vivir con el dolor, es parte de la vida.

Nada puede ser perfecto.

-Se supone que todo lo que estoy viviendo teníamos que vivirlo juntas, Bell-digo agachándome frente a su tumba.

Ayer me convertí oficialmente en periodista. Después de la muerte de Isabell decidí que no me iba a conformar con estudiar algo que me gustaba pero que no era mi vocación real, así que, una semana después, hice equivalencia y cambie de carrera.

Isabell había insistido en eso tantas veces. Ella sabía que aunque me encantan los libros, la literatura no era algo a lo que me quería dedicar.

Fue la mejor decisión que he tomado en años.

Sin embargo no había querido venir antes de la graduación. No podía hacerlo. Era más fácil fingir, al menos por unas horas, que ella estaba en un largo viaje por Europa como siempre soñó y no aquí.

-¿Estas lista para irnos, princesa? –La voz de mi tío me saca de mis pensamientos-creo que hay alguien que te está esperando.

Él fue lo único bueno de ese día. Perdí a mi mejor amiga al mismo tiempo que recupere a mi tío. No sé que hubiera hecho si lo perdía a él también.

-Si-digo levantándome y girándome a mirarlo. Él besa mi frente y pasa su brazo por mi hombro apretándome contra su costado. Giro mi cabeza para darle una última mirada al lugar donde la gran mayoría de mi familia yace antes de regresar mi mirada a la tumba de Bell.

Respiro profundo, coloco mi brazo alrededor de la cintura de mi tío y comenzamos a caminar hacia el auto donde Evan nos está esperando.

Mi mirada se traba con la de él y mi corazón comienza a hacer esa cosa loca que hace cada vez que lo veo. Tenemos tres años juntos y se sigue sintiendo como la primera vez.

Él ha estado ahí cada vez que pensé que mis fuerzas flaqueaban.

Es todo y mucho más de lo que pude soñar.

Daniel no estuvo feliz con nuestra situación al principio, pero entonces Evan y él tuvieron "la charla" y a regañadientes Daniel acepto que nunca hubiera considerado a alguien lo suficientemente bueno para estar conmigo, excepto, tal vez, Evan. Ahora siguen trabajando juntos y la firma cada vez crece más.

Me separo de mi tío y corro hacia sus brazos abiertos mientras el finaliza la llamada y guarda su celular en su bolsillo, yo acabo con la distancia que nos separa. Me estrecha entre sus brazos y besa mi frente. No hay un lugar donde preferiría estar que aquí.

Me giro sin romper el contacto entre nosotros y él me mantiene abrazada por la cintura.

-Nos vemos en la casa-dice mi tío mirándonos con una sonrisa.

Volteo a ver a Evan de nuevo en lo que mi tío nos deja a solas.

-¿Pasa algo? –pregunto cuando mi tío se marcha.