Avengers Academy

10

Edward

Leila había venido hasta la Torre de los Vengadores para avisarnos de que nos tenemos que ir a la Base de los Nuevos Vengadores. Y que es urgente, me pidió que llamase a Cassandra mientras ella iba al baño.

Vamos a ser sinceros, ¿por qué tengo que avisarle yo? Supongo que me ha tocado a mi.

Fui a su habitación y abrí la puerta sin tocar encontrándome con una situación incómoda, demasiado incómoda.

Observé a Dylan y luego observé a Cassandra. Dylan se estaba poniendo el pantalón y Cassandra ya tenia puesta la camiseta del chándal.

¿Pero que ha pasado aquí? Pues que va a pasar, se la ha tirado.

- ¿Es que no sabes llamar a la puerta? - me dijo Dylan cabreado.

Cassandra se puso roja y comenzó a buscar sus pantalones y Dylan cogió su camiseta y se la estaba poniendo. Aproveché que Cassandra estaba en braguitas para mirarle el culo, pero cuando se dio la vuelta dejé de mirar.

- Hay que irse, ya - cerré la puerta detrás de mi y caminé hacia el salón.

Me hervía la sangre, odiaba a Dylan. Lo odiaba con toda mi alma por haber hecho lo que ha hecho con Cassandra. Tenía el ceño fruncido cuando llegó Leila.

- ¿Que te pasa? - justo en ese momento llegaron  Dylan y Cassandra.

- Nada - dije entre dientes y apreté el mentón.

No entiendo por qué me molesta tanto que se hayan acostado. Supongo que él ha conseguido algo que yo no. Pero por qué pienso estas cosas. Cassandra y yo nunca nos hemos llevado bien.

- Vamos nos están esperando - volví a decir entre dientes.

Caminé hacia el Quinjet, y entré en él. Luego entraron ellos y yo me senté en un asiento y delante de mi se sentó Cassie y a su lado Dylan. A mi lado se sentó Leila.

El Quinjet por dentro era de color negro y gris. Miré a Cassandra enfadado y ella apartó la mirada, ¿que me estaba pasando? No paraba de pensar en ella.  No de esa forma sino de una forma sucia, imaginandome a mi con ella. A ella debajo mía.

Me sacudí un poco el pelo y cogí mi móvil. Tenía un par de mensajes.

Papá: (11:30)
Estoy en la Base de los Nuevos Vengadores. No lleves a ninguna chica a casa, ¿entendido?

Leroy: (12:15)
Tío, ¿dónde estas? Vamos a quedar algunos en el bar de siempre.

Mamá: (12:30)
Llevo días sin verte, ¿cuando vas a venir?

Mamá: (12:45)
Tu abuela quiere que vengas a visitarla. Ven el sábado, ¿vale?

Leroy: (12:50)
¿Por qué no me coges el teléfono? ¿Te estas tirando a alguna tía? Vente al bar. Estamos todos aquí.