CAPÍTULO 14

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Andrea POV

¿Quieres ser mi novia? No estaba segura pero creía estár soñando, mi boca estaba seca y mi corazón aceleradoro mientras Samuel me miraba muy intensamente esperando mi respuesta.

Nunca había sido tan feliz cuanto tiempo me prohibí sentirme así.

Samuel: Entiendo si quieres que nos conozcamos un poco más pero yo...

No lo dejé terminar porque me le fuí encima besándolo con mucha pasión pero sobre todo amor, quería demostrarle todo el amor que siento por él, todo lo que había callado por tanto tiempo.

Mis labios junto a los suyos era todo lo que estaba bien en mi vida, luego de que me faltara el aire me separé y cuando abrí mis ojos él aún tenía los suyos cerrados no pude evitar reírme por lo tierno que se veía así,  cuando él escuchó mi risa abrió los ojos y me sonrió.

Samuel: ¿Eso fue un si?

Andrea: ¿Tú qué crees?

Y sin más palabras ahora fue él quien me besó a mi tomándome de la nuca para intensificar el beso.

Ya no podía recordar el lugar en el que estábamos, ni siquiera supe en que momento llegué a estár sentada en los regazos de Samuel con una de sus manos en mi cintura, suspiré en medio de nuestro beso cuando caí en cuenta de todo lo que estaba ocurriendo, me seprare mordiendo su labio inferior, era algo que siempre deseé hacer, él me miro con mala cara como si hubiese hecho lo peor del mundo lo cual me hizo reír nuevamente.

Samuel: No me parece nada gracioso brujita, siempre rompes nuestros besos y yo no quiero parar de besarte, quiero estár siempre así.

Pegué mi frente a la de él mirando sus hermosos ojos sin poder creer lo infantil que estaba siendo y lo peor era que me parecía lo más tierno, realmente estaba enamorada de Samuel Gallardo.

Andrea: A ver Mugrosito, no sé si lo recuerdas pero estamos en un lugar público.

Le dí un piquito para después levantarme de sus regazos, una sonrisa avergonzada apareció en su rostro.

Samuel:  Perdón pero es que tus besos hacen que me olvide de todo lo que está a mi alrededor.

Se levanta tomándome de la cintura, luego se acerca a mí oído.

Samuel: Eres una brujita hechizera.

Susurró logrando que se me herizara la piel.

Samuel: ¿Señorita Andrea acepta bailar conmigo?

Andrea: ¿Yo? ¿Bailar con un abrero mugroso como tú? ¡JAMÁS!

Samuel: Escúchame bien bruja apestosa a caballo, ven para acá y baila conmigo.

Río incontrolablemente mientras empezamos a bailar, sus brazos a mi alrededor me hacen sentir segura.

Fue cuando decidí que era hora de irme que tuvimos un inconveniente pues Samuel quería acompañarme hasta el rancho y por más que le pedí que no me siguiera lo hizo.

Cuando estaba cerca de llegar al rancho aparqué y él también, quería despedirme.

Samuel: Brujita por favor habla con Manu, cuando me llamó lo noté bastante afectado con la situación.

Andrea: Hablaré con él.

Asiente y se acerca a besarme.

Andrea: Gracias por esta noche, ha sido la mejor que he tenido en toda mi vida.

Samuel: Bueno a pesar del mal momento que tuvimos que pasar por culpa de Patricia admito que para mi también fue la mejor en toda mi vida, todo fue muy hermoso, bueno, contigo todo es hermoso brujita, todo es mucho mejor... te quiero mi amor.

Me paralizé al escuchar como me había llamado, las lágrimas querían salir pero pude impedirlo, no quería hechar a perder el momento pero la emoción era grande, la primera vez que me decía mi amor.

Samuel: Burjita, ¿Estás bien?

Andrea: Me dijiste mi amor, lo dijiste.

Samuel: Si mi amor.

Sonríe y besa mi frente.

Samuel: Eso es lo que eres para mi, mi amor, mi vida, mi todo. Mía, sólo mía.

Andrea: Tuya y tú sólo mío... también te quiero mugrosito.

Samuel: Amor mm... ¿Cuándo le contaremos a todos que somos novios?

Sonríe con sus ojitos brillando por la emoción.

Eso me tomó desprevenida, no sabía que hacer respecto a eso, si mi madre se enteraba de todo probablemente me mate y vuelva a odiar a los Gallardo y yo no me perdonaría ver a mis hermanas sufrir de nuevo y ahora por mi culpa, tenía que encontrar la manera de decirle a Samuel que esperemos por un tiempo.

El problema es que no sabía como se lo tomaría él.

Andrea: Mugrosito, ¿Podemos esperar un poco? Mi madre se va a enfadar mucho cuando se entere de lo nuestro.

Samuel: ¿No quieres que lo sepan?

Me interrumpe, pude ver que su mirada ya no brillaba como hasta hace unos segundos, ahora mostraba decepción y más que nada tristeza.

Muy bien Andrea del Junco, acabas de dañar lo más bonito que tenías.

SAMDREADonde viven las historias. Descúbrelo ahora