CAPÍTULO 33

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Andrea POV

Tres semanas era el tiempo que llevaba en casa de Leandro y Elena, al día siguiente de estár allí decidí contarles toda la verdad porque no se me hacia justo con ellos que estaban siendo muy buenos conmigo, había hablado con mi abuelo y con mis hermanas seguido pero con mi mugrosito no volví a hacerlo, Irina en sus imprudencias me hablaba de él diciendo que después de toda la mañana en el Banco volvía para almorzar y se iba a otra vez pero no sabe donde, sabía que ella lo hacía para ponerme celosa y que regresara pero la verdad era que confiaba en Samueo y su amor por mi y era por todo ese amor que ya estaba dispuesta a volver y aunque a Elena no le gustó la idea aceptó, en ese poco tiempo ya era una persona muy especial en mi vida así como yo en la de ella.

Elena: Ven a visitarnos siempre que gustes, no te olvides de nosotros - me dijo con los ojos cristalizados y la abrazé -

Andrea: Claro que si vendré Elena, ustedes se volvieron parte de mi vida y les agradeceré siempre todo lo que hicieron por mi.

Elena: Nos trajiste mucha alegría a mí y a mi esposo - sonríe aún llorosa después de separarnos - Eres un ángel.

Andrea: Ustedes dos fueron mis ángeles en el peor momento de mi vida. Gracias por todo Leandro - dije ahora a él -

Leandro: Gracias a ti Andreita - sonríe y me extiende la mano pero yo lo abrazo y él muy tímido me lo regresa -

Andrea: ¡Es hora de irme!

Los miré por última vez pero cuando estaba a punto de subirme al auto sentí un mareo muy fuerte, los dos se acercaron preocupados.

Elena: ¿Andrea, estás bien?

Andrea: Sí, sólo fue un pequeño mareo, nada grave - sonreí incorporandome - Ahora si me voy.

Subí en el auto y tras despedirme con la mano me encaminé al rancho Gallardo, moría por ver a mi mugrosito. Cuando llegué toque el timbre y la que me recibió fue mi nana que gritó mi nombre abrazándome e inmediatamente llegaron todos atosigandome de abrazos y preguntas, mi mugrosito no estaba lo cual me puso un poco triste pero hablando con mis hermanas se me pasó un poco.

Irina: ¿Ya estás mejor?

Andrea: ¡Si! - suspiré - Solo necesitaba pensar y alejarme un poco de todos, la muerte de Manu fue algo que no esperaba y que me dolió mucho, después entrarme de que Samuel lo sabía me destrozó.

Sofía: No estuvo bien por parte de Samuel pero también era la última voluntad de Manu. Todos nos preocupamos mucho por ti en especial Samuel, ha estado muy triste desde que te fuiste.

Andrea: Hablaré con él pero quiero que sea especial - sonrío - Por eso necesito de la ayuda de ustedes.

Irina: ¡Ay! ¿Qué necesitas?

Preguntó entusiasmada, yo estaba igual.

Andrea: Primero...

Samuel POV

Estaba en el rancho que compré para mi y para mi brujita, desde hace ya tres semanas que no sé absolutamente nada de ella y estoy muy triste porque sé que habla con sus hermanas y no quiere hacerlo conmigo. Después del trabajo me entretengo ordenando y decorando toda la casa para cuando nos mudemos, confió en que ella no me dejará y volveremos con nuestros planes, en todo caso si ella intentara dejarme yo no lo permitiría, lucharía por ella. Llegué hasta después de la cena al rancho, cuando entré los ví a todos muy felices pero yo no estaba de ánimos así que sin saludar me fuí directo a la recámara, cuando abrí la puerta me llevé una gran sorpresa al verla oscura pero llena de velas por todas partes.

Samuel: ¿Brujita? - pregunté asombrado por lo que estaba viendo -

Andrea: La misma, tú brujita - sonrió al mismo tiempo que dejaba caer su bata dejándome ver un diminuto conjunto de ropa interior rojo y negro muy provocativo causando que mi respiración se volviese irregular - No sabes cuanto te extrañé mugrosito mío.

SAMDREADonde viven las historias. Descúbrelo ahora