Remember me ◄ Nick Jonas y Tu ► | TERMINADA|

C A P I T U L O 23

— ¿Y cómo fue?
— Y como fue ¿Qué? — pregunte extrañado.
— ¿Cómo fue que tu y yo nos volvimos novios? — pregunto con un ligero rosa en sus mejillas.
—No fue fácil sabes... — reí con melancolía —Debo confesar que la mayor parte del tiempo que pasaba contigo, yo estaba nervioso. — ella soltó una risita. —Después de un tiempo de ser amigos... — baje la mirada. —Me atreví a besarte— volvió a reír.
— ¿Y después? — pregunto ansiosa.
—Después... Te tome de la mano izquierda— hacia la acción al mismo tiempo que mis palabras, su rostro palideció cuanto cubrí su mano con la mía —Puse la derecha sobre tu cuello... — acaricie con suma delicadeza su tersa piel y la sentí temblar levemente mas sin embargo no se movió. — '(tn) me encantas, me vuelves loco, eres la mujer más hermosa, inteligente y cariñosa que conozco... Y quiero que seas mi novia.' — cité mis mismas palabras, las cuales había improvisado tiempo atrás, pero sin duda eran todas ciertas.
—Nick... — suspiro mientras sus ojos se cristalizaban de nuevo. De un momento a otro se amarro a mi torso soltándose en llanto una vez más.
— ¡Quiero recordarte! ¡Quiero recordar todo! ¡Olvide la más de la mitad de lo que he vivido! — ¿Que se supone que hiciera? ¿Acariciarle el cabello y decirle: 'Tranquila, Tranquila'?
—Tranquila... Tranquila— no podía hacer absolutamente nada más.
— ¿Tranquila? — Me fulmino con la mirada —Olvide el lugar donde nací, olvide a mis amigos, amigas, familia, a mi novio, ¡Olvide todo!
—No todo...
—Pero si las cosas más importantes.
—Pero vas a recordarlo... — dije confiado —De eso me encargo yo.
—Pase ¡Dos años! con las terapias para las 'pesadillas' y esas cosas, y sigo sin tener la menor idea de mi pasado— hablo cabizbaja.
—Tú hace unos momentos dijiste que en veces te parezco familiar...
—Pues sí, pero solo eso.
—Pues solo eso... es un gran avance. — Toque juguetonamente su nariz — ¡Hey! Espera... — dije sonriente antes de salir disparado hacia mi habitación.
Rebusque en los cajones con desesperación, pero no lograba encontrarla. Estaba más que seguro que si la había guardado por ahí. Hasta que la encontré, regrese a la sala.
—Mira. — me senté de nuevo a su lado mientras le entregaba la única foto que al menos yo conservaba de nosotros juntos. Había sido tomada en un cumpleaños mío y salíamos abrazados mirándonos a los ojos.
De nuevo las lágrimas empezaron a descender.
— ¿Hace cuanto fue? — pregunto con un hilo de voz.
— Dos años y unos meses... — suspire al ver la imagen —Fue de las ultimas fotografías que nos sacamos.
—Tu sonrisa y tu mirada son muy diferentes ahora— acariciaba cada detalle de la foto.
—Es que ahí te tenía conmigo. — volteo a verme conectando nuestras miradas.
— ¿Me querías mucho?
—No.
—Ah. — volvió a bajar la mirada
—Te amaba más que a mi vida, y sinceramente... lo sigo haciendo. — su rostro volvió a girar hacia mí y simplemente no pude evitarlo. Me acerque tanto que pude rosar sus labios con los míos, mi mano derecha fue directa a su cuello, mas no la bese. Cerré los ojos con frustración, no podía hacerlo.

—Solo hazlo... — suspiro. Sorprendiéndome demasiado. No podía hacerlo sin si consentimiento, la respetaba enormemente más aun siendo que yo para ella hace unas horas era un desconocido.

Capture su labio inferior, disfrutando cada segundo. Ella comenzó a seguirme, era un beso suave. No quería asustarla, pero ¡Dios! Como extrañaba sus labios, sus besos. Era una tortura no hacerlo como yo quería.

Poco a poco fui subiendo de 'grado'. El beso tomaba intensidad mientras los segundos transcurrían, no me alejaba de ella ni para dejarla respirar. Adentre mi lengua recorriendo su boca, tratando de así localizar la suya. Soltó un pequeño gemido cuando logre mi cometido. Sin separarse de mis labios se giro poniéndose de rodillas frente a mí, hice lo mismo para tener un mejor acceso a ella. La deje respirar solo por un momento mientras me perdía en su cuello.
—Nick... — jadeo —Necesito recordarte... Necesito sentirme menos culpable por esto que me haces sentir— dijo mientras tocaba su estomago. —...Que estas mariposas que siento cada vez que te veo son porque tuvimos un pasado.

— ¿De qué sirve? Si no vamos a tener un futuro. Tú tienes novio al que amas ¿no? — me aleje de ella, la cordura había vuelto como si me arrojaran un balde de agua fría. Ella me confesaba que sentía 'mariposas' cuando me veía y yo mataba de una sola la inspiración del momento — No quiero volver a sufrir como cuando te fuiste. No quiero si es posible amarte mas y que después me digas que tu estas con Joe. — bueno, al menos tenía mis razones... más que justificables razones. —Sí, yo amo a Joe...— puedo apostar la cabellera a que no estaba segura de esas palabras —Pero no sé, todo podría cambiar mucho si te recordara... Fuiste al chico que le di mi virginidad— se sonrojo —También debí amarte más que a mi vida... —No creo que lo entiendas— dije en un susurro —Pero hare lo que esté en mis manos, ya te lo dije. Te puedo acompañar a tus terapias, conseguir fotografías, contarte recuerdos... Siempre y cuando tu familia y tu novio te lo permitan. —Nick soy mayor de edad no me importa si mis padres y Joseph dicen que no. Estoy lo suficientemente grande para tomar mis decisiones. —Entonces no hay nada más que decir— me deje caer en el sillón. —Solo una cosa más... — se sentó en mi regazo poniendo sus piernas a mis costados, me tomo firmemente de las mejillas para en pocas palabras devorar mis labios con un salvaje beso. No tardo ni cinco segundos en ponerme al cien.

La tome de la cadera fuertemente para poder pararme cargándola y así girándonos para aprensarla contra el respaldo del sofá. —Yo también soy mayor de edad— hable con una agitación tremenda y voz ronca. —Vuélveme a besar así y yo tomare decisiones que implicaran a ese lunar escondido. — sus mejillas ardieron y sus ojos brillaron. Con rapidez rodeo mi cuello con sus brazos y sus labios volvieron a chocar con los míos. No había marcha atrás yo la había advertido. La recosté en el sillón, mientras ese beso crecía y crecía yo colaba mis manos por debajo de su blusa... Cuando de repente el bendito timbre nos interrumpió. Las ganas de tomar un martillo y destrozarlo en mil pedazos no fueron pocas. — ¿Esperabas a alguien? — No, y si lo hacía tu me hiciste olvidarlo. — soltó una risita. —No sé cómo fue que pude olvidarte— suspiro —Eres increíble. — una vez más el timbre sonó. — ¿No abrirás? — ¿Bromeas? ¡Dos años! Casi tres sin verte y ahora que estas aquí... Y así — le guiñe un ojo y carcajeo ¿Cuántas veces la había hecho sonrojar hoy? —No quiero desaprovecharlo. —Me alegra— sonrió —Pero ya es algo tarde y no me gusta conducir de noche— entendí sus razones. —Yo te llevo más tarde...— mordí suavemente su labio inferior. — ¡Dios mío! Tengo novio y mira lo que estoy haciendo— enuncio alarmada. —No lo estas engañando— reí —Digamos que es parte del tratamiento de 'recuperación de memoria'

—Pensaras que soy una cualquiera— como de rayo se puso de pie. —Nunca. — dije sincero mientras que me paraba frente a ella y acaricio mi mejilla. —Debo irme. — asentí con la cabeza y la acompañe a la puerta. —Nos vemos— dio un beso en mi mejilla, pero rápido la tome de la cintura y di un inocente beso sobre sus labios. —El último lo prometo— rio tímidamente y abrió la puerta, encontrándonos con nada más y nada menos que una para nada feliz Melody