Cuentame La Verdad

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Capitulo 21

Ya habían pasado dos días desde que Seth me contó la verdad, por eso fue que no quería que estuviera en su vida, por eso no quería dejarme entrar en su corazón, temía que me pasara lo mismo que Jane, y desgraciadamente así fue, sigo en el hospital y todavía me queda días para responderme según dicen los doctores, los chicos han venido a verme, en verdad los había extrañado demasiado al igual que a mis padres, mi madre vino pero no era igual que antes, se sentía distante, como si no fuera su hija, como si no me conociera, en cambio mi padre se veía nervioso, como si me ocultara algo, y así fue, aquí nos encontrábamos los dos, había un silencio enorme en la pequeña habitación del hospital, no se escuchaba más que el pitido de las máquinas que estaban conectadas a mi cuerpo y el ruido del tráfico, me preocupa ver a mi padre así, de esta manera, tan sensible y vulnerable, al cabo de unos segundos mi padre habla.
-Sue, lo que te tengo que decir es muy duro, no sé ni cómo hacerlo, esto es lo que no quise decírtelo desde hace mucho tiempo, pero ahora que sabes la verdad sobre Seth, me veo obligado a contarte la verdad sobre mí, sobre nosotros, tu madre y yo.
-Papá me estás asustando.-dije, moviendo mis manos nerviosamente de un lado a otro y agarrando lo primero que tuve en mi camino.-papá pasó a través de la habitación y se sentó a mi lado, agarro mis manos temblorosas y se dispuso a hablar.
-Hace un tiempo, cuando tú eras pequeña, bueno, no tan pequeña, pero para mí todavía lo eras, y lo sigue siendo, en fin, en aquellos tiempos, tú eres una niña muy tímida, más de lo que llegaste hacer a inicios de los anteriores años, en ese tiempo tú no estabas sola, había alguien que siempre te acompañaba y defendía de las personas que querían molestarte, esa persona era muy parecida a ti físicamente, pero a la vez eran muy distintas, a ella le gustaba salir de fiesta, disfruta la vida, tener muchos amigos, le encantaba perforase diferentes partes del cuerpo y también le gustaba cierto chico mayor a ella, era un caso perdido, recuerdo que siempre las personas luchaban para que obedeciera, creía que el mundo estaba a sus pies, que nadie tenía la razón excepto ella.-espera.-lo interrumpo.-Papá, se más claro, dime, ¿acaso tenía una hermana que no recuerdo?.-el silencio inunda la habitación nuevamente hasta que mi padre vuelve hablar.-Si Sue, tenías una hermana, para ser más concretos era tu melliza, sólo que por problemas médicos naciste unos meses después que ella.-En ese momento la historia de Seth se me pasa de nuevo por la cabeza, es posible que yo y la chica de esa historia... no, no puede ser, eso no puede ser.-Papá, cómo se llama la chica de esta historia, necesito que me lo digas.-una sonrisa triste aparece en su candado rostro.-Estoy seguro que sabes su nombre, él ya te contó su historia, ¿no?.-Siento como mis ojos comienzan a arder por las ganas de querer llorar, así que la chica que sufrió el accidente de tránsito, la que quedó en coma, esa... esa era yo, y Jane, no, ¡no puede ser!, ella era mi hermana pero, ¡¿cómo es que no me acuerdo de ella?! como es que ni un pensamiento, ni una sola memoria, nada, no la recuerdo, como si nunca hubiera existido en mi vida, y ¿por qué nadie me habló sobre ella, por qué nadie me quiso contar sobre esto hasta ahora, precisamente tuvo que pasar esto para que me lo pudieran decir?, sigo sin creerlo, mi corazón late rápidamente, mis manos me sudan y tengo la mente en blanco, siento como las lágrimas se deslizan por mis mejillas, quiero gritar, quiero decirle a mi padre todo lo que pienso pero ni una palabra logra salir de mi boca, nada, veo un punto fijo en la blanca pared hasta que después de unos minutos de intentar procesar todo puedo hablar.
-¿Por qué no la recuerdo, porque no recuerdo nada sobre ella, por qué no recuerdo nada sobre mi antigua vida, por qué mi nombre cambió, por qué? necesito información ¡necesito que me lo digas todo!.-Miro a mi padre con desesperación en mis ojos.
-Sue, hay algo más que tienes que saber.-sujeta mis hombros para poder tranquilizarme.-no es todo, falta la parte más importante de esta historia, es sobre tu madre y yo, nosotros teníamos que decírtelo algún día, se que es demasiado tarde, y sé que la herida serán más grande, pero tienes que saberlo.-hace una pausa, para luego continuar.-En ese tiempo tus padres se estaban separando.-¿Por qué se refiere a él y a mi madre de esa manera?.-Habían muchos problemas en su hogar y por esa razón fue que Jane cambió tanto de personalidad, no siempre fue así, pero ese cambio en su hogar la obligó a ser quien era, tu te encerraste más en tu mundo, no hablas ni te quejabas, solo mantenías silencio. Tu madre era una mujer muy buena, pero tu padre siempre pasaba en viajes de negocios, o si no viajaba, llevaba a mujeres estado en su despacho y pretendía ser el buen marido que tu madre deseaba, pero no era así, tenía otra mujer y tu madre no lo sabía hasta que un día lo descubrió y ahí fue cuando ella le pidió el divorcio, ella estaba devastada, las había descuidado demasiado y se dedicado sólo a ella, bebía demasiado, pasaba sola en su cuarto encerrada, no comía y si comía era comida basura, parecía como si no le importaba lo que les pasara a ustedes. En cuanto a su padre, las abandonó, dejó su hogar por aquella mujer, ustedes estaban solas, no recibían cariño o afecto, en ese momento pasó todo lo de la accidente de tránsito y también la muerte de Jane, fue cuando la hermana de tu madre apareció y se dedicó a cuidarlas, ella quería tu custodia y se disponía a quitársela a tu madre, pero un día cuando fueron a buscarla en su casa, se dieron cuenta de que  ya no tenía vida, no sabían desde cuando había muerto, al realizar la autopsia, los médicos dijeron que había muerto por sobredosis, tomaba demasiado, y al parecer también se drogaba, tenía una vida miserable y horrenda, en cuánto a ti, habías perdido la memoria, no recordabas nada sobre tu antigua vida, así que fue más fácil criarte como una nueva persona, nuevas ideas, nuevas memorias, nuevos recuerdos felices con una familia que si te quería.-No podía procesar nada de lo que mi padre decía, es decir mi tío al parecer, no puedo creer lo que me está contando, no puedo creer que no soy su hija, no soy su chiquita, todo este tiempo viví creyendo mentiras, pero no me voy a quejar tuve una buena vida, todos los recuerdos pasaron con una ráfaga de viento por mi mente, golpeando mi cabeza, ahora si recordaba todo, al parecer los recuerdos de hace unos días eran los que había olvidado por el accidente de tráfico, un dolor se apoderó de mi cabeza haciendo que lleve mis manos a mi cara, me sentía mareada, con náuseas, creí que iba vomitar en ese mismo momento, quite mis manos de mi cara y ya abrí mis ojos lentamente, mi padre me veía con una expresión de angustia, sabía que estaba sufriendo, y así era, el dolor en mi pecho era demasiado, sentía que iba explotar, no puedo creerlo, me niego a creer esta cruel realidad, por qué todo esto me tiene que pasar a mí, ¿por qué yo?, esa es la pregunta que más me hago ahora, ahora ya se una razón más por la que Seth no quería estar conmigo, le recordaba a su novia, a mi hermana, por esa razón él se negaba a que yo estuviera a su lado todo este tiempo. Mi padre toma mis manos entre las suyas, me mira directamente a los ojos, listo para decirme algo.
-Sue, no importa quién eres o quién eras, sigues siendo mi hija, sé que esto va a cambiar demasiado nuestras vidas, pero podemos superarlo y lo haremos, puedes quedarte a vivir aquí conmigo o puedes regresar con tu mamá, ella sabe que te lo conté todo, tú eres la que debe elegir pero ahora no quiero que te presiones, toma tu tiempo para pensar en todo lo que te acabo de decir, tienes que digerir demasiado, recuerda que te amo demasiado, eres mi hijita y siempre lo serás para mí eso no cambia nada, te amo mucho mi pequeña.

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