¡¿QUÉ?!
-¡¿QUÉ?!- dije sin creermelo todavia.- Alex podemos hablar por favor- dije más tranquila- me puedes explicar cómo que él es tu hermanastro.
-Verás Olivia mi padre nos abandonó cuando yo tenía 9 años -empezó a decirme Alex sabía que esto le dolía y no me gustaba verlo así- mi madre empezó a cuidarme ella sola con la ayuda de mi abuela. Yo sabía que mi madre tarde o temprano tendría que rehacer su vida, entonces ella encontró un trabajo nuevo aquí, en Los Ángeles, y entonces es cuando conoció a Marcus, el padre de Dylan. Yo conocí a Dylan en el instituto, desde el primer día Dylan y sus amigos empezaron a meterse conmigo. Un día cuando llegue a casa mi madre me presentó al que entonces era su novio y a su hijo, y entonces vi a Dylan. Con el paso del tiempo mi madre se casó con Marcus y nos mudamos a esta casa.
- Espera,espera interrumpir a Álex-¿me estás diciendo en serio que desde entonces, desde que te conoció, se mete contigo? y ¿aún después de enterarse de que tu madre y su padre estaban juntos seguía metiéndose contigo?- Alex asintió estaba perpleja no me lo podía creer- está bien esto se va acabar- dije más para mí misma. Entonces me di media vuelta dándole la espalda a Álex y dirigiéndome en dónde se encontraba Dylan- Tú -lo señalé con mi dedo- cómo puede ser tan tan...
-Tan guapo sí me lo dicen mucho- me sonrió con superioridad.
-Tan cabrón- Dylan abrió la boca incredulo. Al parecer lo había cojido por sorpresa.
-Que has dicho - dijo apretando los dientes.
-Lo que oíste- entonces Dylan iba a decir algo pero yo me di media vuelta y me dirigí hacia Álex- bueno nos vamos al centro comercial.
-Sí claro- dijo Álex sin poderse creer todavía que le haya dicho eso a Dylan.
-Ya os vais- a precio Cassandra con una sonrisa en la cara.
-Sí mamá ya nos vamos- dijo Álex dándole un beso a su madre.
-Ha sido un placer conocerte Olivia espero verte más a menudo por aquí.
-El placer ha sido mío- dije acercándome a ella y dándole dos besos, a lo que ella también me respondió con un abrazo.
-Bueno que os lo paséis bien- dijo Cassandra despidiéndose de nosotros- y tened cuidado- dijo mientras salíamos por la puerta de su casa.
(...)
- me lo he pasado muy bien Olivia, nunca pensé que ir de compras con una chica iba a ser tan divertido- dijo Álex cuando ya estábamos llegando a nuestras casas, y con eso me vino el recuerdo de lo bien que nos lo hemos pasado hoy en el centro comercial. Primero hemos ido haber las lentillas de Álex, al principio él no estaba muy seguro pero después de probarse las vio que no eran tan incómodas como él pensaba y la verdad podría acostumbrarme a este nuevo Alex sin gafas, le quedaba muy bien, después también fuimos a comprarle algo de ropa nueva, le propuse que ya que se había quitado las gafas podría cambiar de look y después de ir a varias tiendas pudimos ver algo que le favorecía y por supuesto también fuimos a ver ropa para mí, no lo pasamos genial.
- sí yo también me lo he pasado genial. Oye Alex- empecé a decir cuando ya se veía a lo lejos la casa de mis tíos y la suya- mañana te pondrás lo que hemos comprado hoy no-pregunté ya que me gustaría mucho que se pusiera la nueva ropa que compramos.
-Por supuesto quiero que todo el mundo vea lo buena consejera de moda que eres- dijo con una sonrisa en la cara- bueno hasta mañana Olivia.
-Hasta mañana Alex oye una pregunta- dije haciendo que Alex parará en seco y se volteara a mirarme- tú mañana irás en autobús.
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Hasta El Amanecer
JugendliteraturOlivia es una chica de 16 años, que se muda a los Estados Unidos tras sufrir un terrible accidente que cambia su vida por completo. Donde conocerá a Dylan un chico de 17 años guapo y popular, pero también egocéntrico y mujeriego. Dylan hará todo lo...