Capítulo 17

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Hoy es la última etapa para recuperar a Tommy. Estoy asustada al respecto por supuesto aunque el abuelo me ha asegurado un montón de veces que no hay nada que de qué preocuparse. Me visto de manera formal. Pretendo dar un mensaje alto y claro el día de hoy. Soy perfectamente apta para cuidar a este menor. Soy una mujer fuerte y felizmente casada. Me río pensando lo último, estos dos últimos días han sido todo menos felices junto a Noah Stone. Se ha comportado como el imbécil que supe todo el tiempo que es. Por supuesto conmigo ha encontrado la horma de su zapato, puedo ser tan molesta y atormentarlo tanto que se arrepentirá toda su vida de haber dudado de mí. Ahora estamos en el punto en el que solo nos ignoramos. He tomando el cuarto de invitados como mío, aunque uno de los requisitos de Noah era dormir en la misma habitación, según él porque los empleados de la casa podrían sospechar, no accedí y tuvimos una gran discusión al respecto, pero decidí mudarme con él en tanto Tommy volviera hoy con nosotros. Cuando estoy lista, bajo las escaleras y me encuentro a Noah sentando en el sofá. El negro de su traje hace un contraste espectacular con el blanco del sofá. Trago saliva. Ninguno de los dos hablamos y nos dirigimos al ascensor. Por alguna razón me encuentro nerviosa en su presencia, o es la situación, no lo sé. El hecho es que tengo una extraña sensación en el vientre. Cuando ingresamos al ascensor, me siento aún más tensa, es un espacio pequeño y siento el calor de Noah Stone por todas partes, es incluso asfixiante. Noah voltea un poco la cabeza hacia mí y es ahí cuando me doy cuenta de que lo que estado mirando fijamente. En un segundo voltea todo su cuerpo hacia mí, su manos en mi cintura y su boca sobre la mía. Es abrumador y excitante y quiero más. Envuelvo mis manos en su cuello y subo mi cintura hasta la de el. Dios. Es todo lengua, labios y dientes, baja una de sus manos de mi cintura hasta mi pierna y luego sube su mano hasta quedar dentro de mi falda. El ascensor se detiene y ambos nos alejamos. Noah se aleja caminando tranquilamente y yo no puedo creer lo que acaba de hacer, lo que hice, lo que hicimos. Maldito. Saco mi neceser y me arreglo el pelo y vuelvo a pintarme los labios. Tengo las mejillas rojas y la boca hinchada y maldigo a Noah en todos los idiomas que conozco. Javier está esperando frente a la puerta del coche, sonrío al verlo y me acerco a darle un beso en la mejilla.
- Debería haberme casado contigo- le digo. Se pone muy muy rojo y yo me echo a reír.
- Súbete al coche Jasmine.- Noah está furioso
- A ver guapo. Tu no me cumples en la cama como esperaba y necesito un reemplazo

No me contesta y termino subiendo al coche. El suspira molesto y aunque la situación de graciosa no tiene nada me echo a reír.
- Basta Jasmine
- Lo siento pero si no me río empezaré a llorar. Tengo el peor esposo del mundo
- Íbamos a llevarnos bien si no hubieras hecho lo que hiciste.
- No hice nada
- ¡Deja de mentir! Te vi, estabas sonriendo con el mismo tipo que supuestamente te atacó.
- Cree lo que quieras
- Ni siquiera puedes decirme la verdad cuando ya te he descubierto. Eres una mentirosa
- Piensa lo que quieras. Tenemos un trato Stone, pero solo eso todo lo demás olvídalo. Prometo que esta vez seré discreta- digo sonriendo. Y es tan falsa e irreal que me da asco.
Me mira con odio durante un momento y luego voltea la cabeza hacia la ventana. Yo hago lo mismo y los ojos me pican por las lágrimas, pero no voy a llorar por el imbécil y mucho menos dejar que se me corra el maquillaje.

El trámite dura menos tiempo del esperado. Firmamos los papeles de adopción y me impresiona que Noah no está asustado al respecto. Nos hablan de muchos temas, cuidados y visitas periódicas que el gobierno nos hará de forma imprevista, para ver el estado del niño. Accedemos a todo por supuesto, lo único que quiero es tener a Tommy conmigo. Cuando los papeles fueron firmados y las palabras dichas Tommy sale de una habitación y viene corriendo hacia mí.
- Hola bebé- digo cargándolo. Le doy besos en la cabeza y lo acurruco a mí, no importa nada mas que él.

Cuando me calmo un poco veo que todos están mirando hacia nosotros. Noah pone una mano en mi espalda y nos vamos. Me  siento en el coche y solo tengo ojos para Tommy, ahora él está mirando a Noah con desprecio y yo río. Es mi familia, no hay duda.
- ¿Por qué está contigo?- pregunta en voz baja
- Porque me casé con tu tía- contesta Noah
- también es mi mamá- dice Tommy y el corazón se me agranda- Me lo dijo Romina. También eres mi mamá ¿verdad tía?
- Sí bebé
- ¿Por qué se casaron?- la palabra casaron sale graciosa en su boca y yo sonrío
- Para que pudieras estar conmigo para siempre.- el parece pensarlo un momento y luego se acerca a mí oído y susurra
- Ya estoy contigo tía, ya se puede ir- yo me echo a reír y le doy un abrazo
- Qué dijo- pregunta Noah
- Nada- digo tratando de ponerme seria

Llegamos a casa de Noah y voy a mi cuarto con Tommy. Ya han preparado todo para que el se quede aquí y yo duerma con el pesadito de Stone. El cuarto parece muy grande para un niño pequeño así que decido comprarle una nueva cama en forma de coche de carreras y alguna decoración. Traje casi todo lo que había en mi casa de él incluyendo los juguetes. Así que mientras preparo sus cosas para darle un baño él está jugando. Cuando termino de bañarlo le pongo ropa limpia y unas sandalias y bajamos las escaleras para almorzar. Me sorprendo al ver a Noah ahí sentado, pensé que había ido a trabajar.

- Pensé que fuiste a trabajar.
- Me tomé el día
Yo asiento y pongo a Tommy en una silla alta, me siento junto a él. La mujer que prepara la comida sirve carne y verduras y me avergüenzo de todavía no saber su nombre.
- ¿Qué quieres hacer después?- le pregunta Noah. Tommy me mira a mí y luego de nuevo a Noah.
- Jorge el curioso
- No entiendo
- Es un dibujo animando- le explico
- Oh, pensé que querrías ir al parque.
Tommy niega con la cabeza.
- No puedo. Debo ver Jorge el curioso y luego dormir mi siesta y luego puedo jugar.
Yo sonrío y le corto la carne en pedazos pequeños.
- Come despacio cielo
- ¿Cuándo te vas?- le pregunta Tommy a Noah
- Vivo aquí- contesta el mismo
- ¿Cuándo nos vamos mami?
- También vivimos aquí cielo
- ¿Y yo?
- Tú también vas a vivir aquí
Comienza a hablar constantemente después de eso. Nos pregunta varias cosas y para el final de la comida parece que Noah se ha vuelto de su agrado finalmente. Cuando termina de comer le pido a Noah que lo lleve a ver la televisión y los dejo solos por al menos treinta minutos, necesitan conocerse sin que esté yo presente. Me ducho y cambio de ropa por unos vaqueros y camisa y cuando bajo Noah está viendo Jorge el curioso concentrado y Tommy duerme a un lado. Me echo a reír en silencio y Noah me ve. Ambos estamos enojados y peor que antes pero por ese pequeño momento ambos reímos. Cargo a Tommy en brazos y lo llevo hasta su cama, por lo que sé dormirá las siguientes dos horas y mientras me dedico a desempacar todas mis cosas en el cuarto de Noah. Todas sus camisas y trajes cuelgan dentro del armario en perfecto orden. Por un momento tengo ganas de desordenar todo y echarme a reír como desquiciada pero ni el ni yo estamos de humor para chistes. Cuando termino me acuesto un momento en la alfombra y me quedo dormida.

Tommy me despierta y me dice que tiene hambre aunque solo hace un momento que comimos. Le doy leche y galletitas de chocolate y le pongo una película. Llamo a mi mamá y le cuento que ya tengo a Tommy conmigo y ella planea toda una fiesta en los dos minutos que dura la conversación.  Quedamos de vernos todos esa noche en su casa.

En la tarde voy un momento a la oficina del abuelo para terminar un trabajo y de paso saludarle. Dejo al abuelo y Tommy solos y voy hasta mi oficina. Es cuando veo el pequeño paquete rojo en el escritorio. No le doy mucha importancia y lo abro sin pensar. Grito.
Dentro hay una bolsa de sangre O+ y una nota.

Cometiste un error con Noah.
Cuidado.

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