Capitulo 4

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Me veo obligada a estar aquí.
Es que simplemente no puedo y no quiero creer que mi hermano ya no este a mi lado. Se fue sin despedirse, y ahora regresa, pero no es como yo quisiese.

Ahora aqui, sentada con los brazos cruzado en mi regazo. Escuchando las voces de las personas, unos diciendo "dios tan joven que era" o "tan buena persona que era" y no podia faltar "tenia una vida por delante" y un sin fin mas.

-Alexa- me llama Alex -perdon-

No se describir que tipo de mirada le dedique, ya que con solo vernos a los ojos, retrocedio y se marcho dejandome sola.

-no es justo que lo trates así- Viktor me recrimina -no solo era tu hermano, recuerda que tambien era hermano de él-

Tengo un muchas cosas que gritarle, pero tiene razón, Alex está igual o mas afectado que yo.
Me levanto y busco a Alex, despues de recorrer el lugar, lo encuentro en un rincón alejado de todo, sentado en el piso, abrazando sus rodillas y hundiendo su cabeza en ella, soyosando como cuando era niño.

-Alex, perdoname- pido.

Levanta su cabeza, miro sus presiosos ojos verdes empañados por las lagrimas, trata de contenerlas pero le es inevitable.
Me siento a su lado, recargo mi cabeza en su hombro, no se cuanto tiempo pasamos así, pero es reconfortable.

-yo... lo lamento tanto hermana-

-no es tu culpa Alex-

-si, si lo es... yo no debí permitir esa operación- soyosa.

¿que? ¿operacion? ¿cuando?

Max estaba enfermo y era la unica persona que no lo sabia, tan enfermo estaba que necesitaba una operación. Como es que fuí tan tonta como para no darme cuenta de esto. No puedo, simplemete no puedo.
Mis ojos no se empañan como los de Alex, mis lagrimas no ruedan por mi rostro, tengo el dolor en mi pecho, pero no puedo dejarlo ir.

-no es tu culpa Alex, simplemente las cosas no salieron como esperabas-

-¡NO!- grita levantandose -¡pude haber hecho mas, yo se que pude haber hecho mas!-

Me levanto y lo abrazo, yo se que  jamas dejarias a nuestro hermano morir, se que lo amabas.

-Alex, se que si tu pudieras dar la vida por tu hermano lo harias sin pensarlo dos veces, no se que le pasó a nuestro hermano, pero tambien se que no lo dejaste morir, hiciste cuando pudiste de eso estoy total y completamente segura-

Comienza a llorar desconsoladamente yo simplemente me aferro a él, lo unico que ahora me queda en la vida, acaricio su espalda, espero que eso lo tranquilice un poco...

En el entierro comenzó a llover, solo nos quedamos Alex, Viktor y yo, ademas de las personas que nos ayudaran a sepultarlo. Los "Amigos de la familia" fueron los primeros que se fueron, al igual que la "Novia" que no se de donde diablos salio pero ella lloraba como "Magdalena" con un horrible vestido negro y un sombrero enorme con red que le cubria el rostro y ni que decir de sus guantes que le llegaban hasta los codos.

-ten- Viktor me da una rosa blanca y tambien le da una a Alex.

Alex coloca su rosa en el ataud, pienso hacer lo mismo, pero algo muy dentro de mi me lo impide.
No se como decirle adios a la persona que ha estado a mi lado desde que tengo memoria, a la que me apoyó en mis ideas locas, a la que ayudó hacer travesuras, a la que defendio cada vez que estaba en problemas, no se como despedirme de él.

Al final decido quedarme ahí, parada al lado de su lápida, con la rosa entre mis dedos, intentando llorar.
Pero en vez de eso me siento culpable, culpable de no haber podido estar para él cuando mas me nesecitaba.
Max siempre estubo a mi lado, y yo no lo estube para él, soy una pesíma hermana.

Alex y Viktor se marcharon, yo me que de ahí, esperando no se que, solo se que las horas pasaron hasta que se ocultó el sol.
Tome un taxi de regreso a casa, llegue toda empapada, me fui directo a buscar a Alex, no quiero que se preocupe por mi, bastante tiene el pobre.
Escucho gritos en la oficina de Max, se que una de las voces es de Alex y me parece que la otra es de Viktor.
Toco la puerta y de inmediato se callan. Abro y miro a mi hermano cara a cara con Viktor.

-lemento la interrupción, solo quería decirte que estoy en casa- los dos voltean a verme -compermiso- digo antes de cerrar la puerta a mis espaldas.

Subo a mi cuarto y entro a una ducha caliente, me quedo ahí hasta que mi piel se arrugó como una pasa.

Despues del aseo bajo con mi hermano, esta sentado en la sala con los codos en sus rodillas sosteniendo su cabeza.

-Alex ¿quieres algo de cenar?- niega

-estoy bien gracias- suspira -quiero decirte algo- me siento a su lado.

Se acomoda mejor, pasa una mano por mis hombros y yo recargo mi cabeza en el suyo.

-las cosas cambiaran de ahora en adelante- dice apena audible.

-si, lo se- susurro.

-no que pasara, pero prometo no dejarte sola, solo nos tenemos uno al otro, por ahora, y, aunque las cosas se miren dificiles quiero que sepas que siempre esteré ahí cuando me necesites- apenas logro escucharlo.

-no necesitas darme ese discurso Alex, se que siempre podré contar contigo, pero quiero que tu sepas, que yo estaré para ti, sin importar las cosas, la distancia y las consecuencias-

-lo se-

Nos quedamos en esa posición hasta que me gana el sueño...

Una semana despues del incidente de Max, me llego una carta de un notarío diciendo que me tengo que presentar en su oficina para la lectura del testamento de Max, lo que se me hace extraño es que solo me solicitan a mi, y a Alex no.

Me alisto y salgo en el auto y llego con la dirección que hay en el sobre, llego y de inmediato me pasan a la oficina del notarío.

-buenos dias, ¿Alexandra Giesler?- asiento -tomo asiento- me señala la silla delante de mi.

Me siento pero no miro que quiera iniciar a sí que decido preguntar porque no comenzamos, pero en ese instante tocan la puerta.
Veo a Viktor Kozlov entrando y saludando al notario.
De inmediato toma lugar a un lado de mi.

-bien comencemos- saca un sobre amarillo sellado lo abre con cuidado y saca un papel y un par de sobres, lee.

"Yo Maximiliano Giesler, en pleno uso de mis facultades mentales, quiero dejar como heredera universal a mi hermana menor ALEXANDRA GIESLER.

Ella será la dueña legítima de todos y cada uno de mis bienes, siempre y cuando cumpla con las siguientes dos clausulas.

Primera:Debe estudiar negocios.

Segunda:Debe casarse con Viktor Kozlov.

Ademas dejo una carta para cada uno de ellos.

Sin mas que agregar

Maximiliano Giesler.

Del Odio Al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora