Sentados en la mesa...
- Sabeís que el motivo de la fiesta en casa de Meredith es para presentar a su hermana en sociedad? Por lo visto estaba en un internado y ahora vendrá a este Instituto.- dijo Darius a Nicolás y Aitor.
- No me importa, no voy a ir - dijo Nicolás encogiéndose de hombros.
De pronto vieron a la Senadora con Meredith y una chica de unos dieciséis años yendo con el director hacia el escenario que usaban para dar los diplomas. Clarissa cogió el micrófono y empezó a hablar.
- Hola chicos, podéis prestarme un poco de atención por favor?
Los alumnos se acercaron hasta el escenario menos Nicolás, Aitor y Darius que siguieron sentados.
- Como ya sabéis, hoy hay una fiesta en mi casa, el motivo es para dar la bienvenida a mi hija pequeña Leire que estaba en un internado pero a partir de mañana vendrá aquí - dijo abrazando a la chica que había a su lado.
En un rincón cerca del escenario estaban Aria y Jane boquiabiertas escuchando a Clarissa. Ninguna podía creer lo que estaba pasando, vieron a Clarissa abrazando a la chica que decía que era su hija y a Meredith mirando a Aria sonriendo con maldad. Cuando empezaban a reaccionar, Aria se puso las gafas de sol para que nadie se diera cuenta de como la afectaba. Jane quería ir hacia allí y desenmascarar a esas dos perras pero Aria la cogió llevándosela más lejos.
- Jane, cálmate!
- Que me calme? Es que a ti no te pone furiosa? Por dios Aria, a presentado a otra como su hija y tú sabes mejor que nadie que eso es una puñetera mentira!! - dijo cada vez más furiosa.
- Tranquilízate por favor, nadie te puede ver así, te preguntarán que te pasa y nadie lo puede saber.
- Son las peores personas que e visto en mi vida. Tu padre se tiene que estar revolviendo en su tumba con lo que hacen contigo!- dijo Jane sin ningún tacto.
Al ver a Aria bajando la cabeza y los hombros apenada la abrazó.
- Perdón Aria e sido una bruta. No dejes que te vean mal, no les des el gusto, vamos con los chicos.
Fueron a sentarse a la mesa.
- Hola chicas! - dijeron los tres.
- Hola! - dijeron ellas.
- Y esas gafas? - dijo Nicolás.
- Se las e regalado yo - dijo Jane - las que tenía eran muy viejas- al notar la mirada a través de las gafas de Aria - es cierto Aria, necesitabas unas nuevas.
Aria asintió y volvió a observar la " estampa familiar " que había en el escenario. Mientras Clarissa seguía presentando a " su hija " en la mesa se hablaba de ello aunque Aria no prestaba atención, no podía dejar de mirarlas.
- Creeís que la hermana de Meredith es igual que ella? - dijo Aitor.
- Seguramente, lo lleva en la sangre. Apuesto a que su madre es igual!- dijo Nicolás sin darse cuenta de que Aria cerraba los ojos con fuerza al escuchar eso.
- Que tus padres sean buenos o malos no garantiza que tú seas como ellos - dijo Aria girándose para mirarlo - eso depende de tí, no de la sangre que lleves Nicolás - y volvió a girarse para seguir escuchando lo que se decía en el escenario.
Lo dijo tan serena que dejó a los chicos impresionados. Nicolás cogió su mano que estaba en la banqueta dándole un pequeño apretón, ella se volvió a girar.
- Estas bien Aria?
- Sí, estoy bien - dijo ella obligándose a sonreír.
- Espero - seguía hablando Clarissa - veros a todos esta tarde en la fiesta y cuidéis a mis pequeñas que son mi mayor tesoro. - todos los alumnos las vitoreaban.
" Su mayor tesoro? Que hipócrita - pensó Aria.
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Eternos
WerewolfAria es un chica de 15 años que vive con su abuela ya que su madre y su hermana reniegan de ella porque la culpan de la muerte de su padre...