Summy

Capítulo 11 - No Digas Tonterías Pequeño

Salí del baño después de lavarme los dientes y Austin seguía aquí, por favor, ya eran las once de la noche y éste chico seguía en mi habitación.

No, no sean malpensado.

<<Yo lo malpensé>>

Eres una tonta Alessia.

Tal vez se estén preguntando en éste momento (tal vez no se lo estén preguntando) ¿Porqué Austin Walter se encontraba en tú habitación, a las once de la noche Summer? Les explicaré.

Resulta que la mamá de Austin no llegaba por él, Austin llevaba desesperado desde las nueve de la noche, intento llamar a su madre, pero nadie le contestaba, también intentó ir a su casa, pero cuando llegó nadie se encontraba en ella, así que mejor se quedo, ahora lo único que hacía era caminar desesperado por mi habitación mientras llamaba y llamaba al celular de su madre, yo trataba de tranquilizarlo, pero no lograba nada.

Solté un bostezo, ya tenía sueño, traía puesta la pijama que Matt me había regalado, la que tiene una foto mía de Matt y de Ben en la blusa y el pantalón negro, ya le había dado las buenas noches y a mis padres y a Dylan, Hayley esta en una cita con Jerry, sí, tienen una "cita" a las once de la noche.

Austin había sacado mil y un conclusiones de lo que probablemente le podría estar pasando a su madre ahora, pero en realidad no tenían sentido, vamos ¡Se le estaba olvidando la más lógica! Su madre está embarazada en estos momentos podría tener a su bebé, pero no, Austin sigue aferrado a que el maldito doctor había dicho que el nuevo integrante llegaría la próxima semana.

El teléfono de Austin comenzó a sonar, él contestó inmediatamente.

Yo bajé dejando a Austin con su llamada, cuando llegué a la cocina me encontré con Dylan, frunci el ceño, creí que mi hermano ya se encontraba dormido. Me encogí de hombros y llegué al refrigerador, tomé una lechita de chocolate y me senté en frente de mi querido hermano.

—¿Porqué Austin sigue aquí?— Preguntó él extrañado, yo me encogí de hombros. —¿Porqué te encoges tanto de hombros?— Volvió a preguntar, yo me volví a encoger de hombros, cuando me acabe la lechita me dirigí de nuevo al refrigerador, tomé un danonino grande y después tomé una cuchara del estilador, me subí mientras me comía el delicioso danonino, cuando llegué a mi habitación Austin estaba callado con una sonrisa en los labios, su celular estaba tirado en el suelo con la pantalla prendida, noté que de fondo de pantalla tenía una foto mía y de él.

—¿Qué pasó?— Pregunté sentandome al lado de él.

—Tendré un nuevo hermanito o hermanita hoy— Dijo sin quitar la sonrisa de sus labios.

¿Qué fue lo que les dije?

—¿Y vas a ir para conocerlo?— Pregunté extrañada.

—No, ni podré ir— Dijo en un suspiro. —Mi tía dijo que me quedara aquí hasta que vengan por mí.

—¡Pero no le hagas caso a tu tía la chismosa! ¡Tendrás un nuevo hermano o hermana!— Grité molesta.

Tiempo después papá llegó asustado.

—¡No tendrás un nuevo hermano o hermana!— Gritó mientras me miraba, yo frunci el ceño. —¿Qué? ¿No dijiste que querías un nuevo hermanito?

Negué lentamente, mi papá solo abrió los ojos más de lo normal y se fue.

—Vamos Summer, la podré o lo podré conocer mañana— Dijo en un suspiro, yo negué, sabía lo mucho que Austin ansiaba que el nuevo integrante llegará, y que él quería con toda el alma conocerlo el mismo día en que naciera, y ahora una tía chismosa le estaba arrebatando el sueño a Austin.