—INHALA, EXHALA, INHALA, EXHALA, RESPIRA HONDO POR FAVOR ¡JERRY POR EL AMOR DE DIOS, CALMATE! — Grité enfadada, el chinegro se encontraba en el sillón respirando agitadamente. —Serás padre y estás aquí como estúpido ¡Ve y apoya a tu esposa! — Grité para después darle una cachetada, Jerry se levantó, tomó su suéter y se dirigió a la salida, yo lo seguí, cerré la puerta y después fuimos al auto, Jerry arrancó.
—Justo lo que nos faltaba, un tráfico horrendo — Se quejó el negro cuando llevábamos varios minutos de camino, yo miré a Jerry el cual se encontraba con la mirada desviada.
—¿Nervioso? — Pregunté divertida. —Ah, pero que tal hace nueve meses, muy seguro de lo que hacías eh.
Jerry sonrió y negó divertido, para después mirarme.
—Siento que seré un mal padre.
—Creo que alguien no estaba pensando eso hace nueve meses — Dije para después fruncir el ceño, Jerry volvió a reír.
—¿Crees que sea un mal padre? — Preguntó nervioso, yo negué.
—Serás un buen padre, obviamente no mejor que el mío — Dije divertida, el chino hizo una sonrisa de lado, yo dejé de sonreír y lo miré. —Probablemente serás mejor padre que yo, no te preocupes.
Jerry regresó la vista al camino y siguió manejando, de vez en cuando yo lo miraba. El negro estaba sudando y su nerviosismo se notaba a una distancia muy lejana.
Todo el camino fue un silencio muy incómodo, al llegar al estacionamiento del hospital, Jerry se quedó callado y viendo a la nada unos cinco minutos.
—Jerry, tú primer hijo está a punto de nacer o tal vez ya este naciendo, incluso ya nació ¿Y te vas a quedar aquí? — Pregunté incrédula, Jerry no me respondió, solo abrió la puerta y salió del auto, yo hice lo mismo, ambos nos dirigimos a la entrada del lugar, no tardamos mucho en encontrar a Dylan, papá y mamá, inmediatamente nos dirigimos a ellos.
—¿Dónde está Hayley? — Preguntó Jerry con rapidez, mamá lo miró.
—Creo que aún sigue con los dolores, pero tú si puedes pasar con ella — En cuanto mamá dijo eso el negro corrió a otro lugar, yo me senté al lado de Dylan, el cual se encontraba muy nervioso.
—Serás tío — Dije golpeando levemente su hombro, el me miró y alzó las cejas.
—Creí que se sentiría mejor — Confesó, yo sonreí.
—¿Saben? Creo que será mejor irnos — Habló papá para después comenzar a caminar, Dylan y yo lo seguimos, cuando nos dimos cuenta de que mamá no seguía a papá todos nos detuvimos, la miramos, ella seguía sentada con la mirada fija en el piso, se notaba nerviosa.
—Vayan ustedes, yo me quedaré — Dijo nuestra madre con una sonrisa, papá intentó convencerla de que fuéramos a casa, que Hayley estaba bien pero mamá simplemente se negaba, cuando papá vio que definitivamente mamá no se regresaría, nos dirigimos a la camioneta para partir camino a casa. Tardamos un poco para llegar a casa, pero cuando llegamos todos se fueron directo a nuestras habitaciones, cerré mi habitación y me cambié, cuando estaba a punto de acostarme mi celular comenzó a sonar, se trataba de Austin.
—¿Bueno? — Dije, del otro lado de la llamada se escuchaban muchos ruidos.
—¡Summer! — Gritó alguien del otro lado de la línea, se trataba de Annabeth ¿Cómo supo que era yo?
—¡Hola Annabeth! ¿Cómo estás? — Pregunté animada.
Se escucharon otros ruidos, Annabeth se escuchaba de lejos soltando unos berrinches.
ESTÁS LEYENDO
Summy
Teen Fiction-Dime algo lindo.- Mencionó mi novio mientras se sentaba al lado de mí. -Te quiero con toda mi flojera, te diría que mi corazón, pero mi flojera es más grande.- Hable sonriendole. #51 en Novela Juvenil 26/07/16 #108 en Novela Juvenil 30/03/16 #330...