La expresión de miedo, las lágrimas recurrentes y su respiración casi inexistente lo estaban matando. Estaba sentada en esa silla delante de él, con su rostro aun húmedo por el agua bendita.
Se levantó y dio pasos cuidadosos fuera de la trampa y cuando Dean pensó que correría a sus brazos, la vio correr en dirección a Bobby. Debía admitir que le había dolido, pero la entendía y no la juzgaba, sino que la dejó hacer lo que quisiera.
Sammy se despertó y al darse cuenta de que todo está bien soltó un gran suspiro.
—Vale, ahora golpearme y cortarme en alguna parte, tiene que quedar creíble.
Habla Meg, y de un segundo a otro está en el suelo, Cas acababa de aparecer y le había pegado un puñetazo.
—¡Cas!
Exclama Sammy al verlo, en cambio, Meg sonríe en el suelo mientras se limpia la sangre del golpe y se levanta.
—Lo ha pedido ella.
Habla Cas con tanta inocencia que no pueden evitar reír.
—Dejadlo. Después de todo me merezco más que esto, y viniendo de mi Unicornio no me molesta.
Cas la mira con el ceño fruncido.
—¿Por qué me dices "Unicornio"?
—Vale panda de idiotas, no es hora de juegos.
Bobby llama la atención de todos mientras señala a Sarah, tenía la mirada perdida y no dejaba de temblar. De solo verla así, Dean sintió su corazón apretarse y dejó de respirar, fue solo hasta que sintió la mano de su hermano sobre su hombro que recompuso sus fuerzas.
...
—¡Al fin habéis llegado! Sam, ¿Estás bien?
Jazel corrió a socorrer a Sam y éste le sonríe y asiente para calmarla.
—Gracias Jaz, yo también estoy genial, solo me ha dado una paliza un demonio y puede que tenga alguna costilla rota, pero...estoy bien, gracias por preguntar.
Le dice Dean irónicamente, ella le saca su dedo corazón a la par que saca la lengua. Dean rodó los ojos y los llevo hasta Sarah, quien aún se mantenía abrazada a Bobby, temblando y muerta de miedo. Jazel da unos pasos hasta ella y extiende su mano en su dirección.
—Hola, soy Jazel, siento lo del golpe de la otra noche. ¿Estamos en paz?
Sarah observa su mano, pero ni siquiera se mueve, Sam camina hasta Jazel y la aleja de Sarah.
—No es el momento Jaz.
Le susurra este y ella pone cara de "lo siento"...Era un caso perdido...pero era divertida. A los minutos, Bobby se marcha no sin antes recalcarles que como algo malo le volviese a pasar a Sarah los mataría, Dean le aseguró que eso no pasaría, porque esta vez se encargaría él de cuidarla.
—Todo está controlado Jaz, ¿Por qué no te has marchado ya?
Le preguntó Dean antes de beber de la fría cerveza que sostenía en sus manos, ella lo mira por un segundo mal y responde.
—Tenéis una gorda en manos, no pienso dejaros...además ¡Sois los puñeteros Winchester! No me pienso marchar.
Le dice como si fuera obvio y sonríe ampliamente, Dean miró a su hermano, quien mantiene la mirada fija en el rostro de Jazel y sonrió maliciosamente.
—Eso y que unos polvos con Sammy no te molestarían.
Le dijo riendo.
—¡Dean!
Gritan ambos, sonrojados, sobre todo ella que luego de eso le dirige una tímida mirada a Sam. Sarah entra en el campo de visión de Dean, se sostiene de la pared para no perder el equilibrio y él se levanta de su asiento de inmediato, sin apartar la vista de ella. Cuando menos se lo espera, Sammy y Jazel ya se habían marchado, así que caminó hasta donde estaba Sarah.
—No deberías estar de pie, tienes que descansar.
Su mirada rota lo observó de mala manera y este cerró la boca, ayudándola a caminar hasta el sofá de la casa de Bobby. Se sienta y se queda con la mirada postrada en el suelo. Él solo se sentó a su lado tan congelado como ella.
—Te gritaba que me sacaras, te gritaba que me ayudaras... ¿Por qué no lo hiciste?
Alza su mirada hacia él y para su sorpresa no estaba llorando, pero su rostro estaba cargado de melancolía, de dolor y lo mataba.
—No sabía que te habían poseído...no podía escucharte.
Le aseguró, ella vuelve a agachar su mirada y suelta una risa cansada y resignada.
—En el infierno Dean...te pedí ayuda en el infierno...te grité cada vez que Crowley me....
Su voz se corta mezclándose con un sollozo que lo hace reaccionar y rodearla con sus brazos casi de inmediato. Sus delgadas y débiles manos se aferran con fuerza a su camisa y hunde su rostro en su pecho. Dean en cambio no hizo más que abrazarla con fuerza delicada y besar su cabeza pensando en lo mal que lo habría pasado.
—Lo siento Sarah...lo siento mucho.
Ella soltó otro sollozo y la vista de Dean se pierde en recuerdos dolorosos de cuando pensó que la había perdido. Recordaba aquel lugar incendiarse con ella dentro, explotar en fieras llamas amarillas y rojizas que emanaban un calor infernal.
Junto con aquella explosión su corazón se paralizó. Recordaba el sentimiento de angustia, al pensar en perderla, el sentimiento de culpa al pensar que la había dejado sola, el sentimiento ahogador del miedo, miedo a un mundo sin ella. En ese preciso momento su mundo se había ido a la mierda, y a la vez se había dado cuenta de lo mucho que amaba a esa chica de ojos azules.
Sarah se separó de él unos centímetros y lo mira con sus ojos rojos inyectados en sangre, sus mejillas mojadas por las lágrimas que él se apresuró en secar con delicadeza.
—Has que pare de doler...por favor...solo tú puedes hacer que se detenga el dolor.
Le pide y este siente que se debe a ella, no sabía cómo poder curarla, no se le ocurría nada más que besar sus labios, que sabían tan dulces como la primera vez. La besaba con tranquilidad, aunque parecía recuperarse a medida que aumentaban los movimientos. Sus manos no tardaron en atrapar sus mejillas y las suyas, se aferraron con fuerza a su pecho. Se separó solo un poco para tomar aire, aun con sus frentes unidas, y supo de inmediato que se arrepentiría de aquello. Sus ojos y los suyos permanecían cerrados.
—Gracias.
Susurró aliviada, su respiración era normal y había dejado de llorar, pero de pronto a él no le bastaba con ese simple, pero adictivo beso, así que volvió a atrapar sus labios con los suyos, esa vez, tomándola de la nuca, acentuando el beso...
—Me he dejado el móvil...Ups, lo siento.
Jazel hace su aparición y al darse cuenta de su inoportunidad se retira. Dean soltó una risa divertida. Miró a Sarah y ella se quedó observándolo sin expresión, él se dispuso a besarla, pero ella se aleja, se levanta del sofá y se marcha sin decir una sola palabra....
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Cazadores |Dean Winchester
Fanfic✘EN EDICIÓN ✘ «Sarah es mi razón de vivir, ella se convirtió en todo aquello que me hacía querer seguir luchando. Se coló en mi cabeza y mi corazón sin permiso, y aún sigue siendo la dueña y señora, la reina de mi alma. Ella es, sin duda, mi reina» ...