Luz y Tinieblas

CAPITULO 38

-Debo ir con la Pitonisa. –Insisto ante la negativa de mis padres.

-Jade es muy arriesgado, eres vulnerable, no te voy a exponer a ningún peligro. –Alega papá cruzándose de brazos.

-¡Por el amor de Dios! No me pueden mantener encerrada aquí de por vida. –Exclamo molesta.

-No está en discusión. –Recalca, miro a mi madre en busca de apoyo pero lo que veo es indecisión, sé que no cuento con ella.

-Yo la llevaré. –Una tercera vez nos hace voltear.

Yeialel ingresa acompañada de Adriel.

-De ninguna manera. –Sostiene mi padre.

-Reivel, así debe ser. –Yei le sonríe. –Prometo protegerla con mi vida si fuera el caso.

-Entonces iré con ustedes.

-No se requiere tu presencia, Adriel vendrá con nosotros.

-¿Crees que le confiaría la seguridad de nuestra hija a él?
–Expresa papá bufando.

-Heyyyy. –El aludido luce consternado. –He cometido muchos errores bien es cierto, pero eso no te da el derecho a juzgarme.

-¡Basta! –La voz de mamá nos sorprende a todos.

-Déjala ir Rei, nuestro hijo y yo te necesitamos aquí.

-Pero... Agatha...

-Lo sé amor, pero algo en mi interior me indica que debemos dejarla partir.

Papá suspira, para luego asentir con la cabeza, respiro aliviada.

No nos toma más que un pestañear estar a las afueras de la aldea donde vive el clan de las Brujas Blancas. Frida nos recibe gustosa, era de su conocimiento que llegaríamos. Nos lleva de inmediato con la Pitonisa, para mi sorpresa ya no era una niña sino una joven adolescente, posiblemente de mi edad. Yeialel y Adriel me esperan afuera.

-Hola Jade.-Me saluda.

-Hola Pitonisa. –Devuelvo el saludo haciendo una pequeña reverencia.

-Eso no es necesario. –Me sonríe.

Es extraño ver sus ojos blancos, pero después de un rato llegas a acostumbrarte.

-Imagino que sabes todo lo acontecido en estos días. –Muerdo mi labio inferior.

-Cada detalle. –Desvía su mirada hacia una fogata, se encontraba en la Templo de las Brujas.

-No sé qué hacer, y ahora mis sentimientos son un lío. Quiero saber algo, ¿Amo de verdad a Owen? A veces pienso que es fruto de una atracción que despertó al ser nosotros los destinados a encontrar las llaves. Desde el momento en que lo vi, algo en mí se removió inquieto, pero no sé cómo describirlo. Pero también está el hecho que estuve en contacto con Cely,  renaciendo aquellas sensaciones y emociones que sólo él puede aflorar en mi interior, y cuando estuvimos juntos, no quería estar con nadie más, lo que me hace cuestionar si amo a Owen o no.

-Cely fue tu primer amor. _Empieza a hablar. -Él formará parte de tu vida para siempre, y nunca lo olvidarás, no del todo, pero está muerto Jade, y el hecho que tuvieras la oportunidad de verlo de nuevo, no significa que él regrese, es un capítulo que debes cerrar, él no volverá.

Sus palabras dolieron en lo más profundo de mi ser, no sé por qué, una parte de mí, guardaba la esperanza de tenerlo a mi lado otra vez.

-En cambio Owen está vivo, él fue puesto en tu camino por una razón, siempre hay una justificación para todo. Puede que lo que digas sea cierto, que lo que sientas por él no sea amor verdadero, sino una fuerte atracción, pero ¿Y qué si no es así? –Clava su mirada en mí.