Me gustas, Ross. ➸Ross Lynch

Once

Estaba mal estar caminando de la mano de mi novio, cuando mis pensamientos sólo estaba enfocados en aquel rubio... Que le gustaba.

—¿Todo bien?

No.

—Todo bien, James.

El me sonríe para apretar mi mano y dirigirnos a Abril y Harry quienes nos esperaban con una gran sonrisa, envidiaba su sonrisa.

— Buenos tardes.—Salude.—Abs te extraño.-—Ella sonrió y me abrazo.— Hola Harry.

— Hola ¿Como han estado?— Nos sonrió.-—¿Quieren pasar a tomar algo a nuestra casa?

Yo les sonrió, se miraban realmente lindos.

-—Disculpen pero ¿Son pareja?.— Pregunto James.

— Así es.— Harry besa la comisura de los labios de Abril.

Y el leve color carmesí que caracterizaba a mi amiga se hace presente.

— Pasen adelante.-—Sonrió Abril.
Los cuatro pasamos al comedor, cena para cuatro me agrada, Abril le sonreía a Harry.
Que gran pareja hacían, James tomó mi mano.

-—Debo decir que me agrada, Los ángeles.

Demonios, ¿Tenía que ser así de lindo?

-—Te lo dije.— Bese sus labios.— Y díganme ¿Se regresarán a Francia?

— Realmente no, Haz.—Harry me respondió—Pensamos irnos cuando tú regresas, irnos juntos ¿Que te parece?

-—¿Que que me parace? Dios es perfecto, gracias, ambos se ven demasiado lindos juntos.

—Abril es hermosa.

—Por favor Harry. —Abril acaricia la mejilla de su pareja.

—Hazel no miente, ambos son una gran pareja.

—Te lo agradezco, James, y ustedes realmente de ven bien.

James toma mi mano, y yo le sonrío.

La cena transcurrió en calma, nos comentábamos cosas linda, cosas que habíamos pasado juntos, de trabajo pero ese asunto lo dejamos a un lado cuando Harry me pregunto por Ross.

Y no sabia que tan bueno era eso.

— Conocí a Ross hace unos días, me agrado.-—Tomo un sorbo de su vino.— ¿Como esta? Viene juntos ¿no?.

-—Realmente si, bueno dónde ellos estan ahora los Lynch, era mi casa pero por lo que le informaron unieron sus propiedades y lo que el pertenece a mi familia le pertenece a los Lynch y viceversa ¿Como se conocieron?.

Harry dejo su vino a un lado y me miró.

— Fue muy gracioso.-—Río.-—Yo iba saliendo del centro comercial que está a unas cuadras de acá, entonces me llamo la atención una remera entonces la tome y pase a un vestidor al momento que lo abrí, Ross se estaba por colocar un boxer rosado.-— Soltamos una carcajada.

No paraba de reír ¿boxer rosa? Dios tengo que verlo... Espera ¿Que mierda?.

Yo dejo de reír cuando siento mi celular vibrar.

Leah.

"Te necesito :c"

"Llegó en cinco minutos."

— Bueno gracias por la cena, estuvo increíble pero mi hermana me necesita.

— No hay problemas, saluda a tu familia de nuestra parte— Abril sonrió.

-—Bien, llegó en un rato.-—James se levantó de su asiento.

Mire a los chicos, sonreí y camine detrás de James que ya estaba en la salida.

-—Fuiste muy grosero.-—Me recoste en el auto.

— ¿Y que?.-—Saco un cigarro.— Te estabas riendo de los boxer de ese Imbécil, los celos me carcomen, Hazel.

-—Odio tus putos celos ¿Que crees que soy? ¿Una zorra?.— Grite.-—Tus celos aveces son lindo pero ¡Te sobrepasas, James!.

-—¿Sabes? Mejor vete, llegó en unas horas, no me esperes despierta—Sé acercó a besarme pero me separe.

Metió sus manos en sus vaqueros y emprendió rumbo a un bar tal vez ¿Me importa? ¿No? Bien.

(. . .)

No tarde tanto en llegar, deje el auto estacionando y camine hacia la puerta, estaba completamente cansada, siento que mi cabeza va a explotar en cualquier momento.

— ¡No cierres!.— Gritaron.

— ¿Que mierda les pasa?.-—Los chicos venían llenos de sudor.

— Jugamos fútbol.-—Riker intento normalizar su respiración.

— Olvidamos la llaves, luego subimos a la panitena, casi nos caemos de cara pero fue lindo.— Elli empezó a subir las escaleras.— Nos vemos mañana.

— ¿Acabas de llegar?.-—Pregunto Ross tirándose al sofá.

— No, solo que abrió la puerta desde afuera ya sabes para jugar un rato, imbécil.-—Riker rió y empezó a subir las escaleras.— ¿Está Leah arriba?.

— Me mando un mensaje diciéndome que me necesitaba no se que tendrá.-—El asintió y terminó de subir las escaleras.— ¿Desean agua chicos?

— Te amaria más de lo que ya te amo si me traes un poco.— Rocky sonrió.

Camine hacia la cocina por dos vasos de agua, camine hacia Rocky y le entregue uno el otro se lo extiendo a Ross.

-—Gracias.—Susurra.

— Gracias, ahora a dormir—Rocky dejo el vaso a un lado y camino hacia las escaleras.

— ¡Hola familia!.— Grito Camila entrando a la casa.

-—Camila ¿Me llevarías a mi habitación?—- Rocky hizo un puchero.— Me siento super mal, me duele todo.

— Está bien—Camila me miró, Reí.

Camila llevó a Rocky a su habitación y yo me quedo con Ross, nadie decía nada hasta que decidí romper el hielo.

— Buenas noches, Ross— Me levante del sofá y camine hacia las escaleras.

— Espera.— Ross camino hacia mi.— Besame...

-—¿Que?.

-—Besame, Besame quiero sentir tus labios con los míos, así como lo hacías hace dos años ¿Por que no podemos regresar el tiempo? Solo éramos tu y yo, yo tu niñero y tu la que yo cuidaba con mi vida ¿Acaso no extrañas eso?— Baje la mirada.— Mirame—Tomó mi barbilla y me hizo verlo.-—Besame...

-—¿Interrumpo?

No vendría mal un tragame tierra.