DAKOTA

Mis explicaciones

-Mira quién ha decidido volver... -dijo
Tom, uno de los del fondo

-¡Ja,Ja! Quién se va sin ser echado vuelve sin ser llamado - dijo Mike, el otro que estaba en el fondo

-De tu envidia nace mi fama -dije con una sonrisa de superioridad

-Tengo la sensación de que nos vamos a llevar bien -dijeron a la vez y se rieron, algo que hice yo también.

No veía a John por ninguna parte y les pregunté. Me dijeron que estaba en la segunda habitación a mano derecha. Toqué a la puerta y me respondió un "pasaaa" bastante grotesco. Abrí el pomo y me encontré a John con un ordenador en su escritorio.

-Hola... Vengo a hablar, ¿puedo?

-Supe que volverías. Te llamaría lista, pero no quiero que me vuelva pasar lo mismo que la última vez. - no pude evitar reírme.

-Ya... Lo siento -no sonó muy convincente, pero bueno, tampoco es que me arrepintiese mucho- me gustaría empezar a hablar yo, ¿puedo?

-Pues claro, adelante.

-Soy de Los Ángeles. Una adolescente ideal, sacaba buenas notas, hacía deporte, tocaba el violín... En fin, la hija perfecta.
Todo estaba genial hasta que por un indestacable motivo de los muchos que se llevaban acumulando durante años decidí romper mi rutina. Irme. Nada para mí volverá a ser igual nunca más. Llevo un día fuera. Salí de mi casa ayer a la mañana. Cogí mi coche con maletas y me fui a San Diego visité algunos sitios muy chulos y ayer a la noche vine aquí. Hice turismo y pasé la noche en el hotel donde me secuestrasteis. -suena más raro dicho en persona - y por la mañana hice más turismo. A la tarde decidí ir a dar una vuelta para luego ir al hotel a por el coche e irme a mi próximo destino, cosa que me habéis impedido. Tan sólo buscaba espacio y libertad, ambas cosas de las que me estáis privando.

-Bien -continué- ahora ya sabes lo que estoy pasando. ¿En serio crees que lo mejor que puedes hacer es esto?

-En verdad, ya me sabía parte de esa historia. -dijo tan tranquilo.