Llegamos al aeropuerto media hora antes y facturamos mis maletas. Estuvimos esperando en la zona de embarque 20 minutos. Nuestro avión había sido puntual, entramos a las 9:35. Yo estaba sentada en la ventana. Marc estaba entre un señor que se pasó todo el trayecto durmiendo y yo.
Hora y media más tarde ya habíamos aterrizado en Phoenix. Recogí mis maletas de la cinta y mi Mini ya estaba en el parking. Marc ya estaba sentado en el asiento de copiloto. Hacía bastante frío, así que abrí la maleta y cogí mi sudadera negra de Nike. Al levantarla algo negro se cayó del bolsillo. Lo recogí rápidamente del suelo y la guardé en la maleta. Era la pistola. ¿Cómo había sido capaz de colarla en un aeropuerto? Prefiero no saberlo, la verdad.
A las 11:30 ya estábamos en la casa donde había pasado la noche del secuestro. Subimos en ascensor. Los dos chicos seguían en la puerta, me pregunto si no se cansarán de su trabajo, debe de ser muy aburrido. Nos abrieron la puerta. Ashley estaba llorando en el sofá del salón. Tom y Mike estaban de pie hablando.
- Hemos estado hablando con los jefes de otras partes del mundo y nos dijeron que era necesario su intervención. Ellos ayudarían a resolver quién lo mató. Nos reuniríamos en las oficinas mañana. - dijo Tom.
- Dakota, ¿te importaría dejarnos un minuto a solas? - me pidió Marc.
Mike me indicó que dejase mis maletas en la misma habitación de la última vez. Sería en la que me quedaría durante el tiempo que estuviese. Eran las 12 no tenía muy claro lo que hacer, así que me puse a jugar con el móvil y esperé a que fuese hora de ir a comer.
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DAKOTA
AventurăUna adolescente ideal, saca buenas notas, hace deporte, toca el violín. La hija perfecta. Todo estaba genial hasta que por un indestacable motivo de los muchos que se llevaban acumulando durante años decide romper su rutina. Irse. Nada volverá a ser...