Capítulo 9

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"Beatles for Sale", el disco en el cual estábamos trabajando, salió al mercado y pronto comenzamos a grabar el siguiente.

George estaba distraído, lo que provocaba que nos atrasáramos a la hora de ensayar. No sé qué estaría pensando, pero debía ser importante.

—Tomen un descanso.—George Martin suspiró.

Todos dejamos nuestros instrumentos y nos acercamos a George.

—¿Qué tienes, Harrison?

—Nada ¿Por qué?

—No puedes coordinar los acordes ni los coros, estás con la cabeza en las nubes.

—Lo siento, es que...

—Chicos—Brian nos interrumpió. Había un hombre de cabello castaño en un traje de policía junto a él.—Necesito hablar con George en privado.

Ringo, John y yo nos miramos y decidimos salir al jardín de los estudios.

—¿Qué creen que haga ese poli aquí?

—No lo sé...

—¿Creen que George haya hecho algo malo?

—No, no lo imagino. El chico es un santo.

—Paul también lo era, hasta que te conoció.

—¡Oye!

—Admítelo, Paulie. Es verdad.—John sonrió—Cuando te conocí eras un niño que no rompía un plato, y ahora mírate. Eres todo un travieso.

No pude evitar sonrojarme. Al instante sentí la carcajada de Starr.

—¡No lo malpienses!

—Demasiado tarde. El McLennon es real, yo lo sé.

—¿Mc-qué?

—McLennon. Junté sus apellidos y salió eso.

—Mentiroso, lo sacaste de la carta que envié firmando con ese nombre—John rió.

—¿Tú inventaste el McLennon?—Sonreí inconscientemente. Me hacía sentir bien lo que John había hecho.

—Pues...Sep. Digamos que sí.

George nos indicó con una seña que entráramos y así lo hicimos.

—¿Qué hiciste, Harold? ¿Pisar el césped?—John rió.

—¿Arrojar basura?—Bromeé yo también, causando más risas. George permanecía impasible, con una sonrisa de oreja a oreja en sus labios.

—Chicos...Voy a ser padre.

—¿En serio? ¡Felicidades!

Los tres lo abrazamos. Por alguna razón sentí un gran espacio entre su piel y la tela de su camisa.

—Les daré más detalles en unos días.

—Chicos, tienen dos conciertos la próxima semana—Brian interrumpió el tierno momento.

—No arruines esto, Eppy.

—¡Pero tienen que ensayar!

—Después—volteé a ver a George—¿Cómo está Pattie?

—Muy bien, está descansando en casa.

—Eso está bien, tiene que reposar mucho a partir de ahora. Cuando llegue el niño no podrá hacerlo.

—En realidad es niña.

—Vaya ¿ya saben el sexo? Qué rápido...

—Sí...Oye, Rings ¿cómo está Maureen?

—Bien...Hace dos días se hizo el primer ultrasonido.

—¿Ella también está embarazada?—lo miré sorprendido—¿Cuántos meses tiene?

—Tres.

—¿Por qué no nos enteramos de nada?—Reprochó Lennon.

—No quiero hablar de eso...

—¿Por qué?

—Dijo que no quiere hablar de eso ¿acaso no oyeron?—Intervino George.

—Vale, lo siento...

—Sigamos ensayando ¿quieren?

—Bien...

Cuando la semana pasó y el día de nuestro concierto llegó, todo fue una rutina. Viajar en auto, ensayar, volver a viajar, llegar a donde sería el concierto, aceptar algunas fotografías y pasar horas frente al espejo arreglándome para verme bien. Si no me veía bien, todo saldría mal. Me equivocaría con los acordes, desafinaría, no compondría cosas nunca más, John me odiaría, me echaría de la banda, Jane me dejaría y moriría solo, feo y muerto.

A veces suelo exagerar.

En fin, el concierto empezó de maravilla. Todos gritaban y lloraban, era increíble. Aunque el ruido era tan fuerte que apenas nos escuchábamos a nosotros mismos.

—¡La siguiente canción será cantada por nuestro adorable baterista! ¡Un fuerte aplauso para Ringo Starr!

Más gritos sonaron mientras Ringo comenzaba a cantar "Boys" y John, George y yo lo seguimos.


Well, I talk about boys
Don't ya know I mean boys
Well, I talk about boys, now
Aaahhh, boys
Well, I talk about boys, now
What a bundle of joy! (alright, George!)

Ese era el momento en el cual George debía tocar su solo, pero pasaron unos segundos y no lo hacía. John y yo miramos al lugar donde estaba nuestro gitarrista.

Se había desmayado.

With A Little Help From My FriendsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora