Our Little Secret.

Capítulo 21.

A mitad del camino llamamos al cerrajero para que le diese tiempo a llegar a casa a la vez que nosotros. Ir por la calle abrazada a él era la mejor sensación del mundo, me da igual que nos digan lo que sea, yo a este chico lo amo y nadie va a cambiar eso. Cuando llegamos al bloque estuvimos unos diez minutos esperando, hasta que llegó el cerrajero. Subimos y le llevé hasta mi piso, y una vez hecho el trabajo dijo:

- Serán cincuenta libras... Por cierto... ¿tú no serás de One Direction? - dijo volviéndose a Niall.

- Sí, Niall Horan de One Direction.

- Mi hija es una gran fan, todos los días nos habla de vosotros, y a veces hasta mi mujer le pregunta cosas... Creo que estáis invadiendo mi casa con tanto póster Ja, ja, ja.

- Ja, ja, ja que tierna.

- Sí mira, aquí esta. - dijo sacando su cartera y mostrándonos una foto de una niña de unos catorce años con el pelo rubio y los ojos azules. Era preciosa. - Le encantaría que le firmases un autógrafo, si no es mucho pedir.

- Oh, claro que no es mucho pedir. - dijo buscando algún papel en sus bolsillos.

Yo me metí dentro de mi piso y traje un post-it blanco de los que tengo pegados en la nevera para la lista de la compra y un boli.

- Toma. - y se lo extendí a Niall con una sonrisa.

Mientras él escribía y después de preguntarle el nombre la hija al padre, este se giró hacia mí y dijo:

- Entonces, esta es vuestra casa ¿no?

- No, es la mía, él vive en... La suya. - comprendí lo estúpida que había sido esa frase justo cuando terminé de decirla.

- Ah... No es que me quiera meter en vuestras vidas pero... ¿Sois pareja no? - yo asentí. Vaya, el  hombre con pinta de abuelete simpático es un entrometido...

- Ah, vale, ¿y...

- En fin, aquí tiene su autógrafo. - dijo Niall, evidentemente con la intención de que dejara de hacer preguntas.

Y tras un silencio incómodo, me etreví a decir:

- Bueno, voy dentro a por mi monedero. - fui hasta mi habitación y rebusqué por los cajones. Cuando por fin lo encontré oí como se cerraba la puerta principal. Salí y vi a Niall dirigiéndose hacia mí.

- ¿Y el señor?

- Se ha ido, le he pagado yo.

- ¿Y por qué haces eso? Sabes lo mal que me sienta que la gente pague mis cosas.

- Lucy, no pasa nada, la cuestión era no hacer esperar al hombre, da igual quién lo haya pagado.

- Pero... Puff no quiero que por el hecho de estar saliendo juntos me tengas que pagar mis cosas, o por el hecho de que seas famoso.

- Oye, no pasa nada, no llegamos a estar saliendo juntos y también te lo hubiera pagado, eres mi mejor amiga.

Suspiré y dejé mi monedero en la mesita del salón.

- Bueno, cambiemos de tema, ¿qué quieres hacer hoy?

- Hmm... No sé...

- ¡Podríamos ir de compras! - dije como si me pareciera la mejor idea del mundo, de hecho, lo era.

- Oh, vaya sabía que este día llegaría.

- Porfa, porfa, porfaaaa. - dije agarrándole del brazo y dando saltitos cual niña pequeña.

- Bueeeno, si te pones así de mona, de acuerdo, iré de compras contigo.

- Eres el mejor. - dije dándole un beso en la mejilla