Dos idiotas a bordo {Emblem 3, One Direction, Cody Simpson}

Niall y Rachel

*NARRA RACHEL*

Después de un año, mi vida sigue siendo genial. Recuerdo con gran detalle, como si hubiera sido ayer, como conocí a Niall. Al chico que ahora mismo me estaba cogiendo de la mano. Mi marido (aún no me había acostumbrado a esa palabra). 

Pero parece que nada ha cambiado. 

Me quedé boquiabierta, como me pasaba al principio de todo, cuando Niall me dijo que tenía una gran sorpresa para nuestro primer aniversario de bodas: un gran crucero por la costa del Mediterráneo. Y yo estaba encantada con la idea. Poco a poco el tiempo ha ido pasando, y ahora ya estamos en el taxi que nos conduce al preciado puerto de Barcelona. Cuando salimos de éste, una suave brisa característica de la costa nos azota la cara. Niall ríe al ver que mi pelo se me viene a la cara ya que el viento viene de la dirección contraria. Después, me aparta suavemente los gruesos mechones de mi nariz, ojos y boca; todavía sonríe. Uff… aquella sonrisa era mágica. Ni siquiera podía enfadarme con él por mofarse así de mí.

Seguimos caminando, Niall lleva su maleta y yo la mía. Somos simples en aquellos temas. Lo necesario para dentro, lo demás para casa. 

Recuerdo hablar con los chicos de Emblem 3 sobre lo de ir al transatlántico, y se apuntaron al segundo; ¡estaba muy contenta! Podríamos retomar antiguos momentos. Habíamos estado todos tan ocupados que no podíamos vernos muy a menudo, pero aquella oportunidad era única para volver a ver a mis hermanos.

La vida de ellos también había cambiado, igual que la mía. The X Factor nos sacó un disco a cada uno. El suyo se titula “Nothing To Lose”, y me encanta, es muy de mi estilo. El mío se llama “Rachel”. Acordé con Demi de que en nuestros álbumes pondríamos nuestros nombres. Mi mejor amiga no podía ir al crucero porque estaba en plena promoción de su nuevo álbum “D E M I”. 

Y por último, One Direction. ¡Qué banda, por dios! Estaban teniendo tanto éxito, que necesitaban un respiro. Un largo respiro, como aquel; así que cuando les dimos la idea accedieron a venir al día siguiente, para consultar con la agenda y respectivas novias. 

Ya estamos en la pasarela para subir al barco. Nos ha costado un poco encontrar el nuestro, hay muchos y muy diferentes, además de haber también mucha gente. Miro por todos los lados, para poder encontrar a mis amigos; pero un golpecito en mi espalda me rompe los pensamientos. Me giro rápidamente, y veo a cuatro chicos guapísimos mirándonos. Al instante, nos abrazan y nos saludan con grande exaltación; hacía tiempo que no los veía.

-¿¡Cómo va todo?! – pregunta entre saludos Liam.

-¡¡Genial!! Tenía muchas ganas de esto – asiente Niall. Puedo ver ahora, que detrás de los chicos hay dos jóvenes preciosas, son Perrie y Eleanor, que también vienen en el viaje. Ya las conozco; de la boda y de las pocas reuniones que hemos tenido todos juntos.

Después de hablar un rato, proseguimos la marcha hacia la entrada del inmenso barco. Todos hablamos mientras, y entonces vemos a muchos hombres y mujeres en el hall del transatlántico, sonriéndonos amablemente. Suponemos que son trabajadores del barco. Tengo buenas sensaciones de todo aquel sitio.

Entramos, y nos dirigimos a la habitación mía y de Niall, la 303. Nos cruzamos con mucha gente mientras vamos allí. 

Una vez dentro, tiramos las maletas en el suelo y, a mi sorpresa Niall me empuja a la cama. Wow. Hacía una semana que no nos veíamos, y yo también le echaba de menos.