Hoy me desperté muy temprano, y también muy emocionada, pues ya llegó el día...
Si señores, ¡mi cumpleaños!
Mamá me ha traído el desayuno a la cama y las chicas han llegado temprano a saludarme.
Hoy hay muchas cosas que debo hacer, así que ellas se han ofrecido a ayudarme.
Luego de tomar mi desayuno me fui directo a la ducha, y debía apurarme ya que las chicas estaban abajo.
Me duché lo mas rápido que pude, y me puse unos jeans claros, con una camiseta suelta color plomo, y mis vans negras.
Como hoy cumplo 18 años, mi fiesta será en grande.
La primera cosa que debo hacer es ir a la casa de Dereck... Debo ir a dejarle la invitación. Espero que me atienda su mamá y no él, ya que me quedaría sin palabras y haría el ridículo.
Una vez ya lista bajé y salimos con las chicas, algo nuevo que debo contar, saqué mi licencia de conducir, así que mamá me prestó su auto.
Una vez arriba del auto mi primer destino era la casa de Dereck, así que sin dudar me dirigí hacía allá.
Toqué el timbre y tardaron en salir... Estaba nerviosa... Posiblemente podría ser...
-Ho-hola Dereck.-Saludé casi muriendo de la vergüenza.
-Ali, yo, que... Lo siento.-Dijo mirándose el dorso, pues estaba sin camiseta, y es entendible, hace una calor horrible.
No me había dado cuenta antes de que tiene un escultural cuerpo...
-Tu, he, no te preocupes, solo venía a dejarte esto.-Le estire el sobre con la invitación.
-¿Que es?-Dijo sin entender.
-Tu mismo averigua, espero puedas ir, nos vemos.-Me fui de ahí.
Ni siquiera se había acordado de mi cumpleaños ni me había dado un abrazo, o será que de los nervios se olvidó...
Cuando llegue al auto que había dejado estacionado una cuadra más allá, las chicas me miraron asustadas.
-Dios Ali, que pálida estás.-Dijo Rosy.
-Si, es que, él me atendió.-Dije sonrojándome.
-Bueno, no perdamos más el tiempo, hay que ir a comprar los vestidos.-Dijo Mary cambiando el tema ya que se dio cuenta de que estaba incómoda.
-Tienes razón.-Dijo Rosy, y nos fuimos de ahí hacia el centro...
*Habla Dereck*
Después de esta inesperada visita de Ali, y lo atontado que me dejó-tanto que me quede pegado mirando como se iba de mi casa-entré a la casa y me puse a leer lo que me había dado, decía lo siguiente:
"Hola, si recibes esto, eres muy importante para mí, y por eso quería invitarte a pasar este día tan especial conmigo. Te invito a mi fiesta de cumpleaños, te espero en mi casa, a las ocho de la noche, ¡no faltes!
Atte: Alisson Mcall"
¡Maldita cabeza la que tienes Dereck!
