Reencuentro

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Hoy lo volví a ver, se veía igual de guapo que hace seis años atrás, cuando lo conocí por primera vez. Igual que aquella vez mi corazón dio un vuelco sabiendo que aquella persona que iba pasando frente a mí era el dueño de mi corazón. Mi corazón latía con tanta fuerza que tenía miedo que pudiera escucharlo, se sentía como una docena de caballos corriendo a todo galope, podía sentir la electricidad en el ambiente, mi piel se erizaba con su sola presencia, sentí unas enormes ganas de llorar. Lo había extrañado, pero no sabía cuánto lo había extrañado hasta que lo tuve frente a mí. Por un momento fueron fuegos artificiales, felicidad y emoción. Al fin lo había vuelto a ver.

A su lado pude captar a una rubia cabellera femenina meciéndose en el aire, entonces mi corazón volvió a romperse en miles de pedazos como aquel 14 de Febrero de hace dos años. Ella estaba con él. Fue un mar completo de emociones las que sentí en aquella fracción de segundos. Le amé y le odie. Quería reír y llorar. Quería vivir y quería morir.

Alce mi cámara enfocándola en aquella feliz pareja y pulse el botón capturando la imagine en el momento exacto en que ellos se volteaban a ver con amor. Los odiaba, odiaba verlos juntos y más odiaba tener que ser yo la que esté haciendo este reportaje.

Todos los reporteros tuvimos que tomar asiento, con la mirada baja camine entre el mar de reporteros, fotógrafos y camarógrafos, para mi desgracia mi lugar era de los primeros debido a ser de una revista demasiado importante. "Vamos, Blair, tú puedes hacer esto, no sientes nada por él, se valiente, míralo como si fuera una estrella más del montón, otro actorcillo cualquiera, como los que estas acostumbrada a entrevistar." Me di valor a mí misma y alcé la mirada. Tom Hiddleston miraba la multitud de reporteros que se había juntado, la mirada se paseó entre las filas hasta que sus ojos azules y magnéticos se posaron sobre los míos, intente hacerme la fuerte. Él además de tener una hermosa mirada era demasiado pesada, era como si pudiera leerme el alma, como si penetrara a través de aquellos muros que había puesto en mi corazón. De nuevo podía sentir aquella conexión a través de nuestras miradas, como si nuestras almas se estuvieran uniendo a un nivel que nadie podía entender o describir. Entonces en aquel momento me di cuenta de que aún lo amaba.

Aquella conexión entre nuestras mirada se interrumpió debido a que la conferencia de prensa iba a iniciar. Varios comenzaron a preguntar mientras Tom y Taylor contestaban a las preguntas, yo rápidamente anotaba todo lo que escuchaba que preguntaban y ellos contestaban. Por momentos Tom y yo nos volteábamos a ver de reojo. Los recuerdos venían a raudales a mi mente, tanto buenos como malos. Luchaba por conservar mi calma pero simplemente no podía hacerlo más, las lágrimas comenzaron a brotar de poco a poco mojando mis mejillas, mojando mi libreta de apuntes. Alce la mirada con vergüenza y entonces Tom me miró con ¿dolor? ¿Él se sentía mal por verme llorar? Soltó la mano de su acompañante y lo vi reprimir sus ganas de venir a abrazarme. "Perdóname" su mirada era tan sincera, esos ojos nunca pudieron engañarme, entonces sentí un calor en mi corazón algo que me hacía tranquilizarme.

Era demasiado lo que estaba sintiendo, simplemente me salí antes de que terminara la conferencia y salí corriendo. Al llegar afuera comencé a respirar intentando inhalar todo el aire fresco que salía. Me abracé a mí misma mientras intentaba controlarme. Sentí una mano en mi hombro y di un sobre salto, voltee a ver quién era y mi corazón se detuvo. Aquellos ojos azules me estaban mirando con profundo dolor, sin más me rodeo con sus brazos, correspondí aquel abrazo recargando mi cabeza en su pecho.

—Lo siento—murmuró mientras dejaba un beso en mi cabeza—sé que te lastime, no quise hacerlo, hoy sé que me equivoque, cometí un error que no puedo reparar. Pero te ruego, te suplico me perdones—tomo mi rostro entre sus manos, nos vimos a los ojos y ambos estábamos llorando—siempre te amaré, siempre.

—Thomas—sentí mi labio inferior temblar.

—Perdóname—suplico y asentí con la cabeza.

—Te perdono, cariño.

Besómi frente y sentí que me quitaba un peso de encima. 


Nota de la autora: Este one shot es muy personal para mi, lo ocurrido obviamente no fue lo que me paso, pero los sentimientos y fechas esas son demasiado reales y personales. Simplemente escribí esto en un momento en el que necesitaba sacar lo que sentía. Espero que les haya gustado yo sinceramente pude desahogarme un poco.  

Tom Hiddleston: One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora