Parte 3 (Final): Te he engañado.
¿Alguna vez han tenido un secreto que los consume? ¿Qué los ahoga? Los secretos… tarde o temprano salen a la luz… siempre. Ya sea porque son descubiertos por accidente o por que en algún momento decides confesarlo.
Había quedado con Tom que él y yo iríamos a hablar con mi esposo y le contaríamos lo que había entre Tom y yo para pedirle que me diera el divorcio. ¿Parece algo fácil no? Pues no lo es… Durante semanas estuve buscando como decirle cuando decirle pero no encontraba las palabras ni el momento indicado, me daba pena llegarle de golpe con esa noticia y muchas otras veces el estaba tan ocupado en su trabajo como para si quiera escucharme. Tom me tranquilizaba y me decía que el momento se daría. No pensé que ese momento se fuera a dar de esa manera.
Armando salió de viaje de negocios así que invite a Tom a pasar la semana en mi casa, era tan hermoso tener a Tom al fin en mi casa verlo pasearse en ella y estar ahí juntos, jamás había sentido mi casa como un verdadero hogar hasta que Tom piso el lugar.
Era viernes, Armando llegaba hasta mañana en la tarde así que era mi última noche con Tom en casa. Estábamos acostados, desnudos, solo una sábana blanca cubría nuestros cuerpos. Acariciaba el pecho de Tom mientras veía hacia la ventana, él me acariciaba la espalda con la yema de sus dedos mientras su mirada estaba en algún punto muerto del techo.
—Tengo que enfrentarlo—murmure sin dejar de ver la ventana.
— No te presiones querida—me dijo Tom mientras me comenzó a acariciar el cabello.
—Es que no Tom…—levante la mirada y él también me miro— ya me canse de estarme escondiendo ¿Quieres estar conmigo?
—Por supuesto que quiero estar contigo—me acaricio la mejilla y me miro con ternura.
—Entonces es momento de enfrentarlo, mañana mismo tengo que hablar con él.
—Cásate conmigo—abrí los ojos en gran manera ante la petición de Tom.
— ¿Qué?
—Si—una enorme sonrisa apareció en su rostro—cuando te divorcies de él y todo termine ¿te casarías conmigo?
— ¿Estas bromeando? —pregunte riendo.
—Jamás he dicho algo tan serio como ahora.
— Oh Tom—me senté en la cama y la sabana cayo de nuestros cuerpos dejándonos al descubierto— ¡Por supuesto que si me casaría contigo! —me lance sobre él y lo bese con amor y pasión. El rió en mis labios pero correspondió mi beso apasionadamente. Dio vuelta y me puso debajo de él mientras continuábamos devorándonos los labios y nos acariciábamos.
— ¡¿Qué carajos sucede aquí?!
Rápidamente Tom y yo nos separamos, Tom cayo de la cama y yo cubrí mi desnudez con la sabana. Mierda.
Armando estaba parado en la puerta de nuestra habitación y me había visto con Tom. Desnuda.
— ¡¿Qué mierdas está pasando Alice?! ¡¿Quién es este hombre y que hacías con él en la cama?!
—Ar…Armando tranquilízate—dije temblorosa y me levante de la cama.
— ¡¿Cómo quieres que me calme cuando me entero que mi esposa es una puta?!
— ¡A ella no le hablas así! —Tom se interpuso entre Armando y yo. ¿En qué momento Tom se puso el pantalón? Eso no importa ahora.
— ¡Yo le hablo como me da la gana! —grito empujando a Tom por el pecho.
— ¡A ella la respetas porque es una dama!
— ¿Qué dama va a ser esa? ¡Es una prostituta! —como si fuera en cámara lenta vi el puño de Tom volteando hacia la quijada de Armando haciendo que este cayera al suelo. Con coraje Armando se levanto y comenzó a golpear a Tom y así comenzaron a pelear ambos a golpes.
— ¡Basta! ¡Basta! —Gritaba e intentaba separarlos— ¡Ya me hartaste Armando! —Ambos hombres se detuvieron y me voltearon a ver sorprendida— Ya no voy a esconderme de ti para ocultar mis sentimientos, ya no quiero llorar a escondidas callando el amor que siento por Tom, es momento de que te enteres lo que viene pasando desde hace mucho tiempo. Ya no voy a fingir que te amo, no sabes las veces que llore sintiéndome débil y sola a tu lado todo este tiempo ha sido un tormento—me mordí el labio mientras esperaba su reacción.
— ¿Qué quieres decir? —pregunto Armando con el ceño fruncido.
—Te he engañado tantas veces y no con varios hombres solo con uno y ese es Tom. He buscado sus besos ardientes en la intimidad, te he mentido tantas veces que ya no puedo seguir ocultando la verdad. Vivo un amor prohibido que roba mis latidos pero callarlo ya no puedo por que contigo estoy en cero y el me pone a mil, soy insensible a ti—Armando me mirada fijamente a los ojos y yo solo lo miraba fríamente.
— ¿Cómo paso? —pregunto desconcertado.
—Simplemente ya no pusiste fuego a la hoguera, dejaste de atenderme a mí por preocuparte por tu trabajo.
— ¡Lo hice por nosotros!
— ¡No! ¡Lo hiciste por ti! Yo jamás quise el dinero ni esta posición, yo solo te quería a ti pero ya no mas…
Armando se volteo dándonos la espalda a mí y a Tom. Tom se acerco a mí y tomo mi mano y dio un ligero apretón a mi mano.
— Larganse…—murmuro Armando.
— ¿Qué? —pregunte.
— ¡Que se vayan no los quiero ver por qué los voy a matar a los dos así que largo, largo!
Tom rápidamente tomo mis cosas, salimos del cuarto. Ya fuera del cuarto me vestí y salí de la casa para nunca jamás volver.
Al fin nuestro secreto había salido a la luz y al fin iba a poder ser feliz con Tom.
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Tom Hiddleston: One Shots
Fanfic¿Eres fan de Tom Hiddleston? Entonces esto es para ti. Aquí encontraras varias historias pequeñas dedicadas a Tom Hiddleston. Son historias pequeñas que no tienen continuación alguna, mejor conocidos como "One Shots" Espero estas historias sean de...