"Derek"

3.2K 403 47
                                    

Mi telefono esta estupido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Mi telefono esta estupido...no saben cuanto costo subir esto :,v
Bien bien con esto damos inicio a esta pequeña maraton (solo seran cinco capitulos, no alcance a hacer mas)
Y e de justificarme porque tarde en subirlo y es que sali todo el fin de semana por el 15 de septiembre (ajua!!) Y despues me enferme y bueno...v:

19

Una parte de él le decía que debía dejar eso, apartar todo ese embrollo y volver a su vida "normal" deseaba trabajar tranquilamente aun cuando uno que otro cliente se pusiera a molestarle, quería visitar a Akane, aquella niña que a la fuerza se había ganado una pequeña parte de su corazón, su inicio no pudo haber sido el mejor pero no pudo negar que le había tomado demasiado cariño a esa dulce niña.

Hace tiempo que no salía con su hermano, había tenido varios días libres que el había malgastado con escusas solo para poder seguir buscando a Izaya y se sentía fatal al ver la cara de decepción por parte de Kazuka (Solo se mostraba expresivo con él)

¿No se suponía que sin esa persona que se empeñaba en hacerle la vida un asco todo seria de color rosa?

La otra parte de su mente era mas escandalosa, solo pensaba en Izaya, no quería dejarlo, esa parte estaba dispuesta a ponerse de pie del estúpido sofá en el que estaba y salir al centro de la ciudad, estaba dispuesta a buscar calle por calle, casa por casa hasta dar con la pulga, no se atrevería a descansar.

La verdad es que la mente de Shizuo estaba hecha un lío.

Le molestaba pensar en Izaya fuera del odio, mas de diez años había vivido solo con ese sentimiento y creyó que estaba bien que permaneciera así, ahora en menos de dos meses había aprendido muchas cosas de Izaya que el ni en sus sueños hubiera imaginado, si, el informante no era muy "estable" pero jamás creyó que su personalidad se fuera a deber por...eso.

Sus padres lo odiaban tanto que uno estuvo a punto de matarlo.

Estaba siempre solo en casa y había tenido que aprender a hacer cosas que un niño pequeño no debería, recordó la entrada del diario donde Izaya escribió sobre el accidente con aceite hirviendo.

Sus padres lo abandonaron junto a sus hermanas y el tuvo que integrarse al mundo bajo para así poder alimentarse los tres.

Cuando juntaba todo eso a Shizuo se le oprimía el pecho sentía ganas de llorar, imaginaba a una versión de Izaya mas pequeña en su cuarto, solo, lamentándose mientras sus padres discutían en la habitación continua.

No era precisamente lastima lo que sentía hacia el azabache, mas bien, era como si pudiera comprenderlo mas, le dolía y hacia feliz el conocer mas sobre su "enemigo".

"19"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora