El Alpha Enfermo

La dos

Mi loba gruñía urgiendo transformarse y sacar a mordiscos la mano que la chica tenía sobre el hombro de Cohen.

¿Pero qué rogues te pasa?

Mate. Aulló ella nada contenta con la loba cerca de su compañero.

Cohen y la chica rieron por lo que yo instintivamente di un paso hacia ellos.

-Hey, cara de bebé- llamé su atención haciendo que la chica girara en mi dirección mientras que Cohen murmuraba algo en un volumen demasiado bajo para comprender- ¿Nadie te enseñó que es de mala educación huir en plena conversación?

Fue en ese momento que Cohen me dio la cara, su frío semblante justo en su sitio.

-No huí- dijo en un tono de advertencia- Y la conversación estaba acabada.

-¿Quién es ella Coco?

¿Coco? No contuve la estruendosa risa que suplicaba por salir por mis cuerdas vocales. La chica se sorprendió y procedió a estudiarme de arriba a abajo con detenimiento cosa que yo imité con ella, luego claro de secarme las lágrimas.

Era de mi estatura y contaba con unas delgadas piernas que se hubiesen encontrado por completo al desnudo de no ser por un fino pañuelo amarrado en su cintura.

Es una falda.

¡Licántropos! Si esta era una prenda tradicional en su manada entonces estaba segura que me tocaría cortar la garganta de cuantos valientes intentaran ponerme a la moda.

Volviendo con mi estudio, la chica tenía una blusa que mostraba un sugerente busto, su piel era de un lindo bronceado que combinaba con el castaño color de su corto cabello, sus ojos eran verdes como pasto recién regado y sus delgados labios brillaban incluso haciéndole una impaciente mueca hacia Coco.

Por mi parte volví la mirada a cara de bebé solo para comprender por su dura expresión, dirigida solo para mí, que él estaba todo menos dispuesto en llevar a cabo mi presentación.

-Riley- dije mientras le rodaba los ojos al arisco lobo- Mi nombre es Riley- completé esta vez viendo a la chica que tenía enfrente.

Ella me inspeccionó nuevamente con cautela.

-Camille- dijo después de unos segundos- pertenezco a la manada Graf ¿Cómo es que jamás te había visto?

-Capaz porque no frecuentas bosque adentro- vi como sus ojos se agrandaron con horror y casi me río debido a la incrédula expresión-vivo allí, pero cara de bebé aquí presente junto con su ejercito...

-La trajimos al castillo- completó él lanzándome una mirada que ordenaba quedarme callada- Riley es familia lejana, necesitaba comida, ropa y un baño.

Exhalé sonriendo burlonamente mientras veía cómo Camille se relajaba por la información.

-Gracioso como aún no me han dado ninguna de las tres.

Cohen me fulminó con la mirada, rasgo que devolví con prepotencia. Un carraspeo interrumpió la batalla que tenían el negro y el azul haciéndome regresar del breve letargo.

-¡Ya te siento parte de la manada!- chilló la culpable aplaudiendo con emoción- yo puedo ayudarte a adaptarte, en especial puedo ayudarte a cambiar esas fachas que cargas.

Así que ella será la primera garganta... Interesante.

Mi loba aulló por fin en sincronía conmigo y mis labios formaron una sonrisa hipócrita que ella imitó con las mismas ganas.

-¡Futuro Alpha Cohen!- Douglas apareció al final del corredor caminando aprisa una vez nos reconoció- les busqué en el salón pero ya se habían ido.