Capitulo 32

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Estaba mareada. Maldición; Muy mareada.

-¿Estas bien?- todas me miraban.

-Estoy bien, no me miren así- sonreí bajando la mirada a mi plato y continuar comiendo.

-Yo opino que Sooyoung deberías...

-Tu no opinas nada Yoona- la miro mal Yuri y tomo mi mano por la mesa- Podemos ir a la habitación si quieres.

-Dije que estoy bien- mire a Jessica que solo mantenía la vista puesta en su plato sin decir nada- Es solo que estoy un poco mareada por no comer temprano.

-Deberíamos llamar a su mamá- susurro YoonA.

-Yo voy- se puso de pie Jessi caminando afuera del restaurante.

Todo se quedo en silencio, mi mareo se estaba poniendo peor a cada minuto. Esto no estaba bien.
Pero es que había tomado las gotas, tarde pero las había tomado. No tenia porque sentirme asi. |Han de ser los efectos de tus últimos días| no, no puede ser.

-Esta triste- dijo YoonA viendo la puerta- Se siente culpable.

-No tiene porque- levante mi vista a ella.

-Prometió cuidar bien de ti.

-Yo lo hubiera hecho mejor- comento Yuri apretando con fuerza mi mano.

-No hagas esto Yuri- cerré mis ojos con fuerza y abriéndolos para ver a mi alrededor borroso.

-Toma agua.

No se en que momento Yuri se puso de pie y paso mi brazo por su cuello y ya estábamos caminando hacia el hotel de nuevo. Pero mi vista estaba mejorando y madre estaba frente a mi.

-¿Como te sientes?

-Mejor- admití tallando mis ojos.

-Vamos a tu habitación- me susurro y sentí los brazos de mi padre cargarme.


***

-¿Listo?

-Si.

-El viaje esta reservado verdad?

-Si mamá.

-Bien.

No quiero irme. No puedo irme. Quiero que pase aquí, junto a Jessi. Quiero morir en sus brazos por la noche, dormir y no despertar. No, no, no...

-No- mi voz sonó áspera y abrí los ojos con mucha lentitud.

-Hola bebé- escuche la voz de mi padre y me gire a verlo sonreír. Estaba en una cama del hotel, no sabia en que habitación pero escuchaba al pequeño gato maullar y a alguien llorar.

-No me quiero ir- dije sintiendo mi garganta doler y mi cuerpo pesado. Las luces estaban encendidas y era de noche. Había pasado casi toda mi tarde dormida o desmayada, lo que sea.

-Esta bien Soo- mi madre se apareció en mi campo de visión- Ven, toma agua- tomo mi nuca como si fuera una bebé dándome un  vaso con agua del que apenas pude tomar un poco sin ahogarme.

-Están listas las maletas- la voz de Yuri lleno mis oídos. Y no solo porque fuera ella, si no porque su voz estaba rasposa. Había llorado y aun no sabia de quien era el otro llanto que se escuchaba a lo lejos.

-Muchas gracias Yul- le agradeció mi madre y se giro a verme de nuevo. Intente incorporarme sin sentir mis brazos flaquear hasta lograrlo con su ayuda.

Mire la habitación por completo deteniéndome en una esquina donde estaba YoonA de frente a la pared agachada con Jessica frente a ella abrazando sus rodillas. Era su llanto. Y nunca la había escuchado peor que en ese momento. Lloraba mucho, y no se detenía a silenciar sus gemidos de dolor.

·Mes De Amor·Donde viven las historias. Descúbrelo ahora