3. LA NOVIA REBELDE DEL DEMONIO. (Evil 3)

Rendicion al deseo

CAPÍTULO 10

Tanto él como Helena había dejado ese día por la paz. Se habían alejado para luego cada uno tomar su camino sin rechistar.

Hex por lo tanto se había ido a club a tomar unas cuantas copas y tener un buen polvo con una hembra sexy, así lo había hecho hasta aburrirse.

Llego a su departamento, todo estaba tranquilo, Kai estaba tirada en el sillón de cuero dormida, había una bandeja de comida en la mesa por lo que era para él.

Se encaminó al cuarto, agarro una sábana y volvió a salir, se la puso a Kai para que estuviera más cómoda, decidió comerse lo que había dentro de la bandeja de plata, salmo con una sopa de elote con ajo, tres rebañadas de pan de avena con miel, un vaso de jugo de naranja, dos tostadas.

Sonrió. Kai sabía cuánto adoraba esa comida por lo que se la hizo, disfruto cada bocado hasta terminar todo. Levanto a Kai y la llevo a la cama del cuarto de invitados donde la arropo.

Se fue a su recámara, dejándose caer en el mullido colchón pensó en ese día,jamás follaba con una mujer pensando en otra y ese día lo hubo hecho. Imagino que se follaba a Helena mientras se cogía a otra y eso era descabellado.

En primera, a él no le gustaba Helena, segunda, prefería las esbeltas y altas mujeres, tercera, le gustaban las mujeres sensuales y seguras, que no esperaban nada más que una follada y nada más.

Helena no era ese tipo de mujeres, conocía su pasado y eso le decía el tipo de mujer que era, que espera corazones y flores, para él eso era una completa basura y desperdicio. No creí en el amor, ni en sus variables.

Cerró los ojos y su mente recreó a helena sonriéndole provocativamente, sintió la punzada de deseo en la entrepierna, su pene alzándose bajo su pantalón, pulsando e hinchandose ante esa visión y gruño, molesto y excitado al mismo tiempo, enojado abrió los ojos, golpeo con fuerza el colchón.

Maldita humana, ¿que le había hecho? No podía sacarla de su mente, ni decir de su sistemas porque de pensar en ella se ponía duro y eso no le había pasado antes hasta el día de hoy.

Gruñendo se levanto y fue a tomar una ducha fría, a pesar de que había tenido una orgía con varias hembras seguía excitado, no se iba a masturbar. !jamás!.

El ti embree sonó. Cerró la llave de la regadera, coloco una toalla en la cintura y salió del baño, camino por el cuarto hasta la puerta y salió, ¿quién demonios seri? No estaba de un humor para tratar con nadie .

Camino por el pasillo, esquivó los muebles pulcramente limpios y abrió la puerta con una cara de pocos amigos. Su pene se alzo ante la bruja que nublaba su mente en esos momentos.

Helena estaba con un pequeño short negro, un top del mismo color que hacia ver sus grande pechos más voluminosos, su cabello suelto cayendo en ondas y no llevaba nada de maquillaje y eso la hacia ver más bonita...

- Hey... -lo saludo ella-

- ¿qué haces aquí? -ignoro el saludo, no estaba de un humor para ser amable-

Ella le rodó los ojos, le alzo más las cajas de papas fritas, dos donas de chocolate y dos vasos de coca cola.

- ¿vemos una película?

Quería hacer más que ver una película pero no iba hacerlo, ella no era su tipo. Hizo se hizo a un lado para dejarla pasar, miro el contoneo de sus caderas con ese short pequeño, y su polla palpitó por que quería acción.

La vio inclinarse en la mesilla de la sala para dejar las cosas y ¡oh joder! La tela del short se pegó más a ese perfecto culo respingón y su pene palpito e hincho más.