CAPÍTULO 8
Esbozó una sonrisa cuando la cabeza del demonio rodó hasta su pies, la aplasto nada más llegar a él.
Observo su obra maestra, no había ninguna parte de las paredes lilas que no estuviera manchado de sangre, podía decirse que ese color quedaba mejor que anterior.
Los cuerpos desmembrados yacían por doquier, unos tenían abierto la caja torácica dejando expuesto el interior, otros degollados, otros sin miembros del cuerpo.
No había ninguna parte del suelo que no estuviera lleno de sangre, había sido tan fácil matar a estos idiotas que en menos de cinco minutos hubo acabado con todos y ninguno vivo a excepción de aquella skell aterrorizada detrás de unas mesas.
Camino lentamente hasta donde estaba, sus botas aplastaban los charcos de sangre haciendo un ruido "plash" continuo a como iba caminando.
Sus manos estaban llenas de sangre y de sus dedos goteaban pequeñas gotas de color carmesí.
— ¿qué tenemos aquí? –hablo pausadamente para influir terror en el sistema de la hembra– ¿un regalo? ¿Uno juego? O mi cena?
Se pasó la lengua por los labios aún algo llenos de sangre, saboreo la exquisitas de elixir y eso hizo que la adrenalina y la sed aumentarán a partes iguales. La hembra no iba a salir con vida eso era seguro, él disfrutaría de torturarla.
— ¿donde está Halk? —pregunto estando cerca de ella–
Sus ojos verdes reptiles lo retaban, para demostrarle que no estaba jugando agarro uno de los cuernos de su cabeza y lo quebró a raíz haciéndola gritar.
— no me gusta repetir nada, pero lo volveré a decir ¿donde está Halk?
Estúpida o valiente, en realidad estúpida, se lanzó a él intentando apuñalarlo sin mucho esfuerzo la agarro del cuello estampandola contra la pared.
Chasqueo la lengua por la gran estupidez de la hembra, al ver que no lograría hacerle nada, comenzó a batirle las pestañas.
— te gusta lo difícil –sonrió y con su mano derecha agarro un brazo delicado y lo torció en un ángulo incorrecto– sabes, adoro lo difícil y más cuando eso conlleva a torturar.
Saboreo el miedo abrasante que la rodeo, guió su mano a la pequeña cadera donde hizo presión en el hueso así quebrándolo, luego con la uñas arranco piel como tiras de tocino, la sangre manchó sus manos.
— ahora que has comenzado el juego pequeña vas a disfrutarlo –susurro en su oído–
Dos cadenas rodearon el cuerpo pegándola así a la pared, guió su mano al vientre y lo traspaso con su fuera una gelatina, trituro los intestinos haciéndolo un licuado de "malteada de viseras"
Le irrito el grito por lo que le arranco la lengua y con la misma le perforo el corazón, lamió la sangre de la camisuras de la boca y gimió de placer, --oh-- cuánto adoraba la sangre ese era uno de sus bebidas favoritas.
Sacó la mano del vientre de la hembra así logrado que todo en su interior saliera como una cascada.
Con las dos manos abrió en dos su pecho dándole el final que tanto desea la skell. Hizo desaparecer las cadenas y el cuerpo cayó al suelo, uniendo se a los demás cuerpos.
— creí que ibas a resistir más –suspiro–
Le aplasto el cráneo y se fue de ahí, Helena lo estaba esperando en la camioneta con un pack de McDonald.
Chasqueo los dedos para cambiar su ropa a una más informal, un pans negro, una playera negra.
Subió y arranco, salió a la carretera, estiro lo mano para encender el estéreo, nirvana comenzó a sonar, luego le quitó la papa de la boca a Helena.
ESTÁS LEYENDO
3. LA NOVIA REBELDE DEL DEMONIO. (Evil 3)
RomanceLos polos opuestos se atraen y la atracción de ellos era innegable. Rebelde, obstinada y desafiante era lo que distinguía a Helena. Cruel, sádico, dominante y Condenadamente pecaminoso como el mismo infierno, su nombre provenía del infierno y su act...