3. LA NOVIA REBELDE DEL DEMONIO. (Evil 3)

El comienzo del fin.

CAPÍTULO 42

Hex se coloco enfrente de su madre para intentar ¿que? Quizás una pelea de gatas o quizás una masacre, las mujeres podían ser muy peligrosas.

— Este...–comenzó a decir–

Su madre sonrió dulcemente a Kari.

— haz crecido mucho Kari, eres una mujer muy hermosa y me hace feliz que estés con Khaled.

Abrió los ojos, su madre no parecía estar enojada con Kari, iba a decir algo cuando su madre volvió hablar.

— pero si vuelves a tratar a mi hijo así, te voy a desmembrar toda y ni Khaled lo impedirá. –palabras filosas– aclarado este punto, es un gusto conocerlas.

Lea soltó una carcajada y él le dedicó una mirada sería, no era momento para reír.

— Madre, me halaga tu preocupación pero puedo cuidarme sólo —protesto– y han hecho llorar a Alanna.

Cargo a su princesa que parecía no tener fin a su llanto, la arrullo mientras Lea llevaba a kamelia a la sala.

— Tranquila nena, esas brujas te hicieron llorar ya le vamos a azotar las nalgas por malas.

Alanna le sonrió como si le entendiera y no duda de que lo hubiera hecho.

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Helena 

Estúpido e idiota de Hex, pero más ella por pensar que él muy maldito la quería, había pensado en darle una oportunidad pero ahora no, que se fuera con esa demonio de actriz porno que sólo iba a usar su cuerpo.

Furiosa pateo una piedra haciendo que la piedra cayera dentro de la fuente de agua, el color de agua era un rosa pálido al contraste del sol que que de un naranja, todo en el infierno era diferente al mundo humano.

Frustrada y herida sentimentalmente fue hasta la banca frente a la fuente, el aire tibió le acaricio la piel y se sintió bien por unos instante.

Era una idiota al creer que Hex cambiaría y que llegaría a amarla pero no, ahora veía que tipo de mujer le gustaba al bastardo ese, se acaricio el redondo vientre.

Estaba sumida en sus pensamientos que no moto cuando la mujer que estuvo con Hex se sentaba a su lado.

Era muy hermosa, alta, curvilínea, demonio, piel morena, unos hermosos ojos azules, cuernos y unas grandes e imponentes alas al igual que una cola larga que al final terminaba como la punta de una flecha, la demonio estaba vestida de una forma sencilla que la hacia ver más hermosa de lo que ya era.

— ¿perdiste a Hex? Búscalo entre las piernas de una de las sirvientas –gruño molesta–

— Es un hermoso atardecer –la suave voz de la demonio era tranquila– ¿no lo cree?

Miro el cielo naranja y rosado, en efecto era demasiado hermoso para existir algo así pero lo hacia y eso lograba aumentar sus hermosura.

— si, ¿que quieres? No voy a pelear por Hex ya estoy harta de que me lastime. –susurro– tu eres su tipo toda curvas y perfección...

— ¿Mío...? —divago la demonio– ¿el físico importa?

Soltó una risita amarga, claro que importaba en este mundo, los hombres prefería a las mujeres con belleza y curvas a un con cerebros huecos, no es que Desiree y Kari lo fueran pero ellas vivían en una burbuja que sus esposos le crearon para protegerla al contrario de ella no tenía a nadie estaba sola, bueno ya no, tenía a su Gomita.

— ¿eres estúpida o que? –ella no era grosera pero está mujer la irritaba mucho–

— la inteligencia no se mide por lo que sabes sino por como actúes –respondió la demonio– tu problema es que no te aceptas tal y como eres, tu no te ves hermosa ¿como esperas que alguien te vea hermosa si tu no te consideras hermosa?